(Minghui.org) El Sr. Baofan Liang, de 52 años, fue arrestado el 17 de junio de 2015, por haber presentado una querella criminal contra Jiang Zemin, el exlíder del régimen comunista chino. Siempre le habían denegado a sus familiares la visita, hasta que el 13 de septiembre, después de muchos intentos fallidos, permitieron finalmente que su esposa se reuniera con él por cinco minutos.

El Sr. Liang fue condenado a cuatro años de cárcel durante la celebración de un juicio secreto, el 4 de marzo de 2016, en ausencia de su abogado y de sus familiares. Su familia, por fin consiguió saber que se encontraba encarcelado en la cárcel Gongzhuling de la provincia de Jilin a comienzos de 2017.

El Sr. Baofan Liang. 

Deniegan el acceso en repetidas ocasiones a sus familiares

Cuando la esposa del Sr. Liang intentó visitarlo el 18 de junio, le dijeron que no podía verlo porque se negaba a renunciar a su creencia en Falun Gong.

En abril, volvió a intentar visitarlo con su hija y su madre. La madre del Sr. Liang, de 75 años, suplicó a los guardias que le dejaran ver a su hijo. Un funcionario de la prisión le dijo: “Liang se niega a escribir una declaración de garantía, explicando que se arrepiente y que abandona la práctica. Le dijimos que tenía que elegir entre escribir la declaración o ver a su familia. Puede reunirse con ustedes en cuanto la escriba, pero no lo hace. Eso significa que no quiere verlos. Ha tomado una decisión”.

Cuando la esposa y la madre de Liang fueron a visitarlo de nuevo en julio, les dijeron que todavía no había sido “transformado”. Entonces fueron a hablar con el director de la cárcel para que les permitiera visitarlo, pero él replicó: “No pueden verlo. Si fuera un asesino, un ladrón o un drogadicto en lugar de un practicante de Falun Gong, les permitiría verlo hoy mismo”.

En respuesta a las repetidas demandas de la familia, tres oficiales de la prisión accedieron a reunirse con los familiares. Les mostraron un vídeo, en una pantalla de dos centímetros cuadrados, en el que el Sr. Liang Baofan declaraba que era él mismo y que se encontraba bien. Pero las imágenes del vídeo eran borrosas, y solo se podía distinguir la silueta de una persona. “No es que no les permitamos verlo, sino que es él mismo el que no quiere verlos a ustedes”, declararon.

Una visita de cinco minutos después de dos años

La esposa del Sr. Liang se dirigió a la oficina administrativa de la cárcel provincial y a la oficina de trámites y alegaciones para apelar por el derecho de ver a su marido. Acabó reuniéndose con Wu Jiang, director del departamento legal de la administración de la prisión provincial. Wu le comentó que la prisión debía haber emitido un documento oficial en el que justificara las razones por las cuales no se les permitía visitarlo.

El 13 de septiembre, regresó a la cárcel acompañada de sus familiares. Al principio, no le permitieron verlo. El funcionario de la prisión mencionó: “A los que cometen asesinatos o incendios se les permite ver a sus familiares, pero a los practicantes de Falun Gong, no”.

En aquel momento, la mujer solicitó el documento oficial donde constan los motivos por los cuales no podía visitar a su marido. Cuando el oficial se negó a escucharla, pidió ver al director de la prisión.

El oficial se vio atrapado, y la llevó a ver al director. Este le explicó que la visita tendría lugar pero que no se le permitía hablar. La amenazó: “La arrestaremos si habla”.

La condujeron hasta la sala de visitas y la dejaron acceder. Vio a su marido, allí de pie, con dos guardias pegados a su espalda. Cuando le pidió a su marido que aceptara algún dinero, él se negó: “No vale la pena”.

No habían pasado ni cinco minutos, cuando la visita se dio por concluida. Su esposa, sin embargo, es optimista y espera poder visitarlo todos los meses.

Artículo relacionado: 

Police Arrest Mr. Liang for Filing a Lawsuit Against Jiang Zemin