(Minghui.org) En 2012, me diagnosticaron cáncer de mama en etapa terminal, y me dieron tan solo cuatro meses de vida. Gracias a Falun Dafa he cumplido 64 años, y aún estoy viva.

Falun Dafa me concedió una segunda vida

Cuando descubrí que tenía un bulto en mi pecho, fui a realizarme un examen en un hospital. Me dijeron que tenía cáncer de mama y necesitaba cirugía de inmediato. Antes de que me operaran, un amigo vino a visitarme y me dijo que tuviera fe en Jesucristo. Después de que me dieron el alta en el hospital, me convertí en una cristiana devota. Sin embargo, pronto comencé a recaer de nuevo, y cuando volví al hospital, el cáncer se había extendido a los ganglios linfáticos. Me dieron solo cuatro meses de vida.

De repente recordé que uno de mis parientes me había hablado sobre Falun Dafa. Recuerdo que me habló del poder sanador de Dafa, pero entonces no le presté atención. Ahora no tenía opción, así que le pregunté si todavía podía practicar Falun Dafa en mi condición actual. Él me sugirió leer el libro primero y luego me enseñó los ejercicios.

Me enfoqué en estudiar el Fa, hacer los ejercicios, y soltar el miedo y la preocupación por la muerte. Mi presión arterial era muy alta, 180. Me sentí algo más relajada y cómoda después de leer el libro y hacer los ejercicios. Sin embargo, no estaba del todo convencida; ¿Cómo podría ser tan milagroso? Fui al hospital para realizarme otro examen, ¡y todo estaba normal!

Desde ese momento, solo creí en el poder de Falun Dafa. Nunca dejaré de estudiar las enseñanzas. Antes, ni siquiera tenía fuerzas para levantar a mi nieto de seis meses. Después de practicar Falun Dafa en tan solo un mes, pude cargar con él escaleras abajo, (vivimos en el séptimo piso de un edificio de apartamentos). Mis familiares y vecinos quedaron impresionados y atestiguaron la maravilla de Falun Dafa.

Un palo de advertencia

Después de comenzar a cultivarme, recuperé mi salud. Pero mi cultivación aún no era sólida, y todavía había muchos apegos que tenía que eliminar. Cuando mi hijo y mi nuera encontraron un trabajo en otra ciudad en 2014, me pidieron que los ayudara con el niño.

Debería haber tenido en cuenta, que siendo cultivadora, la mejora de mi salud no era para vivir una vida feliz. Debía ser consciente de las responsabilidades de una cultivadora, pero no entendía del todo las enseñanzas del Fa y solo quería cuidar a mi nieto.

Cuando llegué a la estación del tren, mis pantalones quedaron atrapados en el elevador y me hice una herida en la pierna. Todavía no me iluminé y, tan pronto como me recuperé, pensé en ir a cuidar a mi nieto. A pesar de que estaba estudiando el Fa, no era diligente con las tres cosas. Después de dos años, mi salud se empeoró y volví a casa.

Seis meses después, mi nuera me pidió cuidar a su niño. Estaba apegada al ocio de la gente común, y los conflictos con mi nuera se intensificaron. Cada vez que mi nuera discutía con mi hijo, yo me enojaba y me ponía de su parte. Comenzaba con intercambios verbales, pero luego, llegaba a romper cosas. En una ocasión, ella me arrojó una botella de cerveza. ¡De repente me desperté! Me había estado comportando como una persona común, disfrutando de una vida común, y olvidando quién era realmente. Gracias a este palo de advertencia, regresé a casa e hice todo lo posible por volver al camino de la cultivación.

Salvando a la gente contándoles sobre la persecución

Después de regresar a casa, me di cuenta de que fue Shifu quien me trajo a casa para hacer las tres cosas bien y ponerme al día. Con un estudio más intenso del Fa, realmente entendí que mi vida fue renovada para Dafa, y me propuse llegar a ser una verdadera cultivadora. Desde ese momento, he estudiado el Fa por las mañanas y he salido a aclarar la verdad por las tardes. No he permitido que nada ni nadie interfiera en mi rutina.

El invierno de 2017 en Harbin fue el más frío que se recuerda, pero eso no me impidió salir. A veces tenía fiebre y pensaba que tal vez tumbándome, me mejoraría. Sin embargo, al echarme, empeoraba. Entonces me levantaba y continuaba. Los resultados fueron normalmente positivos: ¡salvé personas y mi fiebre desapareció! Me acercaba a la gente en el parque, en el centro comercial o en la calle. Muchos que conocieron los hechos sobre la persecución a Falun Dafa mostraron gratitud.

Mi experiencia validó la maravilla de Falun Dafa, y mis amigos y parientes ahora tienen una buena comprensión sobre Falun Dafa.

Un día fui a un parque y no me di cuenta de que la policía había llevado a cabo un arresto masivo de practicantes de Falun Dafa. Me senté en un banco y un agente vestido de civil se me acercó. Le conté sobre la persecución y él me mostró su identificación: era un oficial de policía criminal. No me asusté por ello y continué.

Él dijo: "Debido a su edad, si fuera hombre, la arrestaría de inmediato". Le dije que, incluso si ese fuera el caso, todavía no debería arrestarme, porque todos los practicantes de Dafa son buenas personas. Me dijo que me fuera a casa rápidamente, que la campaña de arrestos duraría unos días. Me di cuenta de que su lado comprensivo había hecho lo correcto. Regresé al parque al día siguiente.

Conocí a todo tipo de personas en el parque, buenas, amables, decentes, indecentes e incluso agentes secretos. Recuerdo lo que dijo Shifu:

"...les dije que sólo permaneciendo inamovibles podrían manejar todas las situaciones" (Exponiendo el Fa en el Fahui de Canadá, 2005).

No importa quién seas, te salvaré. Creo que Falun Dafa es todopoderoso y una mente recta eliminará cien perversidades. Pude ayudar a casi todos a entender la verdad y elegir un futuro brillante.

Shifu me dio una segunda oportunidad en la vida. Estoy agradecida de ser una discípula del período de la rectificación del Fa. Haré las tres cosas diligentemente y seguiré a Shifu a casa.