(Minghui.org) El juez que presidió el juicio de un practicante de Falun Gong aplaudió los argumentos de la defensa pero, aún así, sentenció al acusado a prisión debido a las presiones de una agencia no judicial.

Arrestaron al Sr. Mo Yishan, de 36 años de edad, residente en el condado de Pengxi, el 13 de marzo de 2017, mientras hablaba con la gente sobre Falun Gong en Chengdu. Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual de la Escuela Buda perseguida por el régimen comunista chino.

El Sr. Mo fue engañado por su abogado y accedió a que lo declarara culpable. También rechazó una reunión con su padre, el Sr. Mo Mingxue, por consejo de su abogado.

El anciano Sr. Mo, quien también practica Falun Gong, sabía que ninguna ley en China criminaliza la fe. Estaba decidido a luchar por la justicia de su hijo. Despidió al abogado el día anterior a la audiencia del tribunal, el 19 de junio de 2018, para convertirse en el defensor de su hijo. Según los expertos, se consideró el primer caso de este tipo en la región.

El fiscal acusó al joven Sr. Mo de "utilizar una organización sectaria para socavar el orden público", un pretexto estándar utilizado por el régimen comunista chino para incriminar y encarcelar a los practicantes de Falun Gong.

El anciano Sr. Mo refutó los cargos. Señaló que el congreso nacional popular, cuerpo legislativo de China, nunca ha promulgado una ley que etiquete a Falun Gong como una organización sectaria. Como tal, su hijo no debería haber sido procesado por ejercer su derecho constitucional a la libertad de creencias.

El fiscal alegó que el joven Sr. Mo distribuyó material informativo de Falun Gong, que en sí mismo es ilegal. Citó dos avisos emitidos por la Administración de Prensa y Publicaciones de China en julio de 1999 para prohibir la publicación de los libros de Falun Gong.

El anciano Sr. Mo contestó que la administración había emitido una derogación de la prohibición en 2011 y que era completamente legal para los practicantes poseer y divulgar los libros y materiales informativos de Falun Gong. Además, argumentó que la distribución de tales materiales por parte de su hijo no causaba ningún daño a nadie, y mucho menos socavaba la aplicación de la ley.

El juez Wang Runming ordenó un receso de 15 minutos. Durante la pausa, sostuvo los argumentos escritos de defensa del Sr. Mo y si había escrito todo aquello solo.

Cuando el anciano Sr. Mo confirmó que había escrito la declaración de defensa, el juez Wang le dijo: "¡Bien escrito! ¡Bien escrito! Muy lógico y convincente. [Practicar Falun Gong] es legal".

Cuando se reanudó la audiencia, el fiscal describió que la fiscalía consideraba que las pruebas de la acusación no eran suficientes para condenar al joven Sr. Mo. La oficina 610 es una agencia extralegal del régimen comunista encargada de llevar a cabo la persecución de Falun Gong y con poder para anular el sistema judicial.

Wang condenó al joven Sr. Mo a 3 años y medio de prisión y le impuso una multa de 3.000 yuanes al final de la audiencia. El Sr. Mo dijo inmediatamente que apelaría la sentencia.

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