(Minghui.org) En septiembre, tres terremotos sacudieron el centro y el sur de México, el primero el 7, otro el 19 y el último el 23 del mismo mes. Más de 250 000 mexicanos perdieron sus casas y cientos de personas murieron.

Se establecieron refugios para los damnificados en la Ciudad de México, Morelos y Puebla, las ciudades más afectadas por los terremotos. Varios grupos de practicantes de Falun Dafa se ofrecieron como voluntarios para enseñar a la gente en los refugios cómo hacer los ejercicios de Falun Dafa para ayudar a aliviar su estrés y ansiedad.

Al escuchar que Falun Dafa es una disciplina basada en los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia, que alivia el estrés y calma la mente, los directores de albergues accedieron de inmediato a que se enseñara la práctica y sugirieron que fuera en las noches, porque la mayoría de las personas hospedadas no podían conciliar el sueño, así les ayudaría a relajarse para dormir.

Albergue Villa Olímpica

Muchos afectados, incluyendo jóvenes, vivían en el Albergue Villa Olímpica al sur de la Ciudad de México. Muchos de los jóvenes que habían trabajado como rescatistas no podían dormir y parecían muy nerviosos, cansados y abatidos. Al hablarles sobre los beneficios de Falun Gong, se animaron.

Alrededor de treinta personas aprendieron los movimientos del primer ejercicio de Falun Gong y al final todos se veían sumamente relajados y tranquilos. Más de la mitad del grupo se fue directo a dormir. Un hombre apretó las manos frente al pecho y se inclinó ante los practicantes de Falun Dafa para expresar su gratitud. Otro hombre dijo que se sentía increíblemente relajado y que le gustó tanto experimentar la práctica que llevaría a su esposa a un sitio de práctica grupal.

Albergue Deportivo El Rosario

Falun Dafa fue recibido calurosamente en el Refugio Deportivo El Rosario. Una mujer llamada Socorro dijo: “Siempre soy muy friolenta pero, en cuanto hice los ejercicios, sentí como si hubieran prendido la calefacción”.

民众在学炼法轮功功法

Aprendiendo los ejercicios de Falun Gong en el albergue.

Otra señora, Dora, dijo: “Me sentí tan relajada como si me hubiera liberado de algo. Al principio me dio mucho sueño, pero hacia el final, sentí una fuerte emoción”.

Un hombre llamado David agregó: “Sentí como si ya hubiera hecho antes estos ejercicios. Me sentí muy concentrado...”.

Un director e inspector de escuelas jubilado de 70 años dijo: “Esto es algo muy diferente. No sé cuánto me queda de vida, pero esto que conocí hoy (Falun Dafa) ya lo llevo en mi corazón”.

Albergue Calzada de las Bombas

Un hombre llamado Javier llevaba un collarín porque le había caído un muro durante el terremoto. Después de terminar el tercer ejercicio comentó: “¡Me siento tan relajado con una sensación tan confortable! Esto es realmente bueno”, quería saber más sobre Falun Gong. Cuando alguien le habló de la persecución que Falun Gong enfrenta en China, Javier dijo: “[El partido] quiere destruir algo tan valioso, quiere destruir la propia cultura [china] de miles de años que es sumamente valiosa. Yo sé de eso... Es una pena que hagan esto a esta práctica tan maravillosa. Muchas gracias por venir a apoyarnos en estos momentos difíciles que todos vivimos. Muchas gracias”.

Otra persona, Eduardo Meneses comentó: “Es impresionante. Estoy muy, muy relajado. Me siento como entre algodones. ¡Esto es tan hermoso! Muchas gracias”.

San Gregorio Atlapulco

Uno de los pueblos más afectados por los terremotos fue San Gregorio Atlapulco, que tiene 19 000 habitantes. Más de 600 casas resultaron dañadas o destruidas. La gente tenía demasiado miedo de dormir. Después de aprender Falun Dafa, muchos comentaron que se sentían más relajados y tranquilos.

Gente en la práctica de los practicantes de Falun Gong

Los habitantes de San Gregorio Atlapulco aprenden los ejercicios de Falun Dafa.

Unos días antes del primer terremoto, una practicante soñó que Shifu le mostraba que fuera a un poblado de la periferia del sur de la Ciudad de México. Se sorprendió por el sueño, ya que allí se había hecho la Exposición Internacional El arte de Zhen, Shan, Ren

Ella fue allí con sus compañeros después del terremoto. Un soldado que estaba involucrado en los esfuerzos de rescate le preguntó a la practicante: “¿Qué es lo que brilla y sostiene en sus manos?”. El soldado tomó un folleto y contestó: “Por favor, dígame de qué se trata esto. Sé que es algo muy bueno. Por favor, explíqueme”.

La practicante le contó al soldado sobre Falun Gong. El soldado se conmovió mucho y le dijo: “A mí me gusta mucho. Yo ando buscando algo espiritual, pero no pude encontrarlo. He estado buscando un maestro y no he tenido suerte. Eso es lo que me falta y sé que Falun Dafa lo tiene. ¡Gracias. Gracias! Se le quebró un poco la voz y sus ojos brillaban. Le aseguro que voy leer el libro y en mis ratos libres voy a hacer los ejercicios”.

La gente del pueblo difundió la noticia de que Falun Dafa era un gran ejercicio de relajación. Un sacerdote le dijo a la gente que habría una enseñanza de Falun Dafa en la iglesia el domingo y sugirió que trajeran a sus hijos para aprenderla después de la catequesis. Alrededor de cuarenta personas aprendieron Falun Gong en la iglesia, incluyendo niños. Sus movimientos eran sorprendentemente precisos, como si lo hubieran estado haciendo durante mucho tiempo.

Un señor se acercó a los practicantes y les dijo: “Por favor, enséñame los ejercicios. Los necesito. Me siento muy triste porque uno de mis familiares murió en el terremoto. Lo enterraremos hoy”. El hombre se sintió muy bien después de hacer un ejercicio de Falun Gong, como si algo pesado hubiera salido de su cuerpo. Estaba muy agradecido y trajo a su esposa para aprender, también, porque tenía un fuerte dolor en el brazo. Dijo que el dolor desapareció después de aprender Falun Gong.

La Sra. Jaqueline Dimas dijo: “Solía estar muy tensa y confundida antes de aprender los ejercicios. Ahora me siento mucho mejor y relajada. Espero que más gente aprenda Falun Gong. No tiene precio. ¡Nunca podríamos corresponder!”.

Una señora llamada Petra Galeana de 55 años dijo: “Estoy estresada en estos momentos por toda la situación que hemos pasado. Gracias a Dios que alguien ha venido a ayudarnos. ¡Estos ejercicios son tan útiles! Tenía tanto dolor en el hombro durante tantos días que estaba desesperada. Todos los días me despertaba con dolor. Ahora este ejercicio me ha ayudado mucho”.

Pueblo de Santa Cruz

La aldea de Santa Cruz fue el primer pueblo visitado por los practicantes de Falun Dafa. Se dieron cuenta de que su misión era ayudar a los habitantes.

Decir la verdad

Las personas están aprendiendo ejercicios de Falun Gong.

Hablando sobre Falun Dafa y practicando los ejercicios. 

Un día después de esta visita, una practicante tuvo una visión de dioses vestidos con túnicas púrpura y doradas en el cielo, enviando rayos de luz dorada, púrpura y azul sobre el pueblo. La practicante se dio cuenta de que el Maestro le había mostrado esta escena como un recordatorio de su voto prehistórico de salvar a los aldeanos de Santa Cruz.

Albergue Altavista en la ciudad de Cuernavaca, Morelos

La coordinadora del albergue, la Lic. Rocío Carrillo del Albergue de Altavista en Cuernavaca presentó a un practicante a la comunidad. Además de enseñar los ejercicios, el practicante enseñó a los niños cómo cantar la canción “Falun Dafa Hao” (Falun Dafa es bueno) cuando entraron en pánico durante una tormenta. Disolvió su miedo.

Los niños en Altavista aprenden los ejercicios de Falun Dafa.

Los niños estan estudiando

Los niños estan estudiando

Los niños en Altavista hacen los ejercicios de Falun Dafa.

Albergue en Jiutepec, Morelos

22 familias afectadas por los terremotos fueron alojadas en un refugio en Jiutepec.

Los practicantes leyeron Relatos de Sabiduría a los niños y ellos pintaron mientras escucharon la música “Pudu”.