Después de diez años de tristeza y amargura un profesor taiwanés cambia su vida

(Minghui.org) Wang Chengxiang, un maestro de 39 años, comenzó a practicar Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, en 2015. Cuando comenzó a cultivarse en Falun Dafa, dejó de estar triste y malhumorado y se volvió alegre y amistoso, dejando atrás su vida de diez años de amarguras.

Dificultades sin fin

Wang estudió Matemáticas Aplicadas en la Universidad Nacional Cheng Kung de Taiwán donde se graduó en 2005. Luego se inscribió en un programa de doctorado de Estadísticas en la Universidad de Zhongshan a la edad de 26 años.

Desde que era joven, Wang pensaba sobre el significado de la vida y se preguntaba para qué estaba viviendo. Había leído biografías de muchas personas famosas en la historia y las tomaba como modelos a seguir. Soñaba con alcanzar un futuro próspero.

Pero jamás imaginó las dificultades que encontraría, una tras otra, que eran como pesadas piedras. Su vida, hasta entonces apacible, dio un gran giro de la noche a la mañana.

Falló el examen de doctorado y estuvo a punto de ser expulsado de la facultad. Los atrasos en su investigación le hacían sentir que era muy difícil obtener un título de doctorado.

Aunque buscaba hacer amigos, con frecuencia era rechazado y solo tenía un amigo cercano. En repetidas ocasiones reprobó el examen para obtener la titulación para enseñar y durante un año sufrió abusos mientras realizaba su servicio militar.

Apenas podía mantenerse trabajando como profesor suplente durante diez años. Con esa vida tan miserable, ¿cómo podría mejorar en medio de tantas dificultades?

Superando las dificultades

Pero el año 2015 constituyó un punto de inflexión en la vida de Wang. Le presentaron el libro Zhuan Falun unos seis meses antes de su disertación doctoral. Al leerlo se dio cuenta de que Falun Dafa era exactamente lo que estaba buscando.

Como dijo el Maestro Li (el fundador de Falun Dafa): mientras más lees el libro, más lo quieres leer.

En los principios amplios y profundos de Dafa, Wang inesperadamente entendió el significado de la vida. También comprendió que las dificultades no son malas pues ofrecen la oportunidad de eliminar el yeli (karma) acumulado. Al igual que si se empujara una nube para ver el sol, la virtud y el buen carácter moral aparecerán cuando se elimina el yeli.

Ahora Wang dice: "Cuando surge un conflicto, lo evalúo con los estándares de Dafa y miro adentro para encontrar en qué me he quedado corto. Una vez que elimino el apego, mi fuerza crece y me ayuda a avanzar".

Wang Chengxiang practica el ejercicio de meditación bajo el sol de la mañana.

Después de eliminar su apego al beneficio personal, Wang pudo terminar más de 100 páginas de su tesis doctoral increíblemente rápido y aprobó el examen oral. También aprobó el examen de calificación de docentes sin tomarse un tiempo para prepararse y se convirtió en un profesor titulado.

"Me llevó siete años obtener mi doctorado, dos años de licencia administrativa en la escuela y un año para servir en el ejército. En esos diez años estuve confundido y frustrado”, dijo Wang.

"Como practicante de Falun Dafa, dejo ir las nociones humanas de resentimiento y ganancia personal. Enseñaba en una escuela primaria como profesor suplente durante el día y escribía mi tesis en la noche. Hice mi mejor esfuerzo y ya no me preocupaba por graduarme. Cuando todo terminó bien, entendí que mi éxito era atribuible a Dafa".

Iluminando el corazón de los niños

En el rincón más profundo del corazón de cada niño existe la esperanza de que encuentre la ayuda que necesita para convertirse en una buena persona. El comportamiento recto de un maestro sirve como una luz que guía esta esperanza.

Wang siente que Dafa lo hace una mejor persona por lo que está decidido a cultivarse bien y llevar la bondad de "Verdad-Benevolencia-Tolerancia" a más personas.

Wang Chengxiang y un cartel con los principios guía de la disciplina Falun Dafa: Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Wang cree que el objetivo de la educación no es enseñar a los niños cómo obtener buenos puntajes sino aprender a adaptarse a cada situación. Siente que la mejor manera de educar a los estudiantes es vivir de acuerdo con los estándares de Verdad-Benevolencia-Tolerancia y convertirse en un buen ejemplo para los niños.

Nunca se da por vencido con ningún estudiante. Le importan tanto sus trabajos escolares como también sus vidas fuera de la escuela. Después de cada examen, habla con cada alumno y le aconseja sin importar el puntaje de sus exámenes. Alienta a sus estudiantes para que sean responsables de su propio futuro y mantengan un buen carácter. A menudo se da tiempo para ayudar a los estudiantes a resolver sus problemas.

Wang les dice a los estudiantes graduados durante la ceremonia de graduación de cada año que sean honestos, amables, indulgentes y tolerantes con las personas en cualquier momento y en cualquier lugar.

Saludos de sus estudiantes

Sus estudiantes le han escrito muchos mensajes para expresarle su agradecimiento.

"Hubiera renunciado si no hubieras sido mi profesor. Nos enseñaste a construir una base tan firme como una pirámide y afianzarla desde la base, capa tras capa".

"Has enfatizado la importancia de cultivar una buena personalidad. Siempre recordaremos cada palabra que dijiste. Siempre recordaremos que tuvimos un buen profesor".

"Nunca he conocido a un profesor más trabajador, gracioso, serio y considerado como tú en mi vida. ¡Debes haber pasado por experiencias tremendas!".

"No fui un buen estudiante. No me gustaba estudiar sino jugar, pero nunca me abandonaste. Me ayudaste a construir una base académica sólida y me recordaste que debía ser flexible. Eres un ídolo en el corazón de muchos estudiantes. Te aprecio realmente".

"Nunca olvidaré que tuve un profesor tan bueno que me guió para ser más maduro y me ayudó a caminar hacia el éxito paso a paso".

"Aunque no tenía buenas calificaciones, me ayudaste a mejorar. Me animaste a volver a intentarlo después de fallar. Me ayudaste a lidiar con las cosas de manera diferente. Tengo la suerte de tener un profesor tan excelente".

"Tengo la suerte de conocerte. Tu gran espíritu me ayudó a fortalecer mi voluntad. Espero poder enfrentar el futuro con este espíritu, lograr algo y que estés orgulloso de mí".

Epílogo

Nada en la vida sucede por casualidad. Wang dijo que considera que todo lo que le sucede es algo bueno, y lo acepta positivamente. Y está decidido a enfrentar cualquier dificultad futura con el espíritu de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.