(Minghui.org) Tanto el Sr. Chen (alias) como su esposa son practicantes de Falun Dafa. Su esposa no era muy diligente en su cultivación, y tenía mal temperamento. Él aceptó un trabajo fuera de la ciudad para ayudar a pagar la deuda de una casa recién construida, y durante ese tiempo dejó de ser diligente en su camino de cultivación.

Mejorando colectivamente como un solo cuerpo

El Sr. Chen tuvo un accidente de coche a finales de 2017. La Sra. Li (alias) y yo fuimos a visitarlo después del accidente. No estaba herido, pero tenía su mente confundida. Tanto que ni siquiera podía recordar un número de teléfono.

Encontraba algunos problemas al leer Zhuan Falun. Estaba claro para los demás practicantes que su estado de cultivación había causado esta tribulación.

Normalmente habríamos señalado sus problemas de cultivación y hablado con él para solucionarlos, pero decidimos cambiar nuestro enfoque. A través del estudio  del Fa, leyendo los artículos de intercambio de experiencias del sitio web de Minghui, y los consejos del Maestro, comprendimos que las viejas fuerzas habían estado persiguiendo a los practicantes debido a las deficiencias de su cultivación. Nos preguntamos por qué seguíamos cayendo en su trampa.

Sugerí que todos nosotros consideráramos dónde nos quedamos cortos, para que pudiéramos mejorar colectivamente. Luego hablé con su pareja, para ayudarlo a identificar sus problemas de xinxing.

Entonces enviamos pensamientos rectos, y sentimos que nuestro campo se volvió muy puro. Estudiamos Zhuan Falun. Él logró recitar el Fa de memoria.

Dejamos de ir a la casa del Sr. Chen después de aquello. Unos días después, tuvo una recaída y lo llevaron al hospital, lo cual nos alarmó.

Cuando lo visitamos por primera vez, no pudimos hablar abiertamente con él porque otros miembros de su familia también lo estaban visitando.

Cuando más tarde supimos que uno de sus parientes también era un practicante, le enviamos un mensaje al Sr. Chen a través de este pariente, diciéndole que mantuviera pensamientos rectos. Nos enteramos de que decidió jubilarse anticipadamente debido a sus problemas físicos, lo cual, en nuestra opinión, era aceptar la enfermedad. Pensamos en enviar pensamientos rectos para ayudarlo, pero recordamos que no habíamos logrado un buen efecto en situaciones similares en el pasado.

Recordé que nuestro último enfoque funcionó muy bien -cuando el Sr. Chen se encontró por primera vez con la tribulación-. Inmediatamente fui a ver a la Sra. Li y le dije que deberíamos hablar con otros practicantes y pedirles que usaran al Sr. Chen como un espejo para descubrir sus propios defectos, llegar a la causa raíz de los mismos, y luego enviar pensamientos rectos para eliminar sus problemas.

Cuando actuamos como un solo cuerpo, el campo es puro, y todos nos beneficiamos de la actividad y nos rectificamos en este campo. Nuestras acciones también ayudaron al Sr. Chen. Sentí que el Maestro deseó una elevación total de todos nosotros.

Comprender la gravedad de la cultivación

Cuando llegó el fin de semana, justo después de que termináramos de compartir con otros practicantes, el Sr. Chen se había recuperado lo suficiente y estaba siendo dado de alta del hospital. Dejó de lado la idea de jubilarse anticipadamente. Cuando fuimos a verlo a su casa, compartió con nosotros con entusiasmo las pistas que había recibido del Maestro, y su comprensión del Fa. Su pensamiento recto era evidente.

Pero su tribulación no terminó ahí. Debido a que las viejas fuerzas habían visto sus pensamientos, se encontró con un problema tras otro. Sus hermanos y hermana insistieron en ayudarlo a comenzar el proceso de jubilación anticipada. Hicieron uso de su red de contactos para arreglar todo para él, y todo lo que el Sr. Chen tenía que hacer era poner su huella digital en el papeleo. Pero como se había dado cuenta de la gravedad de la cultivación, se negó a firmar.

Sus hermanos trataron de obligarlo a firmar alegando que si no lo hacía, romperían su relación con él. Aunque fue firme en su decisión, alentaron a su hijo a separar al Sr. Chen de otros practicantes y a quemar su ejemplar de Zhuan Falun. Estaba bajo una presión tan tremenda, que tenía problemas para hablar en ese momento.

Una noche, el Sr. Chen vino a vernos a la Srta. Li y a mí. Sugerí: "Como la tribulación fue causada por él mismo, debe mirar hacia adentro, desenterrar la raíz de la causa, rectificarse en el Fa y no quejarse de su familia o parientes. Además, debe pedir disculpas a sus familiares por las molestias que les había causado, y mostrar su actitud firme. Esta sería también una oportunidad para aclarar los hechos a sus familiares. Por último, debía pedirle poder al Maestro".

La Sra. Li y yo le habíamos estado ayudando a enviar pensamientos rectos. No nos atrevimos a aflojar ni un poco esta vez. Nos encontramos con él un par de días después y vimos que su estado mental había mejorado. También nos dijo que había reparado sus relaciones con sus parientes.