(Minghui.org) En 1996, me convertí en practicante de Falun Dafa. En esta época moderna en la que la moral de la sociedad continúa degenerándose día a día, y la gente sigue persiguiendo beneficios materiales, Falun Dafa me transformó. El Maestro Li Hongzhi, el fundador de Falun Dafa, me ha rescatado de las garras de la enfermedad y ha limpiado mi corazón y purificado mi cuerpo. Falun Dafa realmente cambió mi percepción de la vida y de los valores cotidianos.

Las leyes de Dafa me hicieron comprender que el propósito de vivir en la tierra no es para obtener fama, beneficios materiales o fortuna, sino para volver a nuestro ser original y verdadero. En el trabajo, espero siempre cumplir con los estándares de un cultivador y enfocarme cada vez menos en la fama y los beneficios personales. Esto genera  que mis empleados confíen en la rectitud de Dafa.

En 1982, comencé mi carrera como director de fábrica de una pequeña empresa. Trabajé duro para construir un negocio exitoso a partir de una empresa que estaba a punto de clausurarse. Además, resolví muchos de los problemas de contratación de los empleados despedidos. Llegué a ser considerado por las autoridades como alguien de gran influencia en la sociedad.

Varios meses después de que comenzara la persecución a Falun Dafa el 20 de julio de 1999, recibí la visita de los agentes del departamento de policía. Me consideraban una persona que necesitaba ser transformada. Me negué a su demanda de escribir una declaración de garantía donde prometiera no seguir practicando Falun Dafa. También me negué a escribir algún texto para difamar al Maestro y al Fa. En cambio, aproveché la ocasión para contarles a los funcionarios mis propias experiencias de cultivación en Falun Dafa, y cómo conseguí al aprender y aplicar las enseñanzas del Maestro, poder ser útil a otros y a la sociedad en general.

Les dije que sin Falun Dafa, no habría podido soportar las dificultades que encontré mientras persistía en la reconstrucción de mi pequeña empresa. Les hice saber que el Maestro Li me brindó la capacidad de crear un negocio exitoso. Los funcionarios reconocieron que mi ética y calidad de trabajo eran bien sabidas y reconocidas en la comunidad. Por lo que, realmente se quedaron sin razones para seguir impulsando una investigación en mi contra. Como Falun Dafa era tan bueno, me aconsejaron que lo practicara tranquilamente pero en casa. También dijeron que nunca volverían a buscarme por este asunto.

Con las personas con las que hablaba sobre Falun Dafa, tenía que pasar por sucesivas charlas y consejos bondadosos y pacientes, antes de que finalmente pudieran entender la verdad sobre Dafa. De esta manera, atravesé esta tribulación. Al escribir este artículo, me di cuenta de que solo cuando clarificamos la verdad en base a los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, el Maestro puede ayudarnos a pasar la tribulación.

El repartidor dice: "Falun Dafa es bueno"

Todos los años, julio y agosto son las temporadas altas de las exportaciones. Los productos de todas las empresas se someten a pruebas por muestreo y, si la calidad de sus productos no alcanza los requisitos, se devuelven a la fábrica, pero los que pasan este primer test de muestreo se envían para que los sometan a las pruebas definitivas. Algunas empresas no querían que les devolvieran sus productos, así que le daban al personal de la agencia de pruebas algunos regalos y utilizaban dinero para resolver los problemas. El repartidor de mi compañía me contó, a su regreso de la agencia de pruebas, que más de 10 compañías recurrían a tales métodos para resolver los problemas. Solo nuestra empresa no lo hace. Sé muy bien que si lo hiciéramos, estaríamos perjudicando tanto el bienestar de nuestros clientes como nuestra propia reputación.

Como practicante de Dafa, todos los problemas a los que nos enfrentamos cumplen un requisito: Mejorar nuestra cultivación. El Maestro nos lo enseñó:

"Así que mientras los Dafa dizi validan el Fa y salvan seres conscientes, su actitud, estado mental y manera de hacer las cosas son todos muy críticos, porque tales cosas pueden determinar qué cambios tomarán lugar en este mundo" (Enseñando el Fa en el Fahui Internacional de Washington DC 2009).

Para que la compañía sobreviviera a través del ambiente materialista, me traté como un cultivador, exigiéndome en mi comportamiento según los más altos valores del universo: "Verdad, Benevolencia y Tolerancia".

En 2013, nuestra empresa pasó a tener también un gran número de productos que no habían pasado la prueba del muestreo, y por lo tanto tampoco recibían la aprobación final. Esto planteó problemas a nuestro repartidor. Los repartidores de las otras compañías preguntaron por qué nuestros productos habían sido rechazados. Se preguntaron si pasaba porque nuestra empresa no enviaba regalos a los funcionarios encargados de hacer la prueba. Enfadado y ansioso, mi repartidor no me llamó porque sabía que la política de nuestra compañía era no sobornar a los funcionarios de la prueba.

Preocupado por la situación, el repartidor recordó repentinamente que otro repartidor de nuestra empresa le había dicho una vez: "En mis años de experiencia realizando entregas, la espera hasta que la agencia de pruebas me llamaba duraba más de 10 horas y a menudo presenciaba casos aterradores en los que los grandes camiones de contenedores sufrían accidentes que se cobraban la vida de los conductores. Entonces recordaba que el jefe de nuestra compañía es un cultivador de Falun Dafa. Todos estos años, cuando subo al camión, recito: 'Falun Dafa es bueno', 'Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno', y todo va bien".

Al verse en medio de un problema tan grande, el nuevo repartidor también empezó a recitar honestamente: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Al poco tiempo, el personal gritó el nombre de nuestra compañía, informando al repartidor que podía proceder a llevar su carga para la prueba. Al oír la confirmación, el repartidor se puso a llorar. El personal de la agencia preguntó por qué estaba llorando, ya que se le había permitido llevar su carga para la prueba. Honestamente, ser capaz de resolver un dilema tan grande poco después de recitar: "Falun Dafa es bueno", ¿cómo no emocionarse?

Ignorando la fama y los beneficios personales

En 1998, nuestra fábrica quería construir en un edificio un taller estructurado de 2.400 metros cuadrados. Hice saber a varios contratistas que era practicante de Falun Dafa y que esperaba que sus ofertas fueran honestas y su trabajo de alta calidad. Se aceptó una oferta de una empresa que tenía el coste de construcción más bajo del mercado en ese momento, con la condición previa de que no se comprometieran las normativas de construcción.

Después de la finalización del edificio del taller, todo el mundo estuvo de acuerdo en que la calidad de la construcción era la mejor. El contratista a menudo decía a otros: "La gente de Falun Dafa realmente no es codiciosa ni aprovecha las oportunidades para obtener beneficios para sí mismos. El director de la fábrica también es una buena persona, algo que rara vez he visto en mis años de trabajo en la industria de la construcción".

De 2007 a 2012, mi empresa construyó consecutivamente tres edificios más y establecí los mismos estándares que antes para los contratistas que solicitaron el trabajo. No acepté regalos ni obsequios, ni honorarios por brindarles libertad de acción. Después de la finalización del proyecto, todos los contratistas me dijeron que nunca conocieron a un líder que no aceptara invitaciones a cenar u otros sobornos para su beneficio. Los líderes que conocieron siempre estaban pensando en maneras de ganar dinero para ellos mismos. Así que trabajar en mi proyecto permitió a los contratistas atestiguar que los practicantes de Falun Dafa son personas íntegras y honestas. No entendían por qué las autoridades del país prohibían a la gente seguir una práctica tan buena.

En 2005, el flujo de caja de mi empresa se encontró con algunas dificultades. Cuando el primer constructor que colaboró conmigo lo supo, se ofreció a prestarme más de 300.000 yuanes. Cuando mi empresa se recuperó e intentó devolver el préstamo -después de solo cuatro meses-, solo aceptó recuperar la suma original del préstamo, sin intereses. Este es el resultado de hacer negocios según los principios de Dafa.

Recompensas de una forma distinta

En 2002, tenía dificultades financieras, así que le pedí a un amigo que me prestara 20.000 yuanes. Cuando fui a devolverle el dinero, mi amigo no quiso tomarlo. Sin embargo, le dije que debía aceptar el dinero, ya que habíamos acordado que iba a ser un préstamo. Después de aceptar el dinero, mi amigo me dijo: "Has trabajado durante más de una década como líder de una empresa sin ningún tipo de avaricia, ni has tomado ventaja para obtener beneficios. En privado, todos pensamos que eres demasiado tonto. Mira las otras empresas, aunque sus empresas no ganan dinero y todas han cerrado, sus líderes son todos más ricos que tú. Después del cambio del sistema de gestión de las empresas en todo el país, la tuya es la única empresa que está llevando a cabo la producción normalmente y gestionándose en una condición muy estable. Pero realmente estás perdiendo demasiadas oportunidades para obtener beneficios para ti. A veces, sentimos lástima por ti".

En esos momentos, recordé la conferencia del Maestro:

"Pero nosotros que refinamos gong no somos así, somos justamente al revés; no nos interesa perseguir aquello que la gente común quiere obtener, en cambio, obtenemos algo que las personas comunes, por más que lo deseen, no conseguirán a menos que practiquen el xiulian" (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Los clientes se benefician de mi cultivación

Todos esos clientes que hacen negocios conmigo saben que practico Falun Dafa. Algunos clientes me contaban que visitaban muchas fábricas pero ninguna gozaba de un ambiente como el que se respiraba en la mía. En los procedimientos de mi taller, se puede observar que los empleados tienen una actitud responsable hacia la calidad de la producción.

El Maestro dijo:

"Y en realidad, cuando, mientras están en varias profesiones, logran hacer bien las cosas que deben hacer, entonces de hecho están cultivándose" (Enseñando el Fa en el Fahui de Nueva York de 2007).

La 'Fórmula Mágica' para administrar mi empresa

Tras 20 años de cultivación, varios niveles del gobierno nos otorgaron, a mi empresa y a mí, honores muy altos. También hemos recibido reconocimientos y buenos comentarios de la comunidad. Esto provocó que el departamento de publicidad y los jefes de empresas similares vinieran a entrevistarme. Tenían curiosidad sobre la "fórmula mágica" que tengo para ser capaz de gestionar tan bien la empresa, y sobre las fuerzas que hicieron que mis empleados tuvieran tanta lealtad y una actitud responsable en su trabajo. Siempre les hago saber que la razón de todo esto se debe a mi cultivación de Falun Dafa. También les digo que recuerden que los mejores principios para vivir son las características universales de "Verdad, Benevolencia y Tolerancia", que guían a la gente a ser bondadosa, la mantiene sana y es la clave para resolver todo tipo de conflictos.

Es, en efecto, la "fórmula mágica" para el desarrollo saludable de la empresa. Los líderes empresariales me dijeron que mis logros pasados fueron maravillosos, pero su departamento de noticias tiene la regla de que los asuntos que involucran a Falun Dafa no pueden ser reportados. Expresaron su pesar por ello. Aunque no se atreven a denunciarlo oficialmente, me dicen que también tienen parientes y compañeros de clase que practican Falun Dafa y que estas personas también les hablan sobre los mismos principios universales. Por lo tanto, saben que los practicantes de Falun Dafa son todos muy buenos.

Los otros clientes, amigos y colegas que han oído hablar de mis experiencias dicen que entienden que los practicantes de Falun Dafa están tratando de ser buenas personas. En el pasado, siempre pensaron que Falun Dafa era solo un grupo político, pero después de entender la verdad, saben lo malvada e injusta que es la persecución a Falun Dafa.

Entre las personas con las que tengo la oportunidad de hablar se encuentran aquellos que no quieren escuchar o aceptar la verdad. Honestamente, me siento muy triste por ellos. Por mi parte, no importa lo mucho que tenga que sacrificar, no siento que la vida sea dura.

El Maestro nos enseñó:

“Si no tienen la clase de Shan que tiene un discípulo de Dafa, entonces no pueden llamarse cultivadores. Si un discípulo de Dafa no puede validar el Fa, entonces no es un discípulo de Dafa" (Sobre “La dignidad de Dafa”, Escrituras esenciales para mayor avance (II)).