(Minghui.org) El juez y fiscal del caso interrumpieron constantemente la defensa de una abogada durante un juicio reciente a un practicante de Falun Gong.

El juicio a la Sra. Gu Li se realizó el 28 de abril de 2017 en la corte del distrito de Jinzhou en Dalian. La Sra. Gu fue arrestada el 6 de diciembre de 2016 mientras hablaba con tres soldados sobre haber sido puesta en prisión como parte de la persecución a Falun Gong del régimen comunista chino. Desde ese momento permanece detenida en el centro de detenciones de Yaojia en Dalian. Su arresto fue aprobado el 27 de diciembre de 2016.

Juicio retrasado por la corte

La Familia de la Sra. Gu y su abogada llegaron a la corte 15 minutos antes de la hora en que comenzaría el juicio a las 9:30 a.m. El personal de seguridad les dijo que el juez no había llegado todavía y que tenían que esperar fuera de la corte.

La abogada habló nuevamente con el personal de seguridad, y le pidieron que continuara esperando. Ella y la familia de la Sra. Gu pudieron finalmente entrar a la corte a las 9:45 a.m.

Defensa es interrumpida

El juez, el escribano y el fiscal ya estaban sentados cuando la abogada de la Sra. Gu y su familia entraron a la sala. Cinco oficiales y el alguacil estaban sentados también y había cuatro policías de guardia.

El juez comenzó el juicio antes que la abogada pudiera sacar la documentación necesaria. Rápidamene leyó la lista de nombres del personal y del fiscal involucrados en el caso. Fue tan rápido que la abogada no pudo escuchar claramente. Cuando le pidió al juez que repitiera los nombres, el juez se negó y le echó la culpa por no escuchar con cuidado.

Durante la repregunta de la defensa, el juez interumpió frecuentemente a la abogada e intentó apurarla.

Mientras la abogada continuaba defendiendo a la Sra. Gu el juez siguió interumpiéndola, diciendo que su defensa no estaba "relacionada con el caso".

"Ha tomado mucho tiempo interrumpiéndome y no dejándome hablar", dijo la letrada. "Habría terminado antes si no me hubiera interrumpido".

Cuando dijo que no había bases legales para la persecución a Falun Gong, el juez y el fiscal le gritaron que dejara de hablar. El juez golpeó el podio fuertemente con el mazo.

El fiscal también le pidió al escribano que escribiera en los registros del juicio que investigaría ciertas reglas y buscaría castigo para la abogada por su defensa.

A medida que continuaba el juicio, el juez y el fiscal le gritaron nuevamente a la abogada cuando dijo que hablar con la gente sobre la persecución estaba permitido bajo la libertad de expresión. Al final terminaron su defensa cuando dijo que las cortes chinas estaban acusando y sentenciando a practicantes de Falun Gong en base a razones políticas y no al estado de derecho.

La abogada dijo: "¿Cómo saben si mi defensa no se relaciona con el caso si ni siquiera lo he dicho? Si no aprueban primero mi discurso, y sólo puedo decir las cosas con la que ustedes están de acuerdo, entonces no necesitamos abogados durante las pruebas judiciales".

El juez cerró la sesión sin emitir veredicto.

La abogada emitió una queja sobre el juez luego del juicio.

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