(Minghui.org) Eché una mirada en profundidad a mi estado de cultivación hace poco y comprendí que no lo había hecho bien al estudiar el Fa, aclarar la verdad, hacer los ejercicios y tampoco al enviar pensamientos rectos. No había alcanzado los requisitos básicos de un practicante.

Los practicantes locales pensaban que era un coordinador diligente, pero mi estado de cultivación me avergonzaba. Si hubiera sido un practicante común, solo sería un problema personal. Pero al ser coordinador mi estado de cultivación podía llegar a afectar a mi región negativamente.

He estado ocupado con diversos proyectos de Dafa. Les decía a otros que necesitaban mirar hacia dentro, así que solo hacía que los demás se cultivaran. En consecuencia, nuestro grupo de practicantes ha experimentado grandes conflictos y desacuerdos.

La importancia de memorizar

Dos practicantes de otra ciudad me visitaron hace algunos años. Solíamos trabajar juntos en los mismos proyectos de Dafa. Compartieron su experiencia sobre memorizar el Fa y me sugirieron que hiciera el intento.

Lo que decían tenía sentido, pero todavía no estaba preparado para recibir el consejo. Pensé que memorizar el Fa era demasiado difícil, que sin un deseo fuerte y un largo período de duro trabajo, uno no podría conseguirlo. Zhuan Falun, por sí solo, es un libro grueso, sin mencionar los tres volúmenes de Escrituras esenciales para mayor avance, los cuatro de Hong Yin y los demás libros de Dafa. Me agobiaba con solo pensar que tenía que memorizarlos.

Creía que leer los libros del Fa resultaba más rápido y fácil. Cuando empecé a memorizar el Fa con estos dos practicantes, enseguida detectaron mi brecha, el apego de la pereza. Al poco tiempo, surgió mi corazón de miedo a las dificultades y a los obstáculos, el cual me bloqueó durante mucho tiempo.

Sin embargo, los dos no se dieron por vencidos. Me visitaron varias veces. Me contaron que recitaban Zhuan Falun de memoria con frecuencia. De hecho, lo han copiado a mano y memorizado muchas veces, así como los tres volúmenes de Escrituras esenciales para mayor avance. Los practicantes de nuestra localidad quedaron muy impresionados al escucharlos.

En una ocasión, los visité con varios practicantes de mi localidad. Recitaban de memoria el Fa mientras que nosotros sólo podíamos leerlo. Pudimos observar que se trataba verdaderamente de una brecha en nuestra cultivación.

Ellos me animaron, diciéndome que si podía llegar a memorizar bien el Fa, muchos de los practicantes locales se contagiarían y memorizarían. Pero que si no alcanzaba a comprender la importancia de memorizar el Fa, no lograría mejorar lo suficiente, y que esto quizás afectaría a muchos de los practicantes locales que no siempre basan sus acciones en el Fa. Estos practicantes cuando encuentran dificultades, no pueden recordar las palabras del Maestro para resolver el problema. En lugar de eso, preguntan a otro practicante, a un coordinador o intentan encontrar artículos sobre el asunto en cuestión en la página web de Minghui, lo que es realmente muy triste.

Sus palabras me tocaron profundamente. Me di cuenta de que este era un asunto serio. Si los practicantes no memorizaban el Fa debido a mi renuencia a hacerlo, generaría una gran cantidad de yeli ya que estaría influyendo en el grupo negativamente.

Intenté memorizar el Fa en una ocasión pero abandoné la idea enseguida. Esta vez decidí persistir hasta recitarlo de memoria, y no abandonar, sin importar como estuviera de ocupado o que interferencia encontrara.

El grupo se beneficia por memorizar y recitar el Fa

Dos grupos de estudio del Fa empezaron a memorizar el Fa, así que el campo de pensamientos rectos se fortaleció notablemente. Nos animábamos unos a otros y nos señalábamos nuestras deficiencias manteniendo puras nuestras mentes.

Casi todos nos encontramos con el mismo problema: uno podía recitar de memoria el Fa, habitualmente en su casa, pero tan pronto como llegaba al grupo de estudio del Fa, nos poníamos nerviosos y se nos trababa la lengua.

Descubrimos que la raíz del asunto era el apego a perseguir la fama y el deseo de ser respetado por los demás. Cuando eliminamos los apegos, no volvimos a ponernos nerviosos.

Dos años después teníamos un buen ambiente de grupo donde recitar el Fa de memoria. No hubiéramos alcanzado tan buenos resultados si cada cual lo hubiera hecho por su cuenta.

El Maestro nos dijo:

“Estudia el Fa y obtén el Fa,

comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación,

haciéndolo todo de acuerdo a Él,

si puedes hacerlo así,

cultivación será” (Cultivación sólida, Hong Yin).

Fuimos incrementando gradualmente de un párrafo a dos párrafos en nuestras sesiones de memorización del Fa. Después de una página a dos páginas, tres y hasta cuatro páginas. Un practicante mayor que tiene 70 años podía memorizar cinco páginas por sesión.

Tres practicantes ancianos son muy activos. Habían recibido poca educación y tenían muchas ocupaciones domésticas. Encontraban problemas para poder leer cada palabra. Pero ahora han memorizado Zhuan Falun, y Escrituras esenciales para mayor avance III.

Estudiamos y recitamos Zhuan Falun principalmente. Los demás libros de Dafa los memorizamos por variar un poco. Ahora estamos acabando de memorizar Hong Ying III y después empezaremos a memorizar sistemáticamente Escrituras esenciales para mayor avance.

Los nuevos artículos del Maestro, tales como Lunyu, RecuerdenCon respecto a la conmoción que causó el artículo sobre el Fu Yuanshen (espíritu primordial asistente), los memorizamos tan pronto como son publicados en la página web de Minghui.

Después de acabar de recitar el Fa de memoria, compartimos experiencias. Nadie habla acerca de quién tiene razón o quién está equivocado. Todos los conflictos han sido eliminados.

Tener la mente ocupada con el Fa es una cosa buena

Cuanto más recitamos el Fa, más profundos son los significados que revela. A menudo me ilumino repentinamente a un nuevo principio del párrafo que memoricé, me emociono mucho y mis lágrimas brotan. Siento que el Fa es realmente insondable, y que no éramos diligentes antes de empezar a recitar el Fa.

Los practicantes de mi grupo de estudio del Fa trabajan en granjas. Tienen copias hechas a mano del Fa en hojas de papel. Meten las hojas dentro de sus bolsillos y se van a trabajar a la montaña. Mientras sus manos están ocupadas, realizando tareas, sus cerebros están ocupados memorizando el Fa. Si olvidan algo, lo consultan en la hoja de papel.

Memorizo el Fa mientras voy en el bus. Ahora no me molesta cuando tengo que invertir dos o tres horas de viaje en bus.

Los practicantes locales se preocupan porque quizás sea una falta de respeto hacia el Maestro estudiar el Fa mientras hacen otras cosas. Pero acaban llegando a la conclusión de que tener la mente ocupada con el Fa es una cosa buena.

Memorizar el Fa funciona especialmente bien para algunos practicantes que fallan a la hora de prestar atención leyendo y estudiando el Fa.

Me he iluminado y obtenido muchos nuevos entendimientos sobre el Fa desde que empecé a recitarlo de memoria. Los beneficios de leer el Fa y memorizarlo, no tienen comparación.