(Minghui.org) Mi nombre es Zhang Shujun, soy una mujer de 35 años. Como la mayoría de los jóvenes, amaba la vida y estaba llena de vigor y vitalidad. Sin embargo, contraje leucemia cuando tenía tan solo 26 años. La enfermedad me llegó como un golpe fatal a mi vida. Mi mente se quedó completamente en blanco y me corrían las lágrimas por el rostro sin parar mientras estaba acostada en la cama del hospital. ¿Por qué yo? ¿Por qué la vida era tan injusta conmigo? Los interminables y dolorosos procedimientos médicos debilitaron mi sistema inmunológico y constantemente contraía gripe o tenía fiebre alta. Como era sensible a los medicamentos para combatir el cáncer, a menudo tenía una terrible picazón en todo el cuerpo. Tuve que rascarme fuerte y eso me causó una hemorragia. Debido a la duración de los tratamientos y a las frecuentes transfusiones de sangre, la piel del dorso de mi mano se puso dura. Me sentía descompuesta y vomitaba cada vez que me daban una transfusión.

Después de un año de estas dolorosas luchas, mi hermoso cabello negro se cayó debido a las grandes dosis de radiación y los tratamientos de quimioterapia. Perdí 15 kilos en solo unos días. Me sentí desesperada después de ver a varios pacientes de leucemia morir uno tras otro. Empecé a pensar continuamente en mi vida y en su valor: los seres humanos se dan cuenta de lo insignificantes e indefensos que son cuando se enfrentan a la muerte. Aunque sean ricos y tengan las posiciones más poderosas del mundo, en realidad no tienen nada. No dejaba de preguntarme, ¿cuál es el poder misterioso que domina y equilibra todo en este mundo de sufrimiento? Los procedimientos médicos me causaron muchas convulsiones; cualquiera de ellas podría haberme quitado la vida fácilmente. En ese momento, estaba delgada, tenía una palidez oscura y mi cuerpo se veía mal. Mi salud siguió deteriorándose incluso después de que varios hospitales occidentales y chinos me tratasen. Mis padres me cuidaron y sufrieron tanto emocional como económicamente. No sé cuántas veces mi madre lloró a mis espaldas. Yo lloraba sin parar. Me preguntaba si existía algún poder para ayudarme a escapar de las garras de la muerte. Recé y esperé vivir. En este instante, entre la vida y la muerte, de repente me di cuenta de que el significado de la vida no era simplemente buscar consuelo para uno mismo, sino que había cosas mucho más preciosas y hermosas.

En marzo de 1995, tuve la dicha de conocer Falun Dafa. Fue un punto de inflexión en mi vida. Al principio, cuando fui al sitio de práctica, ni siquiera pude realizar los primeros cuatro ejercicios, ya que estaba extremadamente débil y el estado de mi corazón era muy deficiente. Después de un tiempo de esforzarme en hacer los ejercicios, mi cuerpo se relajó gradualmente y pude terminar fácilmente los ejercicios de pie, que duraron una hora. ¡Sentí como si me hubieran salvado del infierno del dolor y de la desesperanza! ¡Fue un milagro!

Solo un mes después de empezar a cultivar los principios universales de Falun Dafa de "Verdad, Benevolencia, Tolerancia", la enfermedad que no había podido ser curada por la medicina moderna, y que le había costado a mi familia cientos de miles de yuanes [decenas de miles de dólares] había desaparecido por completo. ¿No demuestra esto que Falun Dafa es una ciencia genuina y extraordinaria? Mi sonrisa regresó a mi cara. De ser inválida y no poder cuidarme, pronto pude hacer las tareas domésticas y cuidar de mis padres. Ellos estaban tan felices de ver el cambio en mí. Después de tres años de tortura debido a esta grave enfermedad y sus tratamientos, finalmente pude experimentar las maravillas de estar completamente libre de enfermedad y de dolor. Los cambios en mi cuerpo y en mi mente me han hecho creer firmemente en la verdad de Falun Dafa. Después de solo dos meses de práctica, volví a trabajar. En mi vida diaria, seguí los principios explicados en el libro principal de Falun Dafa, Zhuan Falun. Trabajé duro y siempre consideré a los demás primero. Traté de mirarme primero cada vez que me enfrentaba a un conflicto. Bajo la guía del Fa [la Ley o principio universal], me esforcé por alcanzar un reino de conciencia de desinterés y altruismo. Los cambios que me ocurrieron fueron obvios para los supervisores y otros empleados de mi unidad de trabajo.

Mi madre también cambió mucho cuando comenzó a practicar Falun Dafa. Todas sus enfermedades desaparecieron y también su mal genio. Ella solía pelear con mi padre, pero ahora se ha vuelto amable y comprensiva gracias a la práctica de Falun Dafa. Mi familia es feliz y vive en perfecta armonía. Dafa me devolvió la vida, por lo tanto, debo beneficiar a los demás con mi vida y poner todo mi esfuerzo en aclarar la verdad y despertar la conciencia de la gente. Me siento triste cuando veo a personas que se entregan a la búsqueda de la fama y de sus propios intereses o que luchan indefensos contra enfermedades incurables.

Por lo tanto, cuando algunas personas en el régimen comenzaron erróneamente a perseguir y a calumniar a Falun Dafa, fui a Beijing para declarar la verdad y despertar la conciencia de la gente con mis experiencias personales y con mi vida que fue enriquecida por Dafa. Sin embargo, fui arrestada y detenida ilegalmente, y castigada por mi unidad de trabajo. Ahora me he visto obligada a dejar mi hogar y a vagar sin refugio para evitar ser perseguida. Sin embargo, creo que vale la pena que la gente deje de estar cegada por las mentiras del régimen después de escuchar mis experiencias. Espero que la gente sea capaz de distinguir entre la bondad y la maldad, y entre el bien y el mal examinando su propia naturaleza bondadosa.

¡Realmente espero que todos en este mundo sientan la misma felicidad espléndida y magnífica que yo siento! Ahora entiendo por qué los cultivadores debemos alcanzar la iluminación recta del desinterés y el altruismo. ¡El propósito de la existencia de un cultivador es enteramente para el beneficio de otros!      

23 de marzo de 2001

Nota del editor: 
Por razones de seguridad, el nombre en el artículo fue cambiado a un seudónimo. Se omitieron todos los nombres de hospitales, médicos y direcciones.
Publicado en el libro: Vida y esperanza renovadas: El poder curativo de Falun Dafa Copyright (C) 2005, www.FalunDafa.Org