(Minghui.org) El 4 de agosto, se organizó una concentración ante la embajada china en Washington D.C. para protestar por la prematura muerte del Sr. Yang Yuyong, después de haber sido encarcelado y torturado por su creencia en Falun Gong. Los manifestantes también exigieron la puesta en libertad de la esposa del Sr. Yang y de sus seres queridos que aún permanecen detenidos en China por practicar Falun Gong.

Concentración frente a la embajada china en Washington D.C.

El Sr. Yang Yuyong, practicante del distrito de Wuqing en la ciudad de Tianjin, China, murió el 11 de julio en el centro de detención de Wuqing. Las evidencias revelaron que había sufrido graves torturas físicas antes de morir. En el hospital, su familia observó grandes heridas y hematomas en su cuerpo. Tenía sangre en sus ojos y oidos, y un gran corte en su oreja. Los dedos de sus pies habían sufrido perforaciones con un objeto afilado.

Las autoridades de Tianjin enviaron a multitud de policías, en 14 coches de policía, para que se llevaran el cuerpo por la fuerza.

La esposa del Sr. Yang, Meng Xianzhen, permanece recluída en un centro de detención desde que la arrestaran el 7 de diciembre de 2016.

La Sra. Yu Jing, amiga del Sr. Yang dio un discurso durante la concentración.

"Me quedé perpleja cuando escuché la noticia", dijo la Sra. Yu Jing, que había conocido al Sr. Yang antes de mudarse a los EE.UU. "Que una persona tan buena, que disfrutaba de tan buena salud, pierda su vida tan rápida y tan brutalmente... Es difícil de sobrellevar".

En su manifiesto, durante la concentración, describió al Sr. Yang como: "Una persona feliz y responsable, siempre dispuesto a ayudar a los demás. Era muy querido en su vecindario".

La Sra. Xu Runtao expresó durante el evento, que la muerte del Sr. Yang aumenta la preocupación que siente por su madre, que hoy en día también sigue detenida en la misma ciudad por su creencia en Falun Gong. Su madre, la Sra. Wang Sirong, permanece detenida desde febrero de 2017.

Xu Runtao solicita la liberación de su madre, Wang Sirong, y de otros practicantes encarcelados en China.