(Minghui.org) Antes del inicio de la Cumbre del G 20 en Buenos Aires el 30 de noviembre, la Asociación Falun Dafa en Argentina presentó más de 30.000 firmas al presidente Mauricio Macri el 27 de noviembre. Las firmas instan a Macri a hablar con el líder chino Xi Jinping durante su reunión del 2 de diciembre para detener la represión en China.

Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, es una práctica espiritual basada en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Que ha sido perseguida por el exlíder comunista Jiang Zemin y el partido comunista desde julio de 1999. Según la información obtenida por Minghui, más de 4.200 practicantes han perdido la vida como resultado de las torturas durante la custodia policial.

Antes de la Cumbre del G 20 en Buenos Aires un puesto informa a los transeúntes sobre la supresión que Falun Dafa está sufriendo en China.

Representación de la tortura en protesta por la sustracción forzada de órganos, uno de los crímenes a los que son sometidos los practicantes en China por no abandonar sus creencias.

Peticiones para detener la tragedia

Las peticiones han sido firmadas por ciudadanos argentinos y de países vecinos que se han enterado de la persecución a Falun Dafa a través de los medios de comunicación y los eventos de los practicantes.

“Lamento escuchar que tantas personas inocentes hayan perdido la vida a causa de sus creencias", dijo un argentino. Otra persona afirmó: "No sabía nada de esto. Es horrible. ¿Qué debemos hacer para detenerlo?”.

La gente firma la petición después de enterarse de las violaciones de los derechos humanos que se están cometiendo contra los practicantes de Falun Dafa en China.

Una persona de Venezuela dijo: "El régimen comunista en China ambiciona el poder y mata a mucha gente. Es malvado".

Los principales autores de los delitos son acusados y se emiten órdenes de detención

Por más de una década, los practicantes han estado creando conciencia para poner fin a la persecución y llevar a Jiang ante la justicia. En la carta presentada al presidente Mauricio Macri por la Asociación Falun Dafa de Argentina se enumeran algunos de los progresos realizados en Argentina.

Octavio Araoz de Lamadrid, juez del Juzgado Federal N.º 9 de Argentina, emitió el 17 de diciembre de 2007 una orden de detención contra Jiang y su secuaz Luo Gan, exjefe de la oficina 610. Los dos altos funcionarios fueron acusados de crímenes de lesa humanidad. El juez Lamadrid ordenó al Departamento de Interpol de la Policía Federal Argentina que llevara a cabo la detención.

Influenciado por la embajada china en Argentina, el caso fue paralizado temporalmente. Más tarde fue reabierto debido a los constantes esfuerzos de los defensores de los derechos humanos.

Cuando Xi visitó Argentina el 18 de julio de 2014, los practicantes organizaron concentraciones pacíficas cerca del Hotel Sheraton, el edificio de oficinas presidenciales y el Palacio de Congreso Nacional para pedir el fin de la persecución y llevar a Jiang ante la justicia.

Los matones contratados por la embajada china acosaron y atacaron repetidamente a los practicantes. La policía argentina arrestó a un agregado militar adjunto de la embajada por cruzar la barricada policial y atacar a los practicantes.