(Minghui.org) El título para este artículo se me ocurrió al revisar el camino que he recorrido en mi práctica de cultivación. Aunque aún tengo un largo camino por recorrer para alcanzar los requisitos de Shifu, creo que esta es una buena oportunidad para mirar hacia atrás y aprender de mis experiencias.

Encontrando el camino a casa

Durante mi infancia a menudo estaba enferma y no fue fácil sobrevivir en el campo empobrecido. Después de graduarme de la escuela primaria, comenzó la revolución cultural y toda la nación estaba en caos. Siguiendo a los demás, salí de la escuela y trabajé la tierra con otros campesinos. Me casé con mi esposo cuando tenía veinte años y tenía una vida miserable.

Mi esposo tenía mal genio y también era alcohólico. Esperaba tener un hijo, pero le di dos hijas. Esto lo enfureció aún más y peleaba con nosotras todos los días. Dejó de trabajar a la edad de 37 años, y dijo que tenía que hacerlo debido a una intoxicación por alcohol, aunque seguía bebiendo y bromeando. Cuando estaba borracho volteaba la mesa del comedor y aventaba las cosas, insultaba a las niñas y a mí y también nos pegaba. Varias veces me atacó con un cuchillo y, justo antes de que me tocara, me gritaba de forma amenazante. A veces agitaba el cuchillo de cocina, obligándome a mí y a mis hijas a huir de la casa. Desesperada y buscando algo de paz, me convertí en budista.

Mi esposo murió a los 48 años, y esto fue un gran cambio para mí. Pero aunque ya había sido budista durante cinco años, no había encontrado un camino para alcanzar la liberación. Estaba desesperada. En esa época la información sobre Falun Dafa había llegado a mi región. Un joven que no conocía venía a mi barbería muy a menudo y me hablaba de Falun Dafa. Decía que la meditación mejora la mente y el cuerpo, y que uno podía alcanzar la Perfecció en una vida. Pensando que eso era tan precioso y que mi vida había sido tan dolorosa, decidí aprender.

En aquellos días en que empecé la práctica, sentí como si Shifu me hubiera salvado del desastre y me hubiera empujado hacia adelante. Shifu también me dio consejos para animarme a ser estricta conmigo y para seguir los principios de Falun Dafa.

Una gran llaga maligna apareció en mi espalda y creció hasta el tamaño de un tomate grande. Se abrió de golpe y el pus y la sangre salieron de pequeños agujeros como si fueran un nido de avispas. Incapaz de verlos o tocarlos, le pedí a mi hija que me limpiara el pus y la sangre con papel higiénico. Tenía miedo de verlos, y tuve que asegurarle que estaría bien. Mientras me limpiaba en una casa de baños públicos, me quedé en una esquina para evitar aterrorizar a los demás. Mis pensamientos eran simples y en mi mente no tenía la idea de que podría ser una infección bacteriana. Varios días después la llaga se secó y sanó.

Hablando más tarde con otros, escuché que una gran llaga maligna como esa causaría un dolor extremo y que el tratamiento médico era caro. Pero a lo largo del proceso no sentí ningún dolor y supe que Shifu me había ayudado. Mis otras enfermedades también se curaron, como la hernia de disco lumbar, artritis, insensibilidad en el hombro y problemas nasales.

Fui muy afortunada de haber encontrado una luz en la desesperada y larga noche, y un camino que me llevó de regreso a casa.

Una analfabeta usa la computadora

Cuando el exlíder del partido comunista Jiang Zemin prohibió Falun Dafa en julio de 1999, estaba muy triste. Mirando a la gente en la calle, sabía que si renunciaba a mi creencia me perdería en el laberinto de nuevo como ellos. Entonces me recordé que debía mantener mi fe firme en Falun Dafa.

Después de dejar de lado las nociones humanas, me uní a otros practicantes para oponerme a la persecución. Fuimos al gobierno de la ciudad para hacer los ejercicios y fuimos a Beijing para apelar. También distribuimos folletos y colocamos carteles en mi localidad. Los funcionarios me consideraron una organizadora y me detuvieron cinco veces. Mientras estaba bajo custodia, dudé bajo la presión, lo que me causó mucho dolor y un profundo arrepentimiento.

Para ayudar a otros a conocer Falun Dafa, a la edad de 63 años comencé a aprender a usar una computadora. A pesar de mi avanzada edad y mi deficiente educación, gradualmente aprendí algunos conceptos básicos, como por ejemplo cómo ingresar a Internet, descargar archivos, imprimir documentos y producir folletos. Esto fue de gran ayuda para mi área. Al entrar a Minghui, leo muchos artículos de practicantes en China y en el extranjero todos los días. Realmente disfruto la práctica de cultivación, como si fuera un pez en el agua o un pájaro en el cielo.

Aunque solo había terminado la escuela primaria, Shifu me ayudó y me dio oportunidades para aprender a escribir textos en chino en una computadora. Especialmente durante el momento en que presentábamos las demandas contra Jiang Zemin, ayudé a muchos practicantes a redactar sus demandas penales. Debido a que tenía más de 60 años y acababa de aprender a usar un mouse, todavía me era muy difícil escribir. Tenía mala vista y era torpe al manejar la computadora. Además, ya había olvidado el pinyin que aprendí en la escuela primaria. Así que en todo era una principiante.

Con mis pocas habilidades informáticas, me tomó mucho tiempo terminar la primera denuncia penal contra Jiang. Mientras escribía la segunda, porque el nombre del archivo era el mismo, accidentalmente reemplacé el artículo anterior con el segundo. Lo intenté varias veces pero no sabía lo que había pasado. Era un caluroso día de verano y estuve ocupada trabajando todo el día hasta altas horas de la noche. Estaba sudando y mis ojos estaban borrosos, y no sabía qué estaba pasando. Mis nociones humanas también surgieron: “Muchos jóvenes practicantes capaces no le dedicaron tiempo a eso. Y confiaron en una anciana con pocas habilidades para ayudarlos. ¡Ugh!”. No podía entender lo que pasaba.

A la mañana siguiente, varios practicantes llegaron a recoger las denuncias penales. Al verlos llegar, casi lloré y me quejé de la dificultad que tenía: "Soy una de las practicantes más ancianas de la región y no tengo una buena educación. Acabo de aprender a usar una computadora y tengo que hacer todo esto. Toda la carga de trabajo cayó sobre mí y fue realmente demasiado. Espero que los jóvenes como tú puedan hacer más...", les dije.

Al verme tan afligida, otros practicantes me consolaron diciendo que era muy capaz. Me animaron a continuar. Como todavía no había desayunado, un practicante me compró algo de comida. Después de calmarme, miré adentro y encontré mi apego al resentimiento y a la impaciencia, como si el no hacer estas denuncias a tiempo nos haría quedarnos atrás. Como resultado, no podía entender por qué algunos practicantes dudaban. Después de que me di cuenta de estas nociones humanas, un practicante con buenas habilidades técnicas llegó y resolvió el problema.

Después de preparar las denuncias penales contra Jiang, llevé a otros practicantes a enviarlas por correo a las oficinas locales de correos. Durante esos días tuve una molestia física por todo el cuerpo y no podía girar el cuello. Miré hacia adentro y noté que me gustaba estar a cargo y coordinar proyectos. De hecho, debería haber pensado más en esto desde la perspectiva de la práctica de cultivación, en lugar de liderar todo. Después de encontrar estos apegos, la incomodidad desapareció y me sentí relajada.

Cuando miré hacia atrás, me di cuenta de que Falun Dafa es extraordinario, ya que convirtió a una persona analfabeta como yo en una persona que podía ayudar mucho con la producción de materiales.

Responsable de salvar personas

En Guiando el viaje, el Maestro dijo:

“Esclarecer la verdad no es un asunto sencillo; no se trata solamente de descubrir el mal. Cuando esclarecemos la verdad estamos salvando seres conscientes; al mismo tiempo, esto toca el asunto de su propio perfeccionamiento, la eliminación de sus apegos durante la cultivación y el asunto de que los discípulos de Dafa sean responsables ante el Fa en su cultivación, lo mismo que tales asuntos como la forma de llenar y enriquecer ese mundo suyo en su perfección final" (Exponiendo el Fa en el Fahui Internacional de Washington D.C., 21 de julio de 2001).

Sabía que tenía que cultivarme bien, ayudar a Shifu con la rectificación del Fa y salvar seres conscientes. Pero solo lo había hecho esporádicamente en años anteriores. A partir del año pasado cambié mi enfoque y comencé a aclarar la verdad a dondequiera que voy.

La provincia de Heilongjiang se encuentra en el noreste de China y el invierno es muy frío, a menudo la temperatura llega a los 30 grados bajo cero (alrededor de -20F a -30F). A pesar de que hay nieve todos los días y de que el clima es extremadamente frío, salía todos los días para salvar a la gente. De hecho, pude hacerlo así en el último año y medio.

Esta primavera, aunque noté que los oficiales de policía estaban trabajando en casi todos los cruces de carreteras, estaciones de tren y otras áreas concurridas, no me molestaron y seguí haciendo lo que se supone que debo hacer. En el autobús envío pensamientos rectos para limpiar el ambiente.

Cuando conozco a alguien, generalmente primero les doy un recuerdo de Falun Dafa. Mientras examinan el hermoso regalo, les hablo sobre los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y luego de lo mal que el partido comunista ha tratado a los practicantes de Falun Dafa.

A veces comienzo hablando de temas estrechamente relacionados con la vida cotidiana, como los productos falsificados y los productos alimenticios adulterados o tóxicos. Les explico que el partido comunista causó la degeneración moral en China, y les recomiendo que renuncien a su membresía en las organizaciones del partido comunista. Muchos aceptan y me dan las gracias.

Por supuesto, uno también debe ser compasivo y sabio para transmitir los hechos con éxito. Una vez, cuando conocí a un hombre de unos 40 años en el autobús, le sonreí y le entregué un CD, diciendo que tenía un software que podía romper el bloqueo de Internet. "¿Se trata de Falun Dafa?", preguntó casualmente mientras lo tomaba. "Por supuesto, puedes acceder a una gran cantidad de información útil, incluido Falun Dafa", le contesté.

El hombre era muy platicador y dijo que trabajaba en el departamento de policía. Siguió expresando sus opiniones sobre Falun Dafa y sobre otros sistemas de creencias. Parecía muy bien informado y tenía buenas habilidades de razonamiento. Como resultado, apenas tuve la oportunidad de hablar.

La voz del hombre era muy alta y casi todos en el autobús podían escucharlo y sabían que trabajaba en un departamento de policía. Cuando llegó el momento de bajarme, lo interrumpí y le dije: "Lo siento, pero ahora tengo que irme. Me alegro de haberte conocido hoy para escuchar estas cosas, probablemente sea una relación kármica". Él asintió y dijo que sí. Al mirarlo a los ojos le dije: “Eres una persona inteligente e informada. Tengo que decirte algo”. Bajé la voz y dije sinceramente: “Todo tiene su destino, al igual que las diferentes dinastías en la historia de China. Recuerda siempre lo que es importante para nosotros y para nuestro futuro. Falun Dafa está aquí para salvar a la gente. ¿Qué tal si te ayudo a renunciar al partido con un seudónimo de Tian Yi?". Él asintió de nuevo y dijo: "Claro".

Antes de bajarme del autobús, estaba a punto de abrir mi bolsa para darle más materiales. Miró mi bolso con una sonrisa mientras agitaba el CD con el software hacia mí: "Esto está bien. Esto es más que suficiente".

Al mirar hacia atrás me doy cuenta de que cuando podemos mantener una mentalidad pacífica y compasiva, podemos ayudar a las personas a abandonar las organizaciones del partido comunista.

Haciendo el mejor uso del tiempo

A través de los años siempre he tratado a los demás con compasión y he podido permanecer tranquila sin importar lo que pase. Una vez alguien me preguntó: "¿Por qué una anciana como tú sale en un día tan frío? ¿No tienes miedo de que alguien te arreste? ¿Te pagan por hacer esto?". Respondí con una sonrisa y dije: "Bueno, ¿cuánto dinero crees que alguien tendría que pagarte para que hagas esto? Esto es compasión, alguien tiene que preocuparse por la seguridad y el futuro de los demás".

Vivo sola y tengo una agenda ocupada todos los días. Después de hacer los ejercicios por la mañana, estudio una Lección de Zhuan Falun antes de salir. Puedo ayudar a más de 10 personas, o hasta 20 personas, a abandonar las organizaciones del partido comunista en dos o tres horas.

Además, una vez pude memorizar Zhuan Falun en más de 8 meses. Ahora lo estoy haciendo por segunda vez. Al mismo tiempo memorizo muchos poemas de Hong Yin y a menudo leo artículos de Minghui.

Para ahorrar tiempo, solo tomo dos comidas al día, durante las cuales con frecuencia escucho los programas de radio Minghui. Mientras tanto, también envío pensamientos rectos para ayudar a los practicantes con yeli de enfermedad a recuperarse. También envío pensamientos rectos en los cuatro horarios establecidos cada día y estudio conferencias, además de Zhuan Falun. He decidido sumergirme completamente en el Fa y ser una verdadera discípula de Falun Dafa.

¡Gracias Shifu! ¡Gracias, practicantes!