Matrimonio de Chongqing encarcelado desde 2014 por colgar carteles de Falun Dafa

(Minghui.org) Condenaron a prisión a un matrimonio de Chongqing, que en la segunda mitad de 2014 colocó carteles en los que se podía leer: “Falun Dafa es bueno” y “Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”.

Falun Dafa, también llamado Falun Gong, es una práctica para mejorar mente y cuerpo, basada en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. El régimen comunista chino ha estado persiguiendo a esta disciplina desde julio de 1999.

Arrestaron a la Sra. Gong Yigui y a su marido, el Sr. Chang Guangxing, el 10 de enero de 2014. Los enviaron al centro de detención de Zhoujiaba, algunas horas después.

Como la policía sospechaba que se habían visto involucrados más practicantes de Falun Dafa en la colocación de los carteles, intentó extraer confesiones a la pareja, durante meses, para saber de quién había partido la idea inicial de difundir información sobre Falun Dafa colgando carteles, quién había escrito las palabras, quién había elegido los emplazamientos y quién los había colocado.

La Sra. Gong, se recuperó de un cáncer de útero y de escorbuto, en cuanto empezó a practicar Falun Dafa. Pero tuvo una recaída cuando permaneció detenida. Cuando la policía notó que su salud se deterioraba, decidió ayudarla y concederle la libertad condicional bajo fianza. Le dijeron que era lo mejor para ella. Querían que se recuperara en su casa.

La Sra. Gong se lo agradeció, porque así podía cuidar de su hija y que asistiría cuando la policía la citara, si querían hablar con ella de vez en cuando.

Uno de los policías le dijo: “En realidad, aún no sabemos quien de ustedes colocó los carteles. Comprendemos que son gente de fe y que desean decir cosas buenas de Falun Dafa. ¿Por qué no convence a su marido para que nos cuente todo lo que sabe sobre estos carteles? En cuanto conozcamos los hechos, cerraremos rápidamente su caso. ¿No ha visto lo amables que hemos sido con usted? Dijimos que la liberaríamos y el tribunal aprobó su libertad bajo fianza, de inmediato”.

La Sra. Gong le creyó al policía y le dijo a su marido que confesara lo que sabía.

Poco después, la detuvieron y la condenaron a 5 años de cárcel. A su marido, también le impusieron otra pena de 5 años.

La Sra. Gong cumple condena en la cárcel de mujeres de la Ciudad de Zouma. No se sabe, con claridad, dónde se encuentra encarcelado su marido.