(Minghui.org) Una mujer se volvió saludable, ya no tenía malhumor desde que comenzó la práctica de Falun Dafa. Su comportamiento influenció a sus vecinos, quienes dejaron de pelear y robarse entre sí. Intentaron frenar a los oficiales del régimen que perseguían a Falun Dafa, y algunos incluso de volvieron practicantes.

Falun Dafa es demasiado bueno para ser verdad

Soy de un pueblo pobre en el que era común que la gente robara cosas como granos y ganado entre sí. Un día sospeché que mi vecino robó nuestra madera y le grité. Mi vecino estaba tan enojado, que vino hacia mí como para golpearme. Mi esposo estaba asustado y se escondió en la casa. Su comportamiento me puso muy molesta.

Las finanzas de nuestra familia eran justas. No teníamos suficientes tierras para nuestra granja, pero había un montón de multas e impuestos que pagar por violar la política de un solo hijo. Nunca tuvimos nada de dinero de sobra al final del año. Con todo ese stress, mi salud se deterioró. No podía trabajar, y para colmo de males, me hirieron en un accidente automovilístico. Mi temperamento, el cual ya era terrible, empeoró con mis problemas físicos y nuestra pobreza. Casi toda la gente en el pueblo me odiaba.

Mi hermano menor y su familia practicaban Falun Dafa. Les hacía pasar un mal momento si me contaban cómo la práctica me beneficiaría. Un día mi esposo tuvo un severo problema estomacal, que afectó a toda la familia. Esto llevó a mi esposo a comenzar a practicar Falun Dafa.

No me oponía porque quería que siga trabajando. Luego de leer el libro principal, Zhuan Falun, su estómago se curó. Esto, en cambio, me inspiró a aprender los ejercicios con él y otros practicantes. En sólo cinco días, todos mis problemas de salud como problemas espinales, bronquitis, tos, y pérdida parcial de la visión desaparecieron. Para mi familia, Falun Dafa era demasiado bueno para ser verdad. Era mucho más fácil que ir al hospital y era completamente gratis.

Leí Zhuan Falun y dice:

“Durante la cultivación-refinamiento, específicamente cuando estás lidiando con conflictos o cuando otros te tratan mal, pueden existir dos clases de situaciones: una es que posiblemente tú hayas maltratado a esa persona en tu vida anterior; sin embargo, tu corazón está muy desequilibrado: «¿Cómo me trata así?». Pues, ¿cómo trataste tú así a esa persona anteriormente? Dices que en aquel entonces no sabías y que en esta vida no importan los asuntos de ese otro tiempo de vida; eso no va de ninguna manera”.

A partir de entonces, dejé de guardar rencor contra mi marido.

El secretario del pueblo difunde “Falun Dafa es Bueno”

Ambos, mi esposo y yo, seguimos los principios de Falun Dafa en cualquier cosa que hagamos. Éramos los primeros en entregar nuestra porción de granos al régimen cada año mientras que otros simplemente se rehusaban, sin importar cuánto los oficiales delpueblo los presionaran. Al final, el secretario del gobierno difundió a través del altoparlante público, “en efecto Falun Dafa es bueno. Si todos lo practicaran, no tendría que trabajar tan duro”.

Cuando la gente me preguntaba por qué voluntariamente le entregaba la cuota de granos, les hablé de los principios de Falun Dafa: Verdad, Benevolencia, Tolerancia. Aquellos con quienes hablé, rápidamente entregaban lo que debían.

Uno de mis vecinos estaba construyendo una casa mientras estábamos fuera del hogar y tomó una cantidad significativa de nuestras tierras sin preguntar. Otrosvecinos le advirtieron y esperaban ver una gran pelea luego de que regresáramos. Tan pronto como tuvo la casa, el vecino nos dijo que había usado nuestra tierra para construir un granero. Le dijimos que continuara, el cual se sorprendió ya que esperaba una pelea.

La gente del pueblo notó que había dejado de maldecir y regañar a la gente. Todos dijeron que había cambiado para mejor debido a Falun Dafa.

“Sólo un practicante de Dafa Podría ser tan bondadoso”

Un amargo frío invierno escuché que uno de los vecinos, Wang, se había enfermado mentalmente porque su esposa lo había dejado. Ninguno de sus hermanos quería hacerse cargo de él porque era violento. Ninguno de los otros vecinos querían ayudarlo porque su padre solía acosar a todos. Estaba solo en su casa sin comida, agua o calefacción.

Le pedí a mi esposo que llevara a Wang algo para comer. Cuando llegamos allí, Wang no se despertaba. Mi esposo hizo un fuego y le cocinó unos fideos. Él intentó levantarlo de nuevo, pero Wang no podía despertarse. Mi esposo se puso nervioso y continuó intentando. Gritó “Falun Dafa es bueno” muchas veces. Cuando Wang finalmente recuperó la conciencia, rompió en llanto. Devoró la comida preparada por mi esposo y dijo: "Falun Dafa es bueno".

Mi esposo hizo un fuego para calentar la cama de Wang, arregló sus ventanas y puertas, le trajo leña y comida todos los días por los siguientes tres meses. Wang nos gradeció, y todos en el pueblo estaban contentos de verlo finalmente bien. Ellos dijeron que sólo los practicantes de Falun Dafa podrían ser tan bondadosos.

Wang practicó Falun Dafa con nosotros todos los días y su enfermedad mental se fue. Él luego pudo vivir con su hermano sin ningún problema.

Un hombre de unos 20 años perdió sus piernas y no tenía ninguna familia que cuidara de él. Mi esposo le trajo leña y comida y le ayudó a limpiar su sucia cama. Cuando el invierno terminó, su madre regresó de las afueras y vino a expresar su gratitud.

Los habitantes del pueblo siguen los principios de Falun Dafa

Un día un ladrón robó todo el ganado de una pareja y envenenó a todos los cerdos. Fui a verlos y les dije lo que el Maestro dice en Zhuan Falun:

“…si algo te pertenece, no lo perderás, y si algo no es tuyo, no vendrá por más que luches”.

“Este universo nuestro, además, tiene un principio llamado: sin pérdida no hay ganancia, para ganar hay que perder”.

Les expliqué que deberían haber ganado “De”, una materia invaluable ganada a través del sufrimiento. También le sugerí que no debía tomar la misma venganza, porque perdería la virtud que había ganado si lo hacían. Eventualmente se pusieron felices cuando dejaron ir la situación.

La esposa era conocida por maltratar a sus suegros. Le sugerí que le comprara regalos para las vacaciones ya que era una buena tradición y no debería pasarla por alto. Comenzó a tratar a sus suegros con respeto. Sus otras cuñadas también comenzaron a hacer lo mismo. La familia entera se volvió más amorosa y feliz.

Además de aconsejar a la gente que dejara de lado su obsesión por recuperar sus bienes robados, también hablé con los ladrones. Una vez fui a ver a una pareja, que era sospechosa. Les conté acerca de los principios de pérdida y ganancia y dije, “si pierdes toda tu virtud, no vas a ser capaz de tener nada. No conseguirán nada incluso si mendigan en la calle”. La cara de los ladrones se volvió roja. Al final me dijeron: “Falun Dafa es en efecto bueno. Si todos lo practicaran, este pueblos sería un lugar mejor”.

Otra pareja estaba por divorciarse. El esposo acusaba a su mujer de no cocinar o hacer quehaceres. La esposa se quejaba de que él tenía un mal temperamento. Le conté a la esposa acerca de los principios de Falun Dafa y le aconsejé que trate a su familia con gratitud. Le sugerí que cocine y lave para ellos.

Ella hizo exactamente lo que le dije. Su suegro me preguntó “¿Qué le dijiste?”. No ha cocinado ni hecho lavados desde que llegó seis años atrás. Préstame tus libros de Falun Dafa, ¿quieres? La pareja luego dejó de pelear. Se volvieron practicantes y practican conmigo todos los días.

El pueblo entero sabe que “Falun Dafa es bueno”

Con el tiempo, las propiedades dejaron de ser robadas y nadie peleó ni maldijo más. Todo el mundo en el pueblo sabe acerca de los principios de Falun Dafa. Luego de que la persecución a Falun Dafa comenzó, los oficiales del gobierno vienen a controlar el pueblo. Los carteles de los palos de energía decían: "Falun Dafa es bueno". Cuando los oficiales le dijeron al jefe del pueblo que los bajara, se negó. Cuando la policía y los oficiales de la oficina 610 trataron de derribar los carteles, los habitantes protestaron y no los dejaron.