(Minghui.org) Soy una practicante de Falun Dafa (también llamado Falun Gong), de 63 años de edad de la provincia de Hubei y practico Falun Dafa desde 1994.

Consiguiendo una nueva vida

Desde la infancia, sufrí muchas enfermedades y estuve hospitalizada durante muchos años. Cuando tenía nueve años, contraje meningitis aguda y casi muero. Esta enfermedad provocó "dolores de cabeza vasculares". Desde entonces, no dormía bien. A lo largo de los años tuve también otras enfermedades y gasté decenas de miles de yuanes en hospitalización y medicinas. No solo sufrí, sino que también traje pérdidas financieras y problemas a mi lugar de trabajo y a mi familia.

Una compañera de clases asistió a las conferencias del Maestro Li Hongzhi (el fundador de Falun Dafa) en Chenzhou, Provincia de Hunan en 1994. En pocos días, su tumor ovárico desapareció y su tez pálida se tornó rosada y radiante. Otra compañera de clases que tenía la misma enfermedad comenzó a practicar Falun Dafa. En pocos días, su tumor ovárico desapareció.

Vinieron al hospital a verme y me dieron sus buenas noticias. Dije que quería practicar Falun Dafa e inmediatamente obtuve el libro Falun Gong. Leí el libro de principio a fin esa noche y fui al único lugar de práctica que había en la ciudad para aprender los ejercicios al día siguiente.

Una semana después, mi dolor de cabeza desapareció y me recuperé de todas mis enfermedades poco después. Podía dormir toda la noche y comer lo que quisiera. Me sentía enérgica y mi cara estaba sonrosada y radiante.

Shifu Li me dio una nueva vida. Les conté a todos los que conocí sobre el poder de Dafa. Comprendí el verdadero significado de la vida, la belleza y preciosidad de cultivar la Verdad, la Benevolencia y la Tolerancia.

Eliminando los apegos a la fama, al interés personal y al sentimentalismo

Jiang Zemin, el exjefe del régimen comunista, lanzó la persecución a Falun Gong en julio de 1999 e implementó una política de "difamación, destrucción económica y eliminación de sus cuerpos físicos".

Como hacía los ejercicios matutinos en el estadio de la ciudad y distribuía material de aclaración de la verdad en las zonas rurales, fui expulsada por el PCCh y despojada de todos los puestos oficiales y de mi trabajo. Recibí un miserable subsidio de subsistencia de 130 yuanes al mes.

Mi esposo era un funcionario a nivel del buró y fue criticado. En las reuniones del buró de la ciudad, donde Falun Dafa fue calumniado, le dijeron a mi esposo que se sentara en la primera fila y mostraban su rostro en primer plano y fue transmitido repetidamente en los noticieros de televisión de la ciudad.

Me uní a la gira de primavera rural de mis compañeros. El alcalde dijo en la conferencia de seguridad pública de la ciudad que yo iría a Beijing a pedir por el derecho a practicar Falun Dafa. Mi lugar de trabajo construyó una celda y me detuvo ilegalmente durante más de 20 días, lo que nos causó un gran daño a mí y a mi familia.

Mi esposo me obligó a divorciarme de él, alegando abuso mental. No nos dejó ni un centavo a mí ni a mi hijo. En ese momento, mi hijo estaba en su segundo año de universidad.

El departamento de policía envió a docenas de personas equipadas con cámaras para rodear mi casa durante un día y una noche en abril de 2014. Escapé y me quedé sin hogar durante dos años y medio.

Después del divorcio, la única propiedad que tenía me la quitó mi esposo y su cuñada por fraude. Falsificaron firmas y sobornaron al notario.

A pesar de todo eso, seguí estudiando el Fa. No me derrumbé, sino que me mantuve firme. Me acordé de las palabras del Maestro: «Difícil de soportar, se puede soportar; difícil de hacer, se puede hacer» (Novena Lección, Zhuan Falun).

Durante los tres años siguientes, visité las oficinas gubernamentales y notariales pertinentes y les hablé de las personas que me hicieron daño. Le expliqué las regulaciones pertinentes al trabajador notarial, se conmovió y se disculpó. La falsa certificación notarial usada por mi exesposo fue revocada.

Después que la autoridad de vivienda entendió los hechos, le dieron instrucciones a la cuñada de mi exesposo, que ocupaba mi casa, para que me compensara. Según el precio de mercado, había perdido más de 200.000 yuanes. Sin embargo, me maldijo y solo me entregó 20.000 yuanes. En ese momento, seguí las enseñanzas de Shifu: "Mientras soportaron todo esto, ustedes no se rebajaron a su nivel, y su corazón estuvo muy calmado. No devolvieron el golpe ni insulto a su agresor" (Exponiendo el Fa en Sídney).

Le estreché la mano y le dije que cultivo Verdad- Benevolencia-Tolerancia, que si no fuera por eso nunca dejaría que se saliera con la suya, si no me pagaba los 200.000 yuanes que me debía. Como practico Falun Dafa, me gustaría agradecerle por darme la oportunidad de elevar mi xinxing.

Por ser una mujer soltera de 60 años, mis concesiones y tolerancia hicieron que los funcionarios de la autoridad de vivienda admiraran mis acciones.

Los familiares que creyeron en Falun Dafa fueron bendecidos

Mi madre, en mal estado de salud, se jubiló a los 40 años. Cuando me convertí en practicante, ella tenía más de 60 años. Después de presenciar los cambios en mi salud, ella recitaba a menudo "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". También le enseñó a su hermana mayor, que tenía más de 90 años, a recitar "Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno".

Hace dos años volví a la casa de mi hermano menor para visitar a mi madre. Mi tía mayor también estaba allí. Se alegró de verme y me dijo: "Ahora puedo recitar las nueve palabras y seguirlas". Le pregunté: "¿Cómo sucedió?".

Ella dijo: "Mi nuera menor no era buena conmigo desde hacía muchos años. Cuando tuvo que cuidarme, rompía cosas como una loca y me maldecía. Lloré y quise morir muchas veces. En los últimos años, ya no me sentía enojada con ella, la toleraba. Cuando no podía dormir por la noche, me sentaba y recitaba, Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Ahora su nuera es buena con ella. Su hijo vino a mi casa felizmente en busca del libro de Falun Dafa para leer.

A lo largo de los años, fui perseguida repetidamente. Mi hijo no solo nunca se quejó, sino que me apoyó. Él les contó a sus colegas en su trabajo los hechos sobre Falun Dafa, me ayudó a transcribir las enseñanzas del Fa y guardó todos los libros Zhuan Falun en un lugar seguro, cuando se mudó a un nuevo lugar.

Recibió grandes bendiciones. Es guapo, saludable y recibe un buen salario. Su jefe y compañeros de trabajo lo aprecian. Para garantizar mi seguridad y para tener un mejor ambiente de vida, cambió de trabajo varias veces y ahora trabaja en la ciudad de Shenzhen. Lleva casado siete años y le va muy bien.

Shifu dijo, "...cuando una persona práctica, toda la familia se beneficia…" (Exponiendo el Fa en el Fahui de Australia).