(Minghui.org) En toda mi cultivación han habido muchas pruebas por parte de mi familia, colegas y otros practicantes. Muchas de estas tribulaciones fueron causadas por mis obstinados apegos humanos, y no fui capaz de superar estas pruebas hasta hace muy poco.

A veces siento que la cultivación es muy dolorosa. Sin embargo, creo firmemente que, mientras tome al Fa como Maestro y me cultive diligentemente, puedo seguir en mi camino de cultivación, sin importar cuán estrecho sea.

Luego de ser liberado de un centro de detención 12 años atrás, volví a trabajar en la escuela donde solía enseñar. Me permitieron volver, pero no tenía permitido enseñar. Excepto por esto, la vida ha sido bastante tranquila. He tenido muchas oportunidades para clarificar los hechos a mis colegas durante estos últimos 12 años.

Desde que regresé de mi anterior escuela, he presentado cinco solicitudes para ser reinsertado como maestro, pero todas las veces me pasaron por alto. Cada vez que un nuevo maestro era nombrado para la posición que yo había solicitado, me aseguraba de contarle la verdad acerca de Falun Dafa.

A uno de mis colegas le pareció que estaba gastando mi tiempo y dijo que el partido comunista chino (PCCh) no me daría chance de volver a enseñar. Independientemente, yo sabía que no estaba apegado al resultado y vi las aplicaciones como oportunidades para aclarar la verdad a la gente.

A través de mis persistentes esfuerzos, mi ambiente escolar se ha vuelto mucho más relajado, y cerca del setenta por ciento del personal aceptó renunciar al PCCh.

Pruebas de xinxing

Aunque pienso que las cosas han estado bastante bien desde que volví a trabajar, han habido algunos golpes. Un día expliqué la persecución a un estudiante en la escuela y le di una copia de Zhuan Falun. Sus padres me reportaron a las autoridades.

Alrededor de siete personas de oficina 610 local, comisaría y del departamento de educación, vinieron a la escuela con la intención de arrestarme. Me rehusé a contestar sus preguntas y les clarifiqué la verdad cada oportunidad que tenía de hablar. Me las arreglé para frustrar su plan en aproximadamente una hora.

La oficina 610 forzó al departamento de educación en nuestro distrito, a colocar un TV en cada escuela para difamar a Shifu y a Dafa. Escuché que se mostraría en mi escuela primero, y luego sería llevado a otras escuelas.

Fui a hablar al secretario del partido en nuestra escuela y le dije que quitara el TV. Él me dijo que las autoridades más altas habían ordenado poner el TV. Él estaba de acuerdo con quitarlo pero no lo hizo.

Reporté este evento en el sitio web Minghui. No revelé los números de teléfono de mi escuela debido a mis apegos al miedo y a protegerme. Como resultado, los TV quedaron puestos.

Luego de pensarlo durante unos días, dejé ir mis apegos y reporté este problema en Minghui nuevamente. Esta vez incluí el nombre de la escuela.

También adjunté el número de la oficina 610, el administrativo de mi escuela, y el departamento de educación del distrito. Nuestra escuela quitó todas los TV el día siguiente en el que Minghui publicó mi artículo.

Siempre que me interferían, intentaba encontrar las brechas en mi cultivación. Al hacerlo, pude aprender mis lecciones, y esto me ayudó a ser más diligente y maduro.

Presentando una querella criminal

En junio de 2015, presenté una querella criminal en contra de Jian Zemin, el ex mandatario chino, por iniciar la persecución a Falun Dafa. Recibí la confirmación de su recepción poco tiempo después.

D0s meses después agentes de la oficina 610, vinieron a mi escuela y me llevaron a la comisaría local. Me preguntaron por la demanda a Jiang. Les dije que no había violado ninguna política pública y que tenía derecho a demandar a Jiang.

Un oficial intentó ingresar algunas anotaciones a su laptop, pero no importaba cuánto lo intentaba, no podía encenderla.

“Lo que quieras preguntarme, tengo sólo dos respuestas. Primero, he presentado mi carta de acusación para demandar a Jiang. En segundo lugar, lo que escribí es cierto”.

Intenté clarificarles los hechos a los dos oficiales que fueron asignados para custodiarme, pero ellos no querían escuchar. Les dije que traten a los practicantes de Falun Dafa amablemente y envié pensamientos rectos cuando no hablaba. Fui liberado al final del día.

Luego de irme a casa, mis padres me dijeron que la seguridad nacional había registrado mi cuarto y confiscaron mi computadora. Fui de vuelta a la escuela al día siguiente. Le dije al director y al secretario del partido por qué había demandado a Jiang, lo que había sucedido en la comisaría y que mi casa había sido registrada. También les dije que los policías eran los únicos que estaban rompiendo la ley y que lo que estaba haciendo yo era legal.

Además fui a la comisaría y les exigí que me devuelvan mi computadora. Me dijeron que mi laptop había sido recientemente transferida al departamento de seguridad nacional porque no podían descifrar mi contraseña para ingresar. La oficina nacional del departamento de seguridad tenía una maquina avanzada que les permitía ingresar a cualquier computadora.

Tuve la idea de que el mal no podía entrar en mi computadora. Más tarde supe que no podían decodificar la contraseña, era demasiado complicada.

A través de la cultivación diligente, encuentro que estudiar el Fa todos los días con una mente tranquila, hacer mis ejercicios matutinos, enviar pensamientos rectos, y mirar hacia adentro en todo momento se ha vuelto cada vez más importante para mí.

Creo firmemente que, mientras escuchemos al Maestro y hagamos lo que el Maestro nos ha dicho que hagamos, podremos seguir nuestros caminos constantemente.