(Minghui.org) La Sra. Guo Baohua, una practicante de Tianjin, fue arrestada el 9 de diciembre de 2014 por distribuir volantes de Falun Gong en Beijing y condenada a tres años de prisión el 19 de junio de 2015 sin que su familia fuera notificada. Durante su detención en la prisión para mujeres de Tianjin, fue humillada y golpeada salvajemente por rehusarse a vestir el uniforme de presidiaria.

El guardia de prisión Xu Liying utilizó un par de tijeras para cortar su ropa por detrás y luego se la arrancó; solo quedó vestida con sus bragas y una toalla para cubrirse el pecho. Para humillarla los guardias no le permitían el uso privado de las duchas ni del baño a menos que fuera con otras internas, así que todos podían verla desnuda. Durante su período menstrual, prohibían a otras internas darle algo de ayuda, incluyendo cualquier producto de higiene femenina.

Los guardias obligaban a sus compañeras de celda a hacer trabajo forzado durante 12 horas o más tiempo todos los días. Como estas no podían tolerar el abuso, volcaban su resentimiento en la Sra. Guo. Cui Hongyu, una de las reclusas, la golpeaba y la insultaba seguido.

Un domingo por la mañana, bajo la instigación de la reclusa Guo Linying, todas sus compañeras de celda comenzaron a golpearla. La reclusa Han Qiyue la abofeteó en la cara mientras tironeaba de su cabello. La reclusa Ning Xiaohua, pisoteó su cara y la pateó en la cabeza. Otra reclusa, Lu Shan, se mantuvo pateándola mientras otras trataban de ponerle el uniforme de prisión por la fuerza.

Como la Sra. Guo se rehusaba a renunciar a su práctica de Falun Gong, fue forzada por otras reclusas a permanecer de pie durante largos períodos de tiempo, privada del sueño y alimentada únicamente con un pan al vapor y un pickle. En un corto período se volvió muy delgada y sufrió de malnutrición. Las reclusas que la maltrataron lo hicieron con el apoyo de los guardias, de tal forma que acortaban sus condenas o eran recompensadas de otras formas.

La Sra. Guo fue inicialmente detenida en un centro de lavado de cerebro en 2001. Más tarde fue sentenciada a un año y medio de trabajo forzado, lo que después se extendió por un año más.

Durante su detención en el campo de trabajo forzado para mujeres de Banqiao, los guardias la pusieron en una habitación sin ventanas durante más de un mes colgándola de las muñecas. El 1 de abril de 2003, la electrocutaron con picanas eléctricas en todo el cuerpo. Luego la encerraron en una caja de madera durante varios días consecutivos.