(Minghui.org) He experimentado muchos fenómenos extraordinarios en mi camino de 20 de cultivación de Falun Dafa. Los ejemplos que describo aquí son apenas unos cuantos de las incontables cosas que he visto y experimentado.

La desorientación de mi hijo se cura

Durante el verano de 1999, la profesora de mi hijo estaba preocupado por su desempeño y me llamó a su oficina para informarme que parecía estar ausente mentalmente y mostraba signos de un estado mental anormal.

Fui a hablar con ella, y me describió que mi hijo era incapaz de contestar las preguntas más simples de matemáticas y siempre parecía distraído. Cuando llegué a casa, lo encontré sentado en su escritorio sosteniendo un libro en sus manos, pero la expresión en su cara era pálida.

Mi esposo lo miró y le preguntó: “¿Estás bien?”. No respondió. Yo estaba segura de que estaría bien, pero mi esposo estaba muy preocupado.

Luego me enteré de que se había estado quedando en secreto toda la noche mirando video juegos en su computadora.

Shifu enseñó:

“La enfermedad mental es simplemente que la conciencia principal de la persona está demasiado débil. ¿Hasta qué grado llega tal debilidad? Es como esa persona que nunca puede ser el jefe de su propio hogar; el espíritu primordial principal de este enfermo mental es así. Él no quiere hacerse cargo de este cuerpo, él mismo está siempre en un estado de ofuscamiento y no puede reanimarse. En ese momento, la conciencia asistente y los mensajes externos quieren interferirlo” (Zhuan Falun).

Me senté a su lado y le pregunté: “¿Cómo estás?”. Comenzó a hablar incoherente. Sentí un escalofrío en mi espalda y supe que no era su verdadero ser el que hablaba.

Conseguí su atención y le dije: “No eres tú quien me está hablando”. Se sorprendió y dijo: “¿En serio, estás segura?”. “Sí, estoy segura”. Comenzó a balbucear de nuevo, pero lo detuve y le hablé sobre mi entendimiento de lo que estaba experimentando basada en lo que aprendí de estudiar el Fa. Escuchó atentamente y asintió con su cabeza mostrando que aceptaba mi explicación.

Extendí mi brazo para tocar su hombro. Cuando lo toque, saltó de su asiento. Parecía como si hubiera una malla eléctrica a su alrededor, y se electrocutó cuando lo toqué. Mi esposo estaba asustado, pero yo me mantuve calmada y le dije a mi hijo: “¿Qué tal si te leo Zhuan Falun?”. Le leí la Primera Lección, y escuchó todo.

El Fa entró en sus oídos y suprimió las cosas malas que lo estaban perturbando. Cuando terminé la lección, se durmió profundamente.

Comencé a leerle Zhuan Falun todos los días, y también practicamos los ejercicios juntos. Pronto se relajó y recobró su buen ánimo. Gradualmente, una sonrisa reemplazó su expresión facial de miedo y su rostro recobró su brillo.

En solo siete días, sus síntomas de desorden mental desaparecieron completamente. Su desempeño en la escuela se disparó, y su maestro elogió su atención. Mi esposo y yo nos alegramos. Toda nuestra familia ha sido bendecida con la gracia de Dafa.

Yo solía estar muy débil y me enfermaba muy a menudo antes de comenzar a cultivarme. Poco después de tomar la práctica de Dafa, recuperé mis fuerzas y salud. Comencé a caminar con un paso rápido y una sonrisa en mi cara. En ese momento, parecía como si un milagro estuviera arrasando por toda China. Falun Dafa estaba creciendo y todos los que comenzaban a practicar estaban experimentando buena salud y mejoramiento en sus vidas de diversas maneras. Mi suegra atestiguó mi transformación y estaba muy impresionada. Apoyaba Dafa, incluso después de que fuera atacado.

Poco después del episodio con el problema mental de mi hijo, nuestro mundo se dio vuelta. El PCCh lanzó una persecución extensiva para erradicar a Falun Dafa. La fuerza completa de los medios de comunicación enlodaron a Dafa con una constante oleada de noticias falsas, rumores y mentiras sobre la práctica. La persecución sin precedentes continua hasta este día.

El apoyo diligente de mi suegra

Junto con otros cientos de miles de practicantes inocentes, fui enviada a un campo de trabajo forzado y perseguida por negarme a renunciar a mi fe.

Con una fuerte fe en Dafa, fui liberada y regresé a casa. Mi suegra mi abrazó y lloró. Dijo en voz alta a todos en la casa: “Falun Dafa no es supersticioso. ¡Es la ciencia más alta! ¡Falun Dafa es Bueno!”. Todos se quedaron en silencio.

Incluso en esos días más oscuros cuando la persecución y desinformación del PCCh contra Dafa estaban desenfrenados, ella entendió que la práctica es buena y tuvo el coraje para hablar positivamente de ella. A pesar de que mi suegra nunca fue a la escuela, podía distinguir lo bueno de lo malo, y siempre se paró del lado del bien.

El pelo gris de mi abuela se pone negro

Mis parientes se reunieron para el año nuevo chino. Cuando estábamos teniendo nuestra cena de celebración, mi sobrino nos señaló a todos: “¡El pelo de la abuela se está poniendo negro!”. Todos nos acercamos para mirar. Verdaderamente, había pelo negro creciendo debajo del pelo gris. Todos estaban asombrados. Nadie había visto algo así antes. Le expliqué a mi familia que en medio de la persecución y la difamación contra Dafa, la abuela siempre apoyó mi práctica. No tuvo miedo de hablar cuán buena es la práctica, y ayudó a otros a que entiendan que tan maravilloso es Dafa. Que no tienen nada que ver con lo que el PCCh dijo ser.

Poco después que pasó el año nuevo, fui arrestada de nuevo. Esta vez me encerraron y persiguieron por siete largos años. Para el tiempo que fui liberada y regresé a casa, el pelo de mi suegra realmente volvió a ser negro como antes. Vivió hasta los 100 años y murió pacíficamente sin ninguna enfermedad. Le dije a mi familia que como ella siempre apoyó Dafa y se negó a creer en las mentiras del PCCh, fue bendecida y seguramente iría al cielo.

Billetera perdida

Hace poco, tomé un bus para conseguir un documento personal nuevo. Visité a una amiga en el camino por lo que llegué tarde a casa. El cierre de mi mochila estaba roto, así que la apoyé en mis piernas para asegurarme de no perder nada.

Cuando me levanté a la mañana siguiente y abrí la mochila, no tenía la billetera. Grité: “¡Perdí mi billetera!”. La pareja con la que me estaba quedando me ayudó a buscarla. Movimos todos, pero no había rastro de esta.

Mi corazón se congeló y el miedo me tomó. Miré hacia dentro tratando de encontrar alguna brecha. Me di cuenta de que estaba movida por las emociones, y que tenía que calmarme y eliminar mi miedo y reforzar mi fe en Dafa. Sabía que para poder mejorarme según Dafa, no podía permitir omisión alguna en mi carácter.

Unos practicantes más llegaron y todos enviamos pensamientos rectos para negar los arreglos de las viejas fuerzas. Cuando el Maestro Li, fundador de Falun Dafa, enseñó a sus discípulos cómo enviar pensamientos rectos, Él dijo:

“… piensen en eliminar la maldad en los Tres Reinos, mientras ponemos verticalmente una mano frente al pecho (li zhang), usando pensamientos rectos por cinco minutos, que será suficiente.” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Canadá).

Recite este pasaje del Fa palabra por palabra para eliminar los malos elementos en mi mente. Luego limpié los factores perversos en otras dimensiones. Mientras estaba sentado tranquila, tuve el pensamiento en mi mente: “Shifu por favor, llévame dónde está mi billetera”.

Cuando terminamos de enviar pensamientos rectos, para mi sorpresa, mi billetera estaba en mi mochila. Grité: “¡Mi billetera regresó!”. Los practicantes vinieron para ver por si mismos. Derramé lágrimas, y los practicantes dijeron: “Ábrela y mira”. La abrí y encontré todo el dinero y los documentos. Fue como si la billetera nunca se hubiera perdido.

La benevolencia de Shifu nos tocó profundamente. La experiencia mostró que cultivarnos en Falun Dafa es un camino divino. Soy tan afortunada de ser una practicante, y ¡estoy eternamente agradecida por la compasión infinita de Shifu!