(Minghui.org) En todos los rincones del planeta podemos encontrar gente que disfruta practicando Falun Dafa. Sus efectos son maravillosos porque no solo mejoran la salud de la gente sino que las ayuda a convertirse en mejores. Brasil es un claro ejemplo de cómo esta práctica se llega a difundir de boca en boca. Como se incrementa diariamente el número de personas que la practican, han florecido por todo el país lugares donde se enseña.

Un sitio de práctica en una zona residencial de São Paulo

Un practicante, llamado Alberto, ha organizado un sitio de práctica en una pequeña plaza de una zona residencial en São Paulo. La plaza es un famoso punto de encuentro donde se dan cita los lugareños. Muchos observan a Alberto y a otros practicar aquí. Durante los últimos ocho años, el grupo ha ayudado a mucha gente que quería aprender los ejercicios.

Practicante, reparte folletos de Falun Gong.

Practicando los ejercicios de Falun Gong.

“Para mantener este sitio funcionando”, comenta Alberto, “se necesita la firmeza y la determinación de un practicante de Falun Dafa”. Se produjeron algunas situaciones que crearon ciertas dificultades. A veces, por ejemplo, hay grupos que celebran fiestas en el parque, fuman, beben y ponen la música alta. A pesar de todo, con decisión, persistencia y pensamientos rectos el sitio de práctica se ha vuelto más estable y menos propenso a las interferencias.

Generando conciencia frente al Museo de Arte de São Paulo

Gilberto y Sueli, son una pareja que practica Falun Dafa. Regentan un pequeño negocio, con cerca de 10 empleados. Tratan a todos sus empleados como si fueran miembros de su familia.

La pareja dio a conocer Falun Dafa a todos sus empleados y le habló sobre la persecución en China. Todos los trabajadores conocen los beneficios de Falun Dafa y la brutalidad de la persecución.

Hay una calle que se llama 25 de Mayo, en São Paulo. Hay muchas tiendas chinas, y como en la mayoría de barrios chinos del mundo, la propaganda del régimen comunista chino se puede encontrar por todas partes. La gente de aquí es igual que la de cualquier otro lugar, y muchos chinos han caído víctimas de la propaganda que demoniza a Falun Gong. Para despertar conciencia sobre la persecución a Falun Gong en China, Gilberto va al barrio chino, todos los sábados, y reparte el ‘Minghui Semanal’ en chino.

Practicando Falun Gong frente al Museo de Arte de São Paulo.

El Museo de Arte de São Paulo (MASP), se encuentra ubicado en un concurrido distrito financiero. Muchas personas pasan por allí todos los días. Gilberto y otros practicantes acuden todos los meses para generar conciencia e instalan paneles informativos sobre Falun Dafa y pancartas, distribuyen folletos y demuestran los ejercicios.

Fue aquí donde algunos de los practicantes locales conocieron Falun Dafa por primera vez. También ha sido aquí donde muchos han conocido la verdad sobre la persecución en China.

Difundiendo Falun Dafa en un vecindario asiático

Dos practicantes chinas de Nueva York visitaron Liberdade, un vecindario asiático de São Paulo, y ayudaron a organizar un sitio de práctica, en julio de 2017. Impartieron clases gratuitas, repartieron materiales informativos y generaron conciencia sobre los miles de beneficiados.

Enseñando Falun Gong en Liberdade, una comunidad asiática local.

El Sr. Wu asiste al sitio de práctica. Lleva 2 años practicando Falun Dafa. Se lamenta por los chinos que han sido engañados por el PCCh, quiere ayudarlos y que conozcan la verdad sobre Falun Gong y la persecución.

Va a las tiendas chinas de la localidad y reparte materiales sobre Falun Dafa. Los comerciantes ya lo conocen. Un joven, de apenas 20 años, se dirigió a él un día, mientras repartía el ‘Minghui Semanal’, y le preguntó: “He leído muchas cosas en su periódico. Quiero renunciar a ser miembro del partido. ¿Puede ayudarme?”.

Dando a conocer Falun Dafa en un parque

Los domingos se realiza la práctica en grupo, en el parque.

Niños aprendiendo a meditar.

Ticiane (izquierda) presenta Zhuan Falun a un recién llegado.

Ticiane, se alegra cuando le hacen preguntas sobre Falun Dafa. Explica: “Es maravilloso. Cuando leo Zhuan Falun y practico los ejercicios es como si entrara en una dimensión pura y armoniosa”.

Descubrió, muy pronto, que a pesar de tener una buena titulación académica, un marido con un buen salario y una bonita casa, la vida no colmaba sus expectativas. Eso cambió después de empezar a practicar Falun Dafa.

Organiza un sitio de práctica en un parque cerca de su casa y publica información sobre el grupo de práctica en Facebook. Desde hace tiempo no dejan de llegar personas para unirse al grupo. Apuntó: “Falun Dafa aporta enormes beneficios. Quiero darlo a conocer a más personas”.

Eliminando apegos

Matheus en el estudio grupal.

Matheus es un empleado del gobierno que lleva casi cuatro años practicando Falun Dafa. “Después de empezar a practicar Falun Dafa, mi salud mejoró mucho. Solía resfriarme y cansarme con facilidad. ¡Ya no! Mi vision del mundo ha cambiado completamente”.

Era miembro entusiasta de un club de motociclistas antes de practicar Falun Dafa. Acudía allí todas las semanas. A los miembros del club les gustaba mucho exhibir sus motos, las fiestas y beber. Aunque le gustaba asistir a estos encuentros, sentía que producían un efecto no deseado en su vida y su salud.

Unos meses después de empezar a practicar Falun Dafa, dejó de sentir la necesidad de mantener un estilo de vida que, según reconoció, no era nada saludable. Acabó casándose y comenzó una nueva vida.

Difundiendo Dafa en pequeñas poblaciones

La ciudad de Curitiba es la capital del estado sureño de Paraná, en Brasil. La ciudad de Palmeira se encuentra a 80 kilómetros de la capital y tiene 198 años de historia. La mayoría de los residentes son descendientes de inmigrantes alemanes, italianos, polacos y rusos.

Falun Gong en un parque del centro de Curitiba.

Los practicantes locales organizaron un grupo de práctica en mayo de 2017. Aprovechan cada oportunidad para hacer que más personas conozcan la práctica y comprendan los aspectos básicos de la persecución en China.

Practicando Falun Gong en una plaza del centro de Palmeira.

Adriano y Guilherme, practicantes, dan clases gratuitas tres veces a la semana, en 2 puntos de la ciudad de Curitiba. Irapuan, practicante de Palmeira, enseña Falun Dafa en una plaza pública tres veces a la semana. A medida que más gente aprende Falun Dafa, más sitios de práctica siguen abriéndose por todo Brasil.