(Minghui.org) Empecé a practicar Falun Dafa en mayo de 1998 y he estado haciendo lo posible para que la gente se entere de Dafa desde julio de 1999, cuando Jiang Zemin, exjefe del partido comunista chino (PCCh), inició la persecución en contra de Falun Dafa.

Decidiendo demandar a Jiang

En mayo de 2015, leí un artículo sobre demandar a Jiang Zemin y mi primer pensamiento fue que solo los practicantes de Dafa que habían sido perseguidos deberían presentar denuncias penales. Sin embargo, cuando aumentó el número de los que presentaron denuncias, me di cuenta de que aunque no había sido perseguida, todavía estaba privada de mi libertad de creencia y de expresión.

De hecho, se trataba de una oportunidad que nos daba Shifu, de otra manera de hacer saber a la gente acerca de Dafa, y de otra oportunidad de caminar bien el sendero hacia la divinidad.

Cinco practicantes de nuestro grupo de estudio del Fa decidimos presentar denuncias penales contra Jiang. En la toma de nuestra decisión, atravesamos un proceso, desde ser temerosos y vacilantes inicialmente, hasta caminar firmemente hacia adelante.

Atesoramos la oportunidad de eliminar nuestros apegos, tales como el miedo, y de mejorar en nuestra cultivación.

Correspondencia detenida

Después de ayudar a los compañeros practicantes a imprimir sus denuncias, envié la mía al tribunal popular supremo y a la procuraduría popular suprema de Beijing, por correo registrado.

Después de esperar varios días, no recibí la notificación de entrega y descubrí que la denuncia estaba todavía en el centro de procesamiento de correo de Beijing.

Después de llenar la carta de denuncia de mi madre, la envié, junto con otra copia de mi queja, a la procuraduría popular suprema de Beijing.

Cuando rastreé las denuncias tres días más tarde, encontré que mi denuncia había sido detenida en el centro de procesamiento de correos de Beijing, mientras que la carta de mi madre había sido detenida en nuestra oficina local de correos. Al parecer, un importante porcentaje de cartas de denuncia penal de los practicantes estaban detenidas por los servicios postales.

Busqué otras maneras de enviar nuestras denuncias y descubrí que las podríamos presentar a través del sitio web de la procuraduría popular suprema. Lo hice y pronto después recibí los recibos de entrega.

No había sido accidental que nuestras denuncias habían sido detenidas en varios lugares, y me di cuenta de que habría que aclarar los hechos a las personas que trabajan allí.

Rastreando la correspondencia

Me reuní con el director del centro local de procesamiento de correos y le pregunté por qué nuestra correspondencia había sido detenida allí.

El director me llevó a la oficina de clasificación de correos. Después de verificar, un miembro del personal le susurró algo al director y este me preguntó acerca del correo.

"Era una denuncia de mi madre para demandar a Jiang Zemin", le respondí. "Mi madre tiene más de 80 años. Le ayudé a preparar la denuncia y la envié por correo".

El director estaba muy sorprendido que me atreví a demandar a Jiang.

Le dije: "La Constitución establece que los ciudadanos tienen el derecho de presentar cargos contra los funcionarios públicos que violan la ley". Después, le hablé acerca de las mejoras físicas y mentales que mi madre había disfrutado desde que comenzó a practicar Falun Dafa.

El director estuvo de acuerdo que no hay derechos humanos en China, y me dijo que las autoridades superiores no les permitían procesar este tipo de correos y que lo estaban confiscando.

Cuando le pregunté a qué autoridad se refería, dijo: "No vale la pena hablar con ellos. Son parte de la seguridad nacional. Solo dile a tu madre que el correo ha sido entregado, para mantenerla feliz".

Mientras me iba, el director me dijo: "Por favor, no visite las autoridades. Cuídese".

Mientras salía del edificio, lamenté que no le había esclarecido los hechos más a fondo y que no le había pedido renunciar al partido y a sus organizaciones afiliadas. Era una brecha en mi cultivación que debería compensar en el futuro.

Los practicantes debemos ser diligentes

En agosto, mi esposo me pidió ayudar a nuestro hijo a estudiar para su examen de ingreso de posgrado. Mi hijo comenzó a practicar Falun Dafa en 2008, pero abandonó cuando ingresó a la universidad. No era diligente en su cultivación y solo leía los libros de Shifu y practicaba los ejercicios cuando sus compañeros estaban de vacaciones, así que me tomé un tiempo libre de mi trabajo para quedarme con él, y nos mudamos a un apartamento alquilado. Esa noche, tuve un sueño que me hizo consciente de que  había descuidado su cultivación y no caminaba el sendero de un cultivador.

Le conté el sueño y le dejé claro que no había llegado para ayudarlo a estudiar para el examen de ingreso. Le dije que, como practicantes, nosotros no estamos apegados a obtener resultados sino que, en cambio, debería enfocarse en estudiar el Fa, enviar pensamientos rectos y salvar a la gente.

Mi hijo estuvo de acuerdo que no lo había hecho bien en su cultivación y dijo que Shifu a menudo le recordaba ser más diligente. Abrí el libro Zhuan Falun, y estudiamos una lección juntos. Después, enviamos pensamientos rectos antes de ir a dormir.

Nuestra vida se volvió muy ordenada. Tan pronto como nos levantábamos, enviábamos pensamientos rectos y leíamos artículos de intercambio de experiencias en el sitio web Minghui. Cuando estaba en la escuela, yo estudiaba las conferencias del Fa de Shifu, enviaba pensamientos rectos y aclaraba los hechos acerca de Dafa por teléfono. Leíamos Zhuan Falun, hacíamos los ejercicios y enviábamos pensamientos rectos en la noche.

Cuando el sitio web Minghui publicó el editorial "Aviso sobre demandas a Jiang", le sugerí que presentara una carta de denuncia penal reportando los crímenes de Jiang, y él estuvo de acuerdo.

Sin embargo, estaba ocupado con sus estudios. Empecé a escribir la querella para él, y la acabé esa noche. Luego la enviamos a través del sitio web de la procuraduría suprema.

Mi hijo es ahora un estudiante de postgrado. Aunque no vive en la casa, se ha convertido en un practicante diligente y hace las tres cosas bien.

Después de ayudarlo, me di cuenta de que, sin un ambiente de grupo de estudio del Fa, los practicantes pueden volverse perezosos fácilmente. Hay muchas tentaciones en la sociedad humana, que pueden distraer a los practicantes de su cultivación. Debemos despertarlos y ayudarlos a ser diligentes otra vez.