(Minghui.org) Los practicantes de Falun Gong reclamaron durante la visita del presidente chino Xi Jinping que se pusiera fin a los 18 años de persecución que vienen sufriendo en China, y que se lleve al exdictador comunista Jiang Zemin ante la justicia, por ser el que lanzó y dirigió personalmente dicha persecución.

El jueves, los practicantes desplegaron pancartas y mostraron los ejercicios a lo largo de la ruta desde el hotel de Xi hasta el Mar-a-Lago de Palm Beach, Florida, donde el presidente Trump se reuníría por primera vez con Xi.

Las pancartas en el camino desde el hotel de Xi hasta Mar-a-Lago.

En las pancartas de los practicantes se leía: “Falun Dafa, Verdad-Benevolencia-Tolerancia”, “Pongamos fin a la persecución contra Falun Gong”, y “Lleven a Jiang Zemin ante la justicia”.

Tres objetivos principales

Lin Xiaoxu, residente en Washington D.C. y científico del Laboratorio de Investigaciones del Ejército de los EE.UU. explicó que los practicantes se reunieron allí con tres objetivos principales.

“Primero, queremos decirle a la gente y a los políticos que Falun Dafa esta siendo injustamente perseguido en China. Segundo, queremos que el presidente Xi escuche nuestra voz, y acabe con la persecución. Y tercero, esperamos que el presidente Xi pueda tomar acción y lleve a Jiang Zemin ante la justicia”.

Lin Xiaoxu, residente en Washington D.C. y científico del Laboratorio de Investigaciones del Ejército de los EE.UU., se une a la concentración a favor de Falun Gong durante el encuentro que mantuvieron Xi y Trump.

Lin también pidió al presidente Trump que abordara el asunto de los derechos humanos además de los asuntos mercantiles e internacionales durante la reunión con Xi.

Describió que en el reciente informe publicado por “Freedom House” se habían contabilizado 933 casos entre 2014 y 2016, en los cuales practicantes de Falun Gong habían sido condenados por su creencia.

“Esto es solo la punta del iceberg. Numerosos casos de persecución ni siquiera se registran”, afirmó.

También relató a los medios cómo su familia en China había sido amenazada por los policías locales, para impedir que asistiera a este evento.

“Le dijeron a mis familiares en China, que si asistía a este acto, mi madre y yo nos encontraremos con problemas cuando regresemos a China”, explicó Lin.

Concluyó: “Espero que los perseguidores sepan que sus acciones serán registradas en la historia, y que tendrán que afrontar las consecuencias si insisten en seguir las políticas de persecución de Jiang Zemin”.

Yuan Qing, otro practicante de Tampa, pidió ayuda para rescatar a su madre, la cual fue condenada a seis años, en febrero, por su creencia en Falun Gong.

“Su salud se está deteriorando en el centro de detención, y no le permiten a mis familiares visitarla”, expuso.

El Sr. Yuan espera que el presidente Xi le preste atención a este asunto, libere a su madre y a los demás practicantes de Falun Gong encarcelados.

Practicantes occidentales de Falun Gong hablan

Denis García de Georgia, tiene 60 años, y asistió al acto para exigir a ambos presidentes que ayuden a detener la persecución. Dijo que practicar Falun Gong los últimos 14 años le había aportado una gran salud y que no se debería permitir que la persecución continúe.

Dzina Amma, de Nueva York, dijo que hizo el viaje a Florida porque quería comunicarle al presidente Xi que Falun Gong ha tenido un impacto positivo en la sociedad.

Le decía en su mensaje a Xi: “Por favor observe a los practicantes en los EE.UU. No debería tener miedo a Falun Gong”. Añadió: “También quisiera decirle al presidente Trump que el pueblo chino está sufriendo por tener creencias, y que los EE.UU. debería ayudarlo”.