(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa con mis padres cuando era muy joven. Pero nunca fui diligente. Mi padres tenían que presionarme para que estudie el Fa y haga los ejercicios. No me veía como un cultivador genuino hasta que me fui al extranjero hace pocos años.

Soy extrovertido. Disfruto interactuar con la gente y siempre intento mantener una actitud positiva. Usualmente no tengo muchos conflictos con los demás. Tampoco hago cosas de manera extrema. Pero mi personalidad tiene una desventaja: No puedo soportar penurias; no tengo una fuerte voluntad y algunas veces no trato a las cosas seriamente. Aquí me gustaría hablar de una lección aprendida debido a mi actitud casual hacia la cultivación.

Como el ambiente en el que me crié estaba contaminado, aunque era un practicante tenía algunos pensamientos sucios. Las dos mayores fuentes de contaminación para mi eran los juegos de computadora y la pornografía. Esas cosas tuvieron una influencia tan profunda sobre mí que tenía que mantenerme lejos de ellas después de mudarme al extranjero.

Caí muchas veces e hice las cosas que un cultivador no debe hacer. Ya que no estudiaba bien el Fa y mi creencia en el Maestro no era lo suficientemente sólida, seguí cometiendo errores. Cada vez que cometía un error, buscaba excusas tales como: “Xin es también un practicante, pero tiene una novia. Bing nunca hace las tres cosas bien; Liu Mie no se cultiva tan bien como yo. Ninguno se ha topado con ninguna dificultad en la cultivación”.

Cuando surgían los pensamientos inapropiados de nuevo, sólo intentaba reprimirlos. Cuando no podía refrenarlos, me conformaba diciendo: “Ya he hecho mi mejor esfuerzo”. Pero entonces era indulgente conmigo. Por supuesto, siempre me sentía culpable. Enviaba pensamientos rectos, estudiaba el Fa y conversaba con compañeros practicantes. Pero, profundamente en mi corazón, no trataba seriamente a la cultivación.

Las viejas fuerzas tomaron ventaja de la brecha en mi cultivación. Crearon una ilusión, que me hizo creer que un pequeño error no era una gran cosa. Estaba engañado y no me daba cuenta de que me estaba destruyendo. Ya que no tuve ninguna tribulación después de cometer errores, comencé a bajar el ritmo en la cultivación.

Primero reducí el tiempo que pasaba estudiando el Fa, entonces, no podía concentrarme cuando leía. Luego, no podía sentarme por 15 minutos para enviar pensamientos rectos. Comencé a desarrollar muchos de los apegos de una persona común. Mis pensamientos se volvieron caóticos y estaba lleno de las tonterías de una persona común. Comencé a tener dificultades al respirar por la noche y algunas noches incluso no podía mover mi cuerpo.

Como pensé que otros jóvenes practicantes, que parecían no hacer bien las cosas en la cultivación, no tenían tribulaciones, no me di cuenta que mis problemas eran causados por mis apegos a los juegos de computadora y la pornografía.

No desperté hasta el día en que las viejas fuerzas intentaron destruirme completamente. Después de almorzar ese día, tenía muchas ganas de jugar videojuegos. Luché por un rato y luego cedí. Me conformé pensando: “He intentado hacer el mejor esfuerzo para reprimirlo”, entonces me puse a jugar.

Nada pasó realmente mientras jugaba, pero después me sentía culpable. Enviaba pensamientos rectos y decidía estudiar el Fa. Sin embargo, no podía calmarme. Todas las cosas malas que había acumulado en mi mente comenzaban a atacarme. Los pensamientos negativos me quemaban.

Uno de los pensamientos negativos me decía: “No puedes pasar esta tribulación. Tu cultivación terminó. Ve y sé una persona común, tendrás una vida confortable. No tendrás que sufrir en la cultivación”.

Me sentía agobiado con desesperación y cerca de claudicar. Intenté tan duramente abandonar esos malos pensamientos que grité.

Después de un rato, el yeli de pensamiento se fue. Mi mente se volvió clara. Abrí el sitio Minghui.org y vi un artículo. El autor decía que el Maestro aguantó dos cortes de cuchilo en su espalda a causa de un error del autor. Me di cuenta que el Maestro había aguantado la tribulación por mí, un discípulo que trata casualmente a la cultivación.

Después de leer esto, decidí escribir mis experiencias. Hasta ahora, mi cultivación ha sido muy suave y no he encontrado muchas grandes tribulaciones. He leído historias en las que compañeros practicantes fueron terriblemente perseguidos e incluso murieron por no tratar seriamente a la cultivación. Sin embargo, nunca utilicé para mí lo que leía y no pensé que experimentaría tribulaciones a causa de mis problemas.

Esa vez, comprendí profundamente el peligro que una actitud casual hacia la cultivación podría traerme. Si no fuera por la benevolencia del Maestro, que no quería verme destruido por las viejas fuerzas y soportó la tribulación por mí, no hubiera pasado esta prueba a causa de mi fuerte yeli de pensamiento.

Cada uno tiene su propio camino de cultivación. Es peligroso tomar otros caminos como modelo. Las viejas fuerzas tomarán ventaja de esta brecha. Espero que aquellos que tienen problemas similares aprendan de mi lección y se cultiven sólidamente.

Por favor corrijanme si he dicho algo equivocado.