(Minghui.org) Soy un marinero de Bulgaria. Comencé a practicar Falun Dafa hace cerca de dos años.

Tuve algunos problemas con el cuello y la parte superior de la espalda antes de comenzar a cultivarme. Durante años experimenté dolor, comenzando desde la espalda y luego expandiéndose lentamente hasta el cuello y evolucionando a fuertes dolores de cabeza, para los cuales tomaba analgésicos regularmente. Me sometí a muchos tratamientos, como inyectar ozono en la vértebra cervical, pero eso no ayudó mucho. Los doctores me dijeron que el problema no podría ser completamente resuelto y que tendría que vivir con ello por el resto de mi vida. También comencé a tener menor visión y tuve que usar anteojos, especialmente cuando conducía el auto. Todos estos problemas fueron resueltos en pocos meses luego de comenzar a cultivarme en Falun Dafa.

Cómo encontré Falun Dafa

Antes de hallar Dafa estaba buscando información sobre el significado de la vida, y me preguntaba qué misión tenía en este mundo. Durante el proceso de buscar información leí diferentes libros, incluyendo un libro budista, escrito por el Dalai Lama, pero sentía que debía haber algo más, entonces seguí buscando.

Una corazonada se desarrollaba en mi corazón por años –el sentimiento de que tenía que comenzar a hacer algo para mejorarme-. Al mismo tiempo no sabía cómo realizarlo, y no tenía idea de qué era la cultivación.

Mi hermano mayor tenía la misma sensación, y un día decidimos hacer algo al respecto. Inicialmente pensamos que el yoga podía ayudarnos a mejorar, así que comenzamos a tomar un curso. Durante ese tiempo mi hermano me contó que vio en un programa de televisión una ancestral práctica de cultivación china llamada Falun Dafa. Su impresión fue que la práctica era buena y deseamos saber más al respecto.

Algunos días después se encontró con un amigo de un antiguo barrio, quien le contó que él estaba practicando Falun Dafa y que hacía los ejercicios con otros practicantes en un parque local. Entonces decidimos intentar los ejercicios de Falun Dafa junto con la práctica de yoga.

Cuando leí por primera vez el libro Zhuan Falun sentí que era lo que estaba buscando. Unos meses después dejamos de practicar yoga y continuamos practicando solamente Falun Dafa.

Luchando con el apego a la pérdida y la ganancia

Me gustaría contarles un accidente que me ayudó a identificar el apego a la pérdida y la ganancia.

Esto sucedió en el invierno del 2016. Estaba a bordo de un buque. Una mañana cuando abrí mi correo, vi un mensaje de mi esposa avisándome que nuestro departamento se había inundado. Ella me pidió que la llamara lo antes posible. Luego de leer el mensaje no quería esperar hasta el final de la jornada laboral para llamarla y preguntarle qué había pasado exactamente. Pero también tenía un claro entendimiento de que esta tribulación era una prueba para mí. En la noche, finalmente la llamé y descubrí que había una tubería rota en el departamento de arriba del nuestro y que había mucha agua. Como acabábamos de realizar reparaciones importantes allí, me sentía extremadamente frustrado.

La mañana siguiente, estudiando Zhuan Falun, estás palabras quedaron grabadas en mi mente:

“…entonces, ante los beneficios personales y en medio de los conflictos de la gente común, poder o no tomar livianamente y con ligereza estos asuntos es el punto clave” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Miré hacia dentro y noté que estaba desarrollando malos pensamientos en mi mente. Pensaba que no merecía esta tribulación y que no era justo que me sucediera a mí, que no era mi falla y que debía ser compensado por mi vecino, porqué su caño causó la inundación. También temí que las reparaciones fueran demasiado costosas, y así sucesivamente.

Además durante los días siguientes cuando hablé con mi esposa y mis padres, insistían que debía buscar la justicia y luchar con mi vecino por una compensación. Sin embargo, sabía que como practicante no debería actuar de esta manera.

Shifu dijo:

“No solo no compitas ni pelees como él, tampoco puedes odiarlo en tu corazón, realmente no puedes odiarlo. Una vez que lo odias, ¿no te sientes movido? Así, no has puesto en práctica Ren. Nosotros hablamos de Zhen-Shan-Ren, entonces tu Shan ni siquiera existe. Por eso, no puedes actuar como él, realmente no debes enojarte con él a pesar de que haya dañado tu reputación ante la gente por encima y por debajo de ti y no puedas ni asomar la cabeza. No solo no puedes enfadarte con él, todavía debes agradecerle en tu corazón, realmente tienes que agradecerle” (Cuarta LecciónZhuan Falun).

Entonces suprimí todos los malos pensamientos y dudas y decidí en lo profundo de mi corazón aceptar la pérdida. Le pedí a mi esposa que le diga a mi vecino si necesitaba alguna ayuda, porque su departamento se anegó también. A partir de ese momento sentí que algo pesado había sido removido de mi corazón. Más tarde resultó que el daño de la inundación no fue tan dramático como pensé inicialmente y pudimos reparar todo rápidamente.

Mi experiencia en la aclaración de la verdad

Aún recuerdo claramente la primera vez que participé en un evento de aclaración de la verdad. Fue seis meses después de comenzar a practicar Dafa.

Un día un compañero practicante me dijo que habría un evento para aclarar la verdad en la ciudad de Burgas, localizado a 130 km (80 millas) de mi hogar, y me invitó a participar. No dudé mucho y acepté acompañarlo. Entonces las tribulaciones comenzaron.

Primero, mi esposa se enojó cuando le dije que iría a Burgas por un día para participar en un evento de Falun Dafa. Ella estaba enojada porque la noche antes del evento fuimos invitados a una fiesta de cumpleaños para una dama de honor en nuestra boda. Mi esposa estaba preocupada de que no quisiera ir a la fiesta porque tendría que despertarme muy temprano a la mañana siguiente y me gustaría acostarme temprano esa noche. Traté de convencerla de que mi visita a Burgas no influiría en mi asistencia a la fiesta de cumpleaños, pero fue en vano.

Al mismo tiempo no había tomado una bebida alcohólica en un mes. Durante la fiesta, algunos invitados, incluida mi esposa, me desafiaban a beber, diciendo que me ayudaría a disfrutar la fiesta. Pero estaba firme y resistí la tentación. La fiesta continuó en la madrugada y casi no tuve tiempo de dormir. Tenía un claro entendimiento de que todo eso era para probarme a mí y a mi determinación, estaba ansioso por hacerlo bien. Allí fue cuando me dije que iría a Burgas para clarificar la verdad independientemente de las circunstancias.

Al día siguiente fuimos con mi hermano y el otro practicante a Burgas. Nos encontramos con la coordinadora local de Dafa que estaba muy feliz de vernos, porque los otros practicantes, quienes fueron los que inicialmente planearon ayudar allí, encontraron algunos obstáculos y no pudieron ir. Entonces nuestra presencia hizo posible mantener la actividad. Nos dijo que confiaba en que los arreglos del Maestro nos conducirían para acompañarla en la salvación de los seres conscientes. Mi entendimiento es que debemos cooperar bien entre nosotros y solo entonces podremos cumplir bien nuestras metas.

Mis pensamientos rectos fueron fuertes durante el evento de esclarecer la verdad. Recuerdo que una señora mayor vino y comencé a hablar con ella sobre la persecución a Falun Dafa. Ella esperó a que dejara de hablar y luego me dijo en ruso: “Soy de Rusia y no tengo ni idea de lo que dices. Pero veo que eres un buen hombre y la forma en que me estás hablando me hace sentir que quiero saber más de lo que estás hablando”.

Luego le di algunos materiales en ruso. Esta situación me dio más valor y me mostró que cuando tengo pensamientos rectos nada puede detenerme.

Otro incidente, relacionado a ese evento, sucedió en julio de 2017. Un practicante veterano de Kavarna, una ciudad a 60 km (37 millas) de mi hogar, quería organizar una actividad para esclarecer la verdad en conmemoración del 20 de julio de 1999. Ya que era el único practicante en Kavarna, necesitaba ayuda, entonces algunos practicante de mi ciudad, incluyéndome, decidimos ayudarlo.

Pero dos semanas antes del evento comencé a experimentar algunos síntomas de yeli (karma). Estaba tosiendo mucho y escupiendo todo el tiempo, y me dolía la garganta. Empeoré cada día. Traté de calmarme y me recordé que era una interferencia de las viejas fuerzas y que tenía que rechazar sus arreglos con pensamientos rectos.

Durante los siguientes días traté de ser más diligente en el envío de pensamientos rectos en los horarios globales y en el estudio del Fa. El Maestro dijo:

“De hecho, si sus pensamientos son muy rectos, cuando ustedes caminen por la calle y hagan su vida en la ciudad donde viven, todos sus ambientes serán limpiados. Vuestra mera existencia tiene el efecto de salvar seres conscientes. Pero, a pesar de sus grandes habilidades, ustedes enfrentarán todavía adversidades para el beneficio de vuestra cultivación personal, ya que todos tenemos un trayecto que debemos hacer en la cultivación. Al mismo tiempo, las viejas fuerzas han creado muchas formas de interferencia para vuestra validación del Fa. Bajo circunstancias normales es muy difícil disipar esa interferencia si los pensamientos rectos no son lo suficientemente fuertes" (Exponiendo el Fa en el Fahui Internacional de Nueva York, 2004).

Tres días antes del evento no me sentía bien pero decidí ir a los ejercicios grupales en el parque. Durante los ejercicios me sentí acalorado, y luego casi dejé de toser y escupir. El dolor en mi garganta casi desapareció. Esto fortaleció mi determinación y decidí que nada podría detenerme para ir al evento en Kavarna.

El día del evento me sentí mucho mejor y todo se desarrolló bien. Mi compañero practicante y yo logramos aclararle la verdad a muchos seres conscientes.