(Minghui.org) Un ejecutivo de negocios de Beijing compareció ante el Tribunal del distrito de Nanshan en la ciudad de Shenzhen, provincia de Guangdong, el 28 de junio de 2018 para ser juzgado por su fe.

El Sr. Yang Guanren, presidente regional de un grupo de empresas con sede en Beijing, fue arrestado el 15 de mayo de 2017 mientras se encontraba en viaje de negocios a Shenzhen. Estaba hablando con un taxista sobre Falun Gong cuando el conductor lo llevó directamente a la estación de policía de Yuehai.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una práctica para mejorar la mente y el cuerpo perseguida por el régimen comunista chino. Mucha gente, incluyendo el taxista, tiene malos entendidos sobre Falun Gong debido a la masiva propaganda difamatoria que difunde el estado en contra de la práctica.

Sr. Yang Guanren.

El abogado del Sr. Yang declaró su inocencia ante el tribunal, refutando las pruebas que exhibió el fiscal Zuo Haixia contra su cliente.

Zuo acusaba al defensor de desacato al tribunal, hasta que la jueza Liu Fubin lo detuvo y le impidió realizar tales comentarios.

El fiscal alegó entonces que el ordenador portátil y el teléfono móvil confiscados al Sr. Yang eran suficientes "pruebas" contra él. Sin embargo, no obtuvo ninguna respuesta cuando el letrado lo desafió a presentar los objetos en el tribunal.

Zuo procedió a decir que el taxista había dado testimonio verbal de que el Sr. Yang le habló sobre Falun Gong. El conductor, sin embargo, no se hallaba presente para someterse a un contrainterrogatorio. También, alegó que el conductor lo había grabado hablando con él sobre Falun Gong, aunque tampoco presentó ninguna cinta de audio en el juicio.

A continuación, Zuo afirmó que también existían cintas de vídeo y registros electrónicos que atestiguaban la culpabilidad del Sr. Yang. Sin embargo, ninguna de las supuestas pruebas fue presentada ante el tribunal.

El Sr. Yang testificó en su propia defensa. Explicó que practicar Falun Gong no causa daño a nadie. Su abogado siguió diciendo que ninguna ley en China criminaliza a Falun Gong o lo etiqueta como una organización sectaria. La jueza Liu golpeó dos veces con su martillo cuando el letrado reiteró la legalidad de Falun Gong.

La jueza también se negó a proporcionar a la defensa una copia de las actuaciones judiciales.

Mientras el Sr. Yang espera el veredicto, sus padres viven angustiados. Su madre, de 87 años, estaba tan disgustada por el arresto de su hijo que se ha quedado postrada en la cama.

Los padres del Sr. Yang (su madre sigue postrada en cama).

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