(Minghui.org) Un juez en la provincia de Hebei expresó su renuencia a hacerse cargo de los casos de Falun Gong durante una reciente audiencia de tres practicantes locales. Él devolvió los casos a la procuraduría luego de la audiencia, objetando insuficiencia de pruebas.

Las señoras Bian Yanjuan (también conocida como Bian Xiujuan), Zheng Yanmei, y Li Yuemian comparecieron en la corte de Anping el 8 de noviembre de 2019 por su fe en Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

Tres abogados, incluido el abogado de oficio de la señora Zheng, presentaron declaraciones de inocencia para las practicantes. Los abogados de oficio usualmente reciben instrucciones de presentar alegatos de culpabilidad para los practicantes de Falun Gong, así que la señora Zheng estaba agradecida de que su abogado la apoyó para defender su inocencia.

Los abogados argumentaron que dar información acerca de Falun Gong constituía libertad de expresión por parte de sus clientas y esto no violaba ninguna ley. Las practicantes también testificaron en su propia defensa.

Ninguno de los testigos que aparecían en la acusación se presentaron a la corte para aceptar el interrogatorio.

Al final de la audiencia el juez dijo: “¿Por qué pasaron todos los casos de Falun Gong aquí? Yo tampoco quiero hacerme cargo de los casos de Falun Gong”.

Arrestos y acusaciones

Las tres residentes de la ciudad de Xinji en la provincia de Hebei fueron arrestadas el 12 de abril de 2019 luego de ser denunciadas por distribuir información acerca de Falun Gong. Desde ese momento han estado detenidas en el centro de detención de la ciudad de Hengshui.

Cuando los familiares de las practicantes fueron a la procuraduría el 9 de mayo para entregar sus solicitudes para la defensa de sus seres queridos en la corte, les dijeron que el procurador ya había devuelto los casos de las practicantes a la policía.

La hija de la señora Bian, su yerno y otro familiar fueron a la estación de policía de Datunxiang para exigir su liberación el 13 de mayo. Sin embargo, se rechazó su pedido y los dejaron esperando en la estación desde las 10:00 a. m. a las 4:30 p. m. La policía continuó acosándolas por meses luego de que fueran liberadas.

La policía volvió a enviar los casos de las practicantes a la procuraduría el 30 de mayo.

El abogado de la señora Bian fue a la procuraduría la mañana del 30 de julio para revisar los documentos de su caso y la visitó en el centro de detención por la tarde.

La señora Bian le dijo al abogado que había estado sufriendo de presión alta, mareos y de una afección cardíaca en el centro de detención.

El procurador acusó a las practicantes y remitió sus casos a la corte de Anping alrededor del 6 de octubre.