(Minghui.org) Cuando comencé a practicar Falun Dafa, pensé que estar involucrado en actividades que informaran a la gente sobre Falun Dafa era cultivarse. Por eso, me elevé muy lentamente.

Cuando vi a dos practicantes en un conflicto, critiqué a uno de ellos sin cansancio. Ella, al comienzo fue tolerante con mi crítica, pero más tarde, me contestó. Al final, los dos nos sentimos muy tristes.

Fue después que recordé que el Maestro nos pide que miremos para adentro al enfrentarnos con conflictos. Cuando lo hice, encontré muchos apegos, incluidos una mentalidad de ostentación, competitividad, validarse a uno mismo, no ser compasivo, y más. Estos rasgos se desarrollaron porque había sido adoctrinado por el partido comunista chino (PCCh).

Estaba sorprendido e inmediatamente envié pensamientos rectos para eliminarlos. Al día siguiente, cuando esta practicante me visitó, dijo, “Encontré muchos de mis apegos anoche”. Le conté que yo también, y ambos nos reímos. Experimentamos el poder de mirar en nuestro interior.

Al leer las enseñanzas del Fa, comprendí que la vida de un cultivador está arreglada y nada pasa por accidente. Si miramos para adentro constantemente, no habrá lugar para los apegos como competitividad, envidia, resentimiento, o lujuria. No mirar para adentro es lo mismo que aferrarse a los apegos. Entonces así el Maestro no podrá ayudarnos.

Proceso de cultivación

Era la única persona en mi grupo que tenía equipo de impresión, entonces era responsable de producir materiales de aclaración de la verdad para mi área. La demanda de material informativo era alta, porque muchos practicantes estaban comprometidos en hablarle a la gente sobre Dafa.

Los practicantes hablaron sobre instalar sitios de producciones de materiales en sus hogares. Me pidieron que sea el responsable de comprar los equipos y enseñara a quienes estaban dispuestos a instalar un sitio. Estas actividades fueron un proceso de cultivación, ya que muchos apegos surgieron, incluidos impaciencia, miedo, y búsqueda de logros.

Instalaron una cámara de vigilancia cerca de la casa de unos practicantes. Temía que me vieran llevando un equipo voluminoso a la casa de alguien. Pero inmediatamente eliminé ese miedo con pensamientos rectos. Cualquiera sea la situación en la que me encuentre, tenía presente en mi mente que el Maestro me estaba cuidando. Mi miedo después desapareció.

También, entrenar a compañeros practicantes a usar los equipamientos realmente desafió mi paciencia. Recordé que los seres divinos son pacientes y le pedí al Maestro eliminara mi impaciencia. Sabía que debía estar tranquilo todo el tiempo para asistir a otros en hacer las tres cosas que debemos hacer bien.

Mi agenda estaba llena, con estudiar las enseñanzas, hacer los ejercicios, contarle a la gente los hechos sobre Falun Dafa, y cuidar de mi esposa. Pero siempre me manejé para tener todo listo para las 6 pm, previo al envío de pensamientos rectos. Creo verdaderamente que el Maestro estira el tiempo para mí y me asiste.

Dando a conocer la bondad de Dafa

Era muy extrovertido y tenía muchos seguidores en las redes sociales. Después de empezar a practicar Falun Dafa, organicé reuniones durante las cuales hablé sobre cómo me beneficié de Falun Dafa.

Una colega que conocía hace 30 años se mudó cerca. Ella se sorprendió por los cambios en mi personalidad y salud. Según ella, solía ser muy malo en el trabajo, pero ahora parecía muy amable. Cuando vio que mi madre de 90 años parecía mucho menor que su edad, dijo: “Falun Dafa es bueno. ¡También quiero practicar!”.

Después de eso, le habló a la gente sobre Falun Dafa. En una reunión de ex compañeros, llevé tarjetas de felicitaciones y folletos de Dafa y se los ofrecí a todos. Ella los animó a leer los materiales.

Cuando organicé una cena de gala para mis ex compañeros, una tenía mala reputación y no era popular. No la hubiera invitado si no fuera por Falun Dafa. Les pregunte a mis compañeros si les molestaría su presencia. Inspirados por mi compasión con la mujer, estuvieron de acuerdo con invitarla. Pasamos un buen momento.

Cuando me preguntaron porque invité a alguien como ella, les explique que mi Maestro (Li Hongzhi) me enseño a tratar a las personas con compasión. Desde entonces, los demás se han vuelto más tolerante con ella y los viejos resentimientos se resolvieron gradualmente.

He vivido con mi hijo y la hija de mi esposa por más de una década y nunca he tenido conflictos con ellos. Mi amiga de la secundaria estaba muy impresionada por esto, ya que tiene muchos problemas con su familia. Cuando me pidió un consejo, compartí con ella los principios de Falun Dafa.

Ella puso en práctica lo que le dije, y su relación con su familia mejoró. Recita “Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno” y dice que esta agradecida con Falun Dafa.

Aclarado la verdad a oficiales de policía

Hace dos años, le di un dispositivo USB con información sobre Falun Dafa a un joven maestro. Estaba muy ansioso por leerlo, entonces abrió los archivos en su computadora de la oficina, con el decano y su asistente mirando. Cuando el decano vio que era, me reportó a la oficina del presidente.

Cuando me enteré, quise ver al decano, pero se rehusó a hablar conmigo. Hablé con su asistente. Unos días más tarde, la policía me arrestó en el trabajo. El jefe de la división de seguridad nacional me estaba esperando. Me preguntó qué había en el dispositivo, pero me rehusé a responder sus preguntas. Después comenzó a hablar mal de Falun Dafa.

Le pedí que mencionara la ley que prohibía a Falun Dafa. Le pidió a sus colegas que le trajeran una copia de la ley que prohibía Dafa, pero no pudieron encontrar ninguna. Le dije: “No la vas a encontrar porque Falun Dafa no es ilegal”. Se quedaron mudos. Al final, me dijeron: “Solo practica en tu casa y no repartas ningún material en nuestra jurisdicción”.

Unos días después, llevé una copia de la ley pertinente a su oficina: Notificación Nro. 39 del ministerio de seguridad pública sobre la identificación y prohibición de las organizaciones sectarias identificando 14 cultos. Por supuesto, no incluía a Falun Dafa. Hice un viaje especial a la división de seguridad nacional, pero el jefe no estaba allí, así que les mostré el documento a los demás oficiales de policía.

Después preguntaron sobre las demandas contra Jiang Zemin, el exjefe del PCCh que lanzó la persecución a Falun Dafa. Les expliqué porqué debería ser procesado y porqué eso era lo correcto. Les impresionó que no tuviera miedo.

Un día, vi unos carteles hablando mal de Falun Dafa en una cartelera de vidrio en mi área. Fui a la oficina local de la 610 para hablar con ellos al respecto. Le pregunté al oficial si creía que los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia eran buenos. Dijo que lo eran. Le dije que había visto un cartel con los tres caracteres de "Verdad, Benevolencia, y Tolerancia" que también contenía información despreciativa. Le aconsejé que no hiciera nunca más nada de eso, que no sería bueno para él ni para su familia.

Tras los años, me crucé con algunos oficiales de policía que estaban envenenados por la propaganda negativa. No quería que cometieran crímenes sin saberlo, así que les hablaba siempre que podía. Algunos de ellos han entendido la verdad y protegen a los practicantes de Dafa cuando pueden.