(Minghui.org) La Sra. Jennie Sheeks, practicante de Falun Dafa en Filadelfia, compartió el 13 de mayo, su experiencia personal en el Día Mundial de Falun Dafa, ese mismo día se celebraba el Día de la Madre de este año en Estados Unidos.

Jennie en el desfile del Día Mundial de Falun Dafa en 2014.

Hace seis años, cuando los tres hijos de Jennie tenían 5, 4 y 2 años, buscó en Google una práctica para aliviar el estrés y encontró información sobre Falun Dafa. Dijo: "Buscaba una manera de darme más energía para educar y criar a mis hijos, reducir mi estrés y hacerme una madre más tranquila. Noté que aprender Falun Dafa era gratis y había disponible un sitio de práctica en la plaza de la Campana de la Libertad todas las mañanas, los fines de semana. Encontrar un ejercicio gratuito era importante, dada mi situación financiera. Y lo que es más importante, estaba segura de que nadie trataba de sacarle beneficio. Era solo un grupo de gente compartiendo una práctica".

Era una mañana fría de enero, cuando Jennie vino a la Campana de la Libertad y encontró practicantes de Falun Dafa. Comentó: "Esta gente buena empezó a enseñarme los ejercicios de Falun Dafa. Dos meses después de comenzar a hacer los ejercicios, mi problema de salud crónico, que a veces me hacía querer morir, desapareció por completo. Nunca regresó. Fue una sorpresa tan real y feliz. Me hizo continuar. La cultivación de Falun Dafa redujo en gran medida mi estrés, y cambió profundamente mi vida.

"Vivo de acuerdo a los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia lo más cerca posible de mi corazón, mente y acciones. Estos principios sencillos se convirtieron en mi apoyo, en todos los aspectos de mi vida. En casa y en el trabajo, cada vez que me encontraba con desafíos, me detenía, miraba hacia adentro y me preguntaba ¿qué debía hacer para ser honesta en esa situación? ¿Cómo debo poner a los demás en primer lugar? ¿Cómo podría soportar mejor la situación? ¿Cómo podría mantener la calma, sin dejar que mis emociones se interpongan en el camino?".

La familia de Jennie estaba entusiasmada con su nueva salud y bienestar espiritual. Su marido podía ver que estaba cada vez menos angustiada por las vicisitudes inesperadas, y su mente permaneció clara y estable. La madre también dijo que se volvió más amable y paciente. Jennie dijo: "Sé cómo aprender de mis errores y cómo continuar en el camino en la dirección correcta".

En esta ocasión especial del Día Mundial de Falun Dafa y del Día de la Madre, Jennie se alegró de compartirles a todos:"Falun Dafa me ayudó a ser una mejor hija y me ayudó a estar más tranquila y más cerca de mis hijos".