Llegando a un puerto seguro

(Minghui.org) Crecí en una familia pobre. Después de terminar la secundaria, viví con mi hermana mayor casada y su familia. Finalmente se cansaron de cuidarme y arreglaron mi matrimonio cuando tenía 20 años.

Mi marido era alcohólico y no le gustaba trabajar. A veces me pegaba después de beber. A menudo peleábamos. Después de que nació nuestra hija, tuve que buscar un trabajo para mantenernos a flote. Trabajé muy duro pero no me cuidaba ni comía bien. Después de un tiempo, mi salud se deterioró. Tenía hipotensión, vértigo y fuertes dolores estomacales.

Empezando a practicar Falun Dafa

Mi vida cambió en julio de 2004. Le dije a una amiga en el trabajo que me dolían los senos y tenía miedo de que pudiera ser cáncer. Me preocupaba qué pasaría con mi hija si algo me ocurría. Ella me sugirió que sinceramente recitara las siguientes palabras: "Falun Dafa es bueno, Verdadera-Benevolencia-Tolerancia es bueno", diciéndome que me ayudaría con mis dolencias.

Me quedé atónita y la miré con incredulidad. En ese momento, estaba engañada por la propaganda del régimen chino y creía que no se podía confiar en los practicantes de Falun Dafa. Entonces lo pensé bien y decidí creerle a mi amiga. Era una persona muy buena y amable, nunca se mostró quisquillosa con sus tareas laborales, y nunca se peleó con nadie.

Me dijo que Falun Dafa no era nada parecido a lo que se decía en las estaciones de televisión estatales, que eran portavoces del partido comunista chino (PCCh) y continuamente transmitían noticias falsas sobre Falun Dafa. Ella me trajo un DVD al día siguiente con información sobre Falun Dafa y la persecución. Después de ver los videos en el disco, me sorprendió la forma en que el PCCh escenificó el incidente de autoinmolación como una táctica para poder perseguir a Falun Dafa.

Mi amiga me explicó en gran detalle sobre la persecución. Esa noche me acosté y no podía dejar de pensar en las tres palabras: ”Verdad, Benevolencia, Tolerancia", y lo maravillosas que son.

Empecé a recitar "Falun Dafa es bueno, Verdadera-Benevolencia-Tolerancia es bueno”, y en cuatro días, mis senos dejaron de dolerme. Estaba entusiasmada. A partir de entonces me convertí en practicante y empecé a leer los libros de Falun Dafa.

Dejé de discutir con mi marido. Mi personalidad antisocial y oscura desapareció. Me volví extrovertida y alegre. Una amiga que no me había visto en mucho tiempo dijo que mis mejillas se habían vuelto rosadas y mi piel lisa. Viendo todos los cambios positivos que sufrí, mi hija me animó a practicar a pesar de la persecución en curso.

Perseverando en medio de las dificultades

Mi esposo finalmente se divorció por una aventura amorosa, dejándome casi sin nada. Mi hija vivía conmigo; tuve que pagar el alquiler y su educación sin la ayuda de mi exmarido.

Todos mis familiares sabían que yo era pobre y estaba en dificultades y no querían relacionarse conmigo. Sentí que apenas podía respirar con toda la presión sobre mis hombros. Pero seguí leyendo los libros de Dafa, y poco a poco pude ver las cosas bajo una luz positiva de nuevo. No sé qué habría hecho sin Falun Dafa.

Tenía resentimiento hacia mi exmarido cuando nos divorciamos, pero las enseñanzas de Falun Dafa me han guiado a lo largo del camino. Pude dejar de odiarlo y de hecho puedo saludarlo cuando me encuentro con él.

Mi rencor contra mi exmarido se había ido, pero mi hija seguía teniendo rencor contra su padre. Este año, ella compró regalos para todos en los días festivos, excepto para él. Le dije que no debería hacer esto, porque él es su padre y que debería recordar lo bueno que solía ser. Pude persuadirla y le compró un regalo.

Esa noche me dijo: "Mamá, tenías razón. Papá estaba tan feliz".

Un puerto seguro

Para ahorrar dinero, comía muy mal. Apenas comía carne o verduras frescas y comía mayormente avena con encurtidos o maíz. Otros podrían pensar que definitivamente estaría desnutrida y con mala salud después de una dieta tan pobre. Pero ese no ha sido el caso en absoluto. No he estado enferma en los últimos doce años y tengo toda la energía que necesito para trabajar.

Alguien se burló de mí y de la práctica: ”¿Por qué practicar Falun Gong? ¿Puedes usarlo para hacer dinero?”.

Al ver a tantos a mi alrededor gastando tanto dinero para curar sus enfermedades, solo puedo imaginarme cuánto he ahorrado o ganado a través de la práctica.

En el trabajo nunca me he quejado y nunca hablé mal de los demás. Más tarde, mi jefe cerró el negocio y me refirió a un trabajo similar. Mi nuevo jefe tenía la regla de que el primer mes de salario se retrasaría hasta el segundo mes, para que la gente no se fuera después de un mes. Pero no aplicó esta regla en mi caso, porque mi antiguo jefe habló muy bien de mí.

Tuve que trabajar con una recién llegada por el mismo salario. Ella hacía muy poco y tuve que hacer la mayoría de los trabajos duros. Le aseguré a mi nuevo jefe que no se preocupara por eso y mantuve mi promesa, nunca me quejé.

Siempre estaba en el trabajo temprano para terminar los proyectos más difíciles o las tareas más urgentes. Pasado un tiempo, la nueva persona se sintió mal y me agradeció todo lo que hice por ella. Nunca podría haber sido tan buena o tolerante si no hubiera practicado Falun Dafa. Después de un tiempo, mi nuevo jefe confió en mí y me entregó la llave del almacén, con mercancías por valor de millones de dólares.

Falun Dafa ha convertido a una persona cansada y triste como yo en una persona feliz, positiva y saludable. La mejor elección que tomé en esta vida fue convertirme en una practicante de Falun Dafa. Finalmente, un barco sin rumbo navegando sobre el mar de la amargura llegó al muelle en el puerto de las bendiciones.