(Minghui.org) En los primeros años en que me uní a practicar los ejercicios matutinos a la hora acordada, me levantaba a las 3:50 de la mañana todos los días. Cuando me levantaba antes de la hora programada, esperaba el momento adecuado para empezar. Se volvió automático: me despertaba a la hora adecuada sin despertador; raro era el día que no me despertaba y, cuando ocurría, oía las voces de mis familiares llamándome. Pero en realidad no había nadie allí. Entendí que era el Maestro quien me despertaba para hacer los ejercicios.

Más tarde me alojé en casa de otra practicante unas cuantas veces. Ella comenzaba los ejercicios cada vez que se levantaba en lugar de esperar al tiempo establecido. La seguí, creyendo que ella se había cultivado mejor que yo, en vez de seguir al Fa. Poco a poco, dejó de importarme a qué hora me levantaba. Hacía los ejercicios siempre que podía. Entonces mi apego a la comodidad tomó el control. Se me hacía muy difícil levantarme para hacer los ejercicios, y tenía que hacerlos por la noche. Cuando surgía algo, no podía completar las cinco series de ejercicios del día.

Recientemente, me he estado despertando a tiempo a las 3:20 de la mañana para hacer los ejercicios. Me sentía bien y decidí seguir haciéndolo. El segundo día, me desperté a las 3:05 de la mañana, pero quería dormir unos minutos más. Al final me volví a dormir.

En mi sueño, estaba a punto de dormirme en una gran habitación cuando un hombre entró gritando que saliera para que me tomaran una foto. Él dijo: "Espérame como lo hiciste tú. La última foto fue buena". Pero no me hice ninguna foto antes. Luego vi un busto de oro en mi escritorio, de unos 20 centímetros de altura, con un patrón brillante en la parte superior y bien peinada. Pensé que así me veía cuando me levantaba a tiempo para hacer los ejercicios. Él me preguntó: "¿Es ésta?".

Salí y esperé al final de la fila. Me miré en el espejo y me di cuenta de que no estaba bien maquillada, así que decidí desmaquillarme. Pero el agua no estaba limpia e hice un desastre. Fui a un mostrador de cosméticos para maquillarme. Pero la chica se demoró. Volví corriendo antes de que terminara, solo para darme cuenta de que todo el mundo se había ido. Una mujer me dijo que todos habían subido y que tal vez alguien volvería para hacer una sesión de fotos de maquillaje. Esperé impotente. Entonces la mujer me dijo: "Dice que no podemos enviar un avión solo para recogerte". Sonaba como el fotógrafo que había conocido antes.

Me desperté en estado de shock. Eran las 6:50 de la mañana, justo la hora en la que terminamos los ejercicios. "¡No podemos enviar un avión solo para recogerte!", resonó en mis oídos. Tenía ganas de llorar.

Este sueño se parecía mucho a mi vida real. Me tomaba mi tiempo para hacer cosas. Pasaba mucho tiempo poniéndome maquillaje, probándome ropa diferente antes de salir por la puerta, y apenas llegaba en punto al trabajo. A menudo me perdía el desayuno que me ofrecían en el trabajo. Tengo un buen ambiente de trabajo en el que puedo estudiar el Fa, pero no puedo concentrarme. Cuando otra gente hablaba, me distraía. Apenas podía estudiar una lección de Zhuan Falun. Cuando llegaba a casa, estaba preocupada por las tareas domésticas. Como resultado, apenas podía cumplir con los requisitos que me había impuesto para estudiar el Fa, hacer los ejercicios y enviar pensamientos rectos. Comparado con otros practicantes, estaba muy atrasada. Tampoco hice mucho trabajo en la rectificación del Fa. Si pudiera terminar los ejercicios por la mañana, tendría tiempo para hacer algo para ayudar a salvar a los seres conscientes por la noche. Cuando surgía algo por la noche, ni siquiera podía hacer los ejercicios. Esperaba tener un gran avance, pero no podía mantener un buen ritmo.

Me di cuenta de que no hacer los ejercicios matutinos, no hacerlos a una hora determinada, o no completar los cinco juegos de ejercicios todos los días significa que los mecanismos que el Maestro nos ha otorgado no se fortalecerán adecuadamente ni proporcionarán un estado de cultivación óptimo. El ejercicio coordinado de la mañana es una oportunidad preciosa. Uno puede imaginar lo magnífico que es en otras dimensiones. Todo lo que hacemos como practicantes de Dafa, ya sea el estudio del Fa, el envío de pensamientos rectos, validar Dafa o salvar seres conscientes, está registrado y preservado para la eternidad en el nuevo cosmos.

Shifu dijo:

“En realidad, los ojos en el universo que están enfocados en ti son tan numerosos que no puedes imaginar cuántos hay. Una partícula está rellena de ojos. Hasta las partículas más pequeñas están atestadas de ojos. Todos los seres en el universo están observando todo lo que los Dafa dizi están haciendo. Los dioses están todos observando. Cada uno de tus pensamientos, cada idea, todo lo que haces está siendo grabado y es aún más real y más tridimensional que los videos” (Explicando el Fa en Washington D.C. 2018).

Shifu también dijo:

“Cada vez que una persona mejora, sube el estado de logro al que se ha iluminado” (Sendero, Escrituras esenciales para mayor avance (II)).

El Maestro ha preparado el barco para que regresemos a nuestros paraísos celestiales. Debemos elevarnos a la posición requerida a tiempo para poder embarcar. Si perdemos nuestro tiempo con el sueño, el entretenimiento, el maquillaje y la ropa, ¿cómo podemos ponernos al día con el proceso de la rectificación del Fa? Si perdemos el barco, no enviarán un avión para que nos recoja.

Este sueño fue una llamada de atención para mí. Espero que este artículo despierte a todos aquellos que se encuentran en situaciones similares a ser diligentes.

Este es mi entendimiento personal. Por favor, señalen cualquier cosa inapropiada.