(Minghui.org) Cuando mi hijo nació en la primavera de 1997, mi abdomen me dio mucho dolor. Como le estaba dando el pecho, traté de no tomar medicamentos, pero el dolor era tan fuerte que tomé algunos analgésicos.

En julio, mi cuerpo no estuvo funcionando bien y siempre se inclinaba hacia un lado, y mi peso había caído por debajo de los 40 kilos. Fui al hospital para un chequeo cuando mi hijo tenía diez meses. Luego me diagnosticaron tuberculosis de las vértebras lumbares y me tuvieron que operar la columna vertebral. Mientras estaba en el hospital para la cirugía, descubrieron que tenía tuberculosis en ambos riñones y que mi riñón izquierdo era totalmente disfuncional y tenía que ser extirpado. Además de eso, tenía un espolón en el hueso torácico.

Cuando llegué a casa del hospital, estuve postrada en una cama y no pude cuidarme. Un día, aproximadamente un mes después de la cirugía, tuve una discusión acalorada con mi esposo. Mi madre estaba allí en ese momento. Mi esposo le dijo a mi madre que no me quería más porque estaba discapacitada.

El fue a la casa de al lado y pidió prestado el coche del vecino. Me sacó y me puso en él y le dijo a mi madre que me llevara a casa con ella. Mi madre estaba tan alterada que lloró de camino a casa. Pensé que nunca lo perdonaría.

Una nueva vida en Falun Dafa

Todavía vivía en la casa de mi madre en marzo del año siguiente cuando mi cuñado vino a invitarme a practicar Falun Dafa. Me dijo que era una práctica que pertenecía a la escuela Buda.

"Esta práctica es tan maravillosa", dijo. "No tienes que hacer nada de eso de otras prácticas. Solo sigue lo que dice el libro Zhuan Falun, y estarás bien".

Varios días después, trajo el libro. Tan pronto como vi el color del libro, mis ojos se iluminaron y sentí que mi corazón se iluminaba de nuevo.

Mejorando mi carácter

Desde la cirugía, había estado pensando en divorciarme. Pero después de leer Zhuan Falun, me di cuenta  que debía abandonar la idea. Cinco meses después, mi esposo vino a llevarme a casa, así que  fui con él.

Una vez que regresé a casa, me puse en contacto con los practicantes locales de Falun Dafa. Me uní a su grupo de estudio de Fa. Al principio, me dolía tanto el abdomen que apenas podía sentarme. Pero tres días después  que comencé el estudio del Fa en grupo y estuve haciendo la meditación sentada en casa, sentí que algo de extrema densidad descendía dentro de mi cuerpo. Comenzó en mi cuello y viajó hacia abajo. Se partió en dos por mi cintura, bajó por ambas piernas, y finalmente salió por la planta de mis pies. Después de eso, mi cuerpo se volvió muy ligero. Mi abdomen nunca me dolió desde entonces.

En ese momento, empecé a participar en todas las tareas agotadoras de nuestra propiedad. Todos mis vecinos en la aldea fueron testigos de lo rápido  que recuperé mi salud y capacidades después de practicar Falun Dafa. Otro aldeano local tenía la misma enfermedad que yo, pero le tomó tres años recuperarse, mientras que yo pude trabajar duro en el campo a los pocos meses de empezar a practicar Falun Dafa.

Mi suegra siempre había sido mala conmigo. Pero dejé ir mi viejo rencor hacia ella y ahora hay armonía en nuestra familia. Mi esposo también está feliz y toda su familia me apoya de todo corazón para que practique Falun Dafa.

Mi hijo se benefició con Dafa

Se usó una estufa de carbón para calentar la sala en donde trabajaba mi hijo. Su compañero de trabajo echó un poco de aceite en la estufa para calentarla más rápido. Mi hijo no lo sabía. Abrió la puerta y usó un gancho para aflojar el polvo de carbón quemado en la estufa para mejorar el tiro. De repente, una gran llama salió por la puerta de la estufa e instantáneamente le quemó toda la cara. La llama quemó algunos de sus cabellos, y sus cejas y pestañas desaparecieron.

Después de descansar media hora, fue a una farmacia y compró un poco de crema para quemaduras para aplicársela en la cara. Cuando volvió a casa, me pidió que encendiera un ventilador para refrescarle el rostro.

La cara de mi hijo estaba cubierta de ampollas grandes y pequeñas. ¡Era aterrador! Pensé: "Acaba de cumplir 20 años. ¿Y si las quemaduras dejan cicatrices en su cara?". Entonces me di cuenta  que el Maestro Li (el Fundador de Falun Dafa) ayudaría, e inmediatamente me sentí mucho más tranquila.

Luego recordé las palabras del Maestro en Zhuan Falun: "Leerle al enfermo este libro, si el enfermo puede aceptar, esto puede curar la enfermedad, pero el efecto varía de acuerdo con la magnitud del yeli de las diferentes personas".

Entonces le pregunté: "Hijo, ¿puedo leerte Zhuan Falun?".

Él quiso, estaba abierto, así que empecé a leer. Después de un rato, se durmió, y cuando se despertó más tarde por la noche, su dolor había disminuido, y comenzó a sonreír. Apenas podía abrir la boca, y sus ojos aún estaban hinchados, pero su cara en general parecía haber mejorado.

Entonces comenzamos a leer Zhuan Falun juntos durante media hora todos los días.

Al cuarto día, la piel de su cara comenzó a despegarse. Su nueva piel era clara y casi libre de cicatrices. Solo quedaba una pequeña cicatriz porque él la había arañado. Cuando mis parientes vieron lo rápido que se había curado su rostro, se sorprendieron. Todos creen y saben que Falun Dafa es realmente bueno.