(Minghui.org) Soy de Suiza y comencé mi camino de cultivación hace más de cuatro años. Hasta entonces, había sido cristiana y nunca había oído hablar de Falun Dafa (también conocido como Falun Gong). En el momento en que nació mi hija supe con certeza que mi matrimonio se había acabado. Decidí buscar dentro de mí, para ver cuál era mi parte del problema. Al hacerlo, surgieron nuevamente mis preguntas acerca de la vida, en general. ¿Quién soy y qué estoy haciendo aquí?

Cuando cumplí 40 años, pasé por algo así como una segunda pubertad. En primer lugar, me sentí atraída por el taoísmo. Compré la mejor traducción de Tao Te Ching que pude encontrar. Sin embargo, por alguna razón, tan pronto como abrí el libro, no me pude concentrar en absoluto. Lo mismo ocurrió con diversos libros explicando las palabras de Buda. Después me quise unir a algún grupo de artes marciales, pero tampoco lo logré.

Luego nos mudamos a otra ciudad. En ese momento, sufría de ataques de pánico en lugares muy concurridos y cuando manejaba y atravesaba túneles. Un día, estaba manejando en una carretera y nos estábamos acercando a un túnel largo. Estaba preocupada y sentía cómo me alcanzaba el cansancio. Mientras estaba pensando en pedirle a mi esposo que manejara el coche, y buscaba una salida, vi a mi hija quedándose dormida. Unos segundos después, mi marido cerró los ojos también. Esto era algo inusual, ya que era un día brillante. Pero significaba que no podía parar, así que seguí manejando. La somnolencia aumentaba. Finalmente, solté mis manos del volante y perdí la conciencia. Me despertó el ruido de una explosión y agarré nuevamente el volante. El coche estaba todavía en medio del camino y no había pasado nada.

Un día, vi un programa de televisión en Internet. El conductor y su invitado hablaban sobre las fuerzas de la luz y de la oscuridad en varios países. El invitado dijo que había mucha luz que venía de China, a pesar del partido comunista y de sus formas de corrupción. El conductor preguntó de dónde provenía la luz y el invitado respondió que provenía de las familias antiguas que la estaban resguardando.

Cuando oí esto, tuve un pensamiento: "Quiero trabajar para esta luz". Entonces encontré varios sitios web sobre Falun Dafa y me enteré de que había una practicante de Dafa que vivía justo cruzando la calle. Ella estuvo de acuerdo en enseñarme los ejercicios. Pero, antes de hacerlo, yo quería leer el libro del maestro Li Hongzhi, Zhuan Falun. Sabía que no tenía sentido aprender los ejercicios si, al final, no iba a cultivarme.

Infancia y crianza

Fui adoptada cuando era bebé y crecí en una familia de clase media. Mis padres tenían buenas intenciones, pero eran muy exigentes y tenían una idea fija sobre cómo debería ser y en qué me debería convertir. No pude desarrollar mi auto confianza, ni encontrarme. Sobre todo me sentía temerosa de otras personas, incluidos mis padres. Sentía como si estuviera en el lugar equivocado y el mundo fuera hostil.

Como temía los arrebatos emocionales y las palabras duras y de juicio de las personas descontentas, pasé años tratando de complacer a todos y cumplir con sus expectativas. Intentaba adivinar de antemano lo que quería la gente que me rodeaba. Aunque trabajé duro, fracasé. Como me había enfocado solo en la parte superficial, me convertí en una adolescente deprimida. Mi existencia parecía completamente sin sentido.

Busqué ayuda en la religión. Estudié a las más comunes y luego elegí el cristianismo. Sentía que Jesús era digno de confianza y bueno con los hombres y las mujeres. La noche que recité la oración de invitación a Jesús, experimenté un pequeño milagro. Mi adicción a fumar se eliminó y mi vacío interior fue llenado.

Aunque a partir de ese momento ya tuve un tipo de guía y orientación, no pude progresar verdaderamente aunque me esforcé mucho. Seguía siendo escéptica acerca de las enseñanzas de los sacerdotes y en las congregaciones de la iglesia, y siempre me sentía un poco rara, como si realmente no perteneciera a allí.

Tomando el camino de la cultivación

Después de leer el libro Zhuan Falun, quise aceptar la propuesta del Maestro Li de cultivarme. La voluntaria que asiste el sitio de práctica local vino a mi casa y me enseñó los ejercicios. Posteriormente, seguí aprendiendo con la ayuda del video con las instrucciones.

Al principio, pensé que la autocultivación era egoísta, ya que era algo para mí y no para los demás. Entonces, mientras hacía los ejercicios, arrojaba velas encendidas imaginarias en la oscuridad. Esta fue la única vez que vi al Fashen del Maestro. Me regresó la vela que había arrojado a la oscuridad y desapareció. Entendí entonces que el Maestro Li está realmente aquí y que mi aceptación de autocultivación era válida.

En los años que han pasado, mi paisaje interior, forma de pensar y de entender las cosas empezaron a cambiar. Mi pensamiento evolucionó una y otra vez generando un cambio acerca de cómo gestiono las cosas prácticas en la vida cotidiana. Los ataques de pánico desaparecieron y ahora estoy más tranquila.

Con la ayuda del Maestro Li, pude ser valiente y salir para validar Dafa y participar en actividades de grupo. Eventualmente, empecé a organizar mis propios pequeños proyectos de aclaración de la verdad, como una mesa en un centro comercial, puestos de información en ciudades más grandes y participé en una feria de materiales de artesanía. Las flores de loto de papel atraen e inspiran a mucha gente. Mientras los visitantes de la feria aprendieron a hacer las flores, se enteraron acerca de Dafa y de la persecución en China.

La belleza de la flor de loto y los tres principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia son lo que atrae a la mayoría de la gente, sin importar sus distintos orígenes culturales y religiosos.

He notado que, cuando lo que le digo a la gente es sencillo, plausible y equilibrado, lo puede aceptar. A veces, los jóvenes sienten que firmar una petición no cambiará la situación de los practicantes en China y solo se encogen de hombros con indiferencia. Pero, cuando se les recuerda de su buen corazón que busca hacer lo correcto, empiezan a sonreír y firman la petición.

Los europeos que crecieron en países comunistas no necesitan explicaciones largas, ya que saben cómo funciona el régimen chino. Una vez, un hombre de un país de Europa del Este me interrumpió y dijo: "El comunismo es persecución. Es lo mismo".

Mi sendero actual

Contrariamente a mis experiencias de la niñez, la guía del Maestro Li es discreta, y no trata de quien soy. Comencé a entender que lo que me sucede en la cultivación no es una forma de castigo o se debe a que sea una discípula particularmente mala. No está destinado a actuar en mi contra sino que tiene como propósito ayudarme a tener éxito en mi camino de regreso.

El Maestro dijo:

“¿Sabían lo siguiente? Tomando por separado tan sólo el asunto de la cultivación, es algo muy complejo en los niveles más bajos dentro del cosmos, pero se vuelve sencillo en niveles más altos, donde ya no existe ningún concepto de cultivación sino sólo el concepto de la eliminación de ye. En los niveles aún más altos, todos los problemas existen para pavimentar el camino para ascender al Cielo. Y en los niveles aún más altos, conceptos como la eliminación del ye, soportar penalidades, y la cultivación ya no existen, ¡y es simplemente una decisión! En los altos niveles cósmicos, existe sólo tal principio. Piensas que alguien es lo suficientemente bueno, entonces lo escoges; ese es el principio. “¿Cultivación? No hicimos ningún arreglo para su cultivación. ¿Qué cultivación? Sólo queremos purificarlo, purificarlo paso a paso, hasta llegar hasta arriba”. ¡Purificarlo; es así de sencillo! Pero cuando se manifiesta en diferentes niveles, se convierte en pavimentar el camino, teniendo problemas, soportando penurias, eliminando ye, cultivándose, etcétera, cultivándose de una forma, practicando de otra…” (Exponiendo el Fa durante el Festival de la Linterna, 2003).

El Maestro también dijo:

“Puedo decirles a todos, que todo lo que han hecho, es en efecto, hecho para ustedes mismos; nada de esto lo hago para mí. Al mismo tiempo, puedo decirles que desde el día que comenzaron a cultivarse hasta hoy, nada de lo que les he dicho y lo que les he pedido que hagan es para otros. Vuestra cultivación puede beneficiar a la humanidad y a la sociedad. En la cultivación los Dafa dizi pueden volverse más maduros entre todos, y mientras son perseguidos los Dafa dizi pueden reducir la presión y las pérdidas durante la vil persecución. Pero todos estos son sólo subproductos. El verdadero propósito de todas las cosas que hacen es para que ustedes obtengan éxito. En el futuro, podrán echar una mirada atrás a todo esto. Ahora mismo no necesitan decir cuán grande soy, o decir esto o lo otro sobre mí, vuestro Shifu. En el futuro, cuando miren hacia atrás, verán que todo lo que hice fue con el propósito de establecer cosas para ustedes. (Aplausos)

Hagan bien lo que deben hacer. Las relaciones predestinadas son difíciles de encontrar. Atesoren todo esto, no habrá una segunda vez. ¡Cualquier apego que ustedes desarrollen los arruinará a medio camino! No alberguen ningún pensamiento humano, ni se apeguen a nada, sólo hagan lo que un Dafa dizi debe hacer. ¡Todo lo más hermoso, lo más grandioso y lo más glorioso les espera! (Aplausos)” (Exponiendo el Fa durante el Festival de la Linterna, 2003).

Con estas palabras del Maestro Li, les deseo todo lo mejor y un regreso seguro a casa.