(Minghui.org) Soy un practicante nuevo de Falun Dafa. Debido a que los practicantes de Falun Dafa siguen siendo oficialmente perseguidos en China, muchos de los nuevos practicantes que conozco eligen hacer los ejercicios, de forma reservada, en sus casas por su propia seguridad. Una vieja amiga mía se enteró de que había comenzado a cultivarme en Dafa, me contó que también practica, y me aconsejó que hiciera los ejercicios en privado, porque es más seguro de esa manera, y los resultados serán los mismos.

Al contrario, comencé a hacer los ejercicios con un grupo, lo cual, según mi experiencia, es una buena y rápida manera de cultivarse.

Con mi esposa nos detuvimos en un mercado de agricultores de camino al estudio grupal del Fa. De repente tuve un fuerte dolor en el pecho. Tomé algunos sorbos de agua con dificultad. No sabía qué hacer. Mi esposa me susurró: "¡Rápido, llama al Maestro!". Cuando llamé al Maestro una y otra vez en mi mente, el dolor se detuvo y pudimos continuar sin demora.

Mientras hacíamos los ejercicios, mi esposa dijo que no estaba sosteniendo de manera correcta la rueda sobre mi cabeza en el segundo ejercicio. Mi reacción en ese momento fue estar a la defensiva. Encontraba ese ejercicio en particular, bastante difícil y sabía muy bien que mis brazos caerían después de un tiempo. Intenté corregirlo repitiéndome a cada minuto que levantara los brazos más alto. Quería que ella supiera que estaba tratando de hacerlo bien. Decidí hacerlo aún mejor. En vez de eso, levantaba los brazos cada pocos segundos. Debido a esto, mis brazos estaban posicionados casi perfectamente, y no se sentía tan difícil como antes. Ahora puedo mantener esa postura casi todas las veces. Esto me ha dado mucha confianza para hacer los ejercicios.

Compartimos nuestras experiencias de cultivación al final del estudio del Fa. Un anciano me preguntó: "Vi que tus piernas estaban bastante horizontales cuando te sentabas en la posición de medio loto. ¿Crees que puedes cruzar ambas piernas y sentarte en la posición de doble loto?".

"Siempre trato de sentarme en la posición de doble loto", le contesté, "pero no puedo llevar la pierna de abajo sobre la de arriba porque siempre me da calambres". Después de enviar pensamientos rectos, al día siguiente, se me ocurrió que había estado sentado con las piernas cruzadas presionado contra el suelo durante un rato. Así que pensé que podría intentar subir la pierna de abajo otra vez, y lo logré. ¡Estaba muy contento! He podido meditar en la posición de doble loto durante más de 20 días.

Siempre pensé que era demasiado difícil memorizar el Fa, así que lo he estado recitando. Un practicante anciano del grupo de estudio, alienta siempre a todos a memorizar el Fa. Finalmente empecé a hacerlo. Ya leí el libro dos veces, y ahora estoy en mi tercera vez. Al memorizar el Fa, mis pensamientos rectos son continuamente reforzados, y puedo sentir que estoy mejorando rápidamente.

Mis experiencias me dicen, que si podemos estudiar el Fa y hacer los ejercicios en un entorno grupal, entonces podemos mejorar rápidamente en nuestra cultivación, gracias al constante apoyo y sugerencias que nos ofrecemos los unos a los otros. Quizás fue el camino del Maestro, que me fue revelado a través de otros practicantes, para animarme y fortalecerme.

Encuentro que son de gran provecho los artículos de intercambio de experiencias de los practicantes en Minghui.org. Mi nivel de cultivación es demasiado bajo en comparación con el de ellos. Sin embargo, he decidido compartir mis entendimientos superficiales con la esperanza de inspirar a nuevos practicantes. Estaré muy contento si lo consigo.