(Minghui.org) Un residente de la ciudad de Bazhong fue sentenciado a tres años en prisión bajo acusaciones de "usar un culto para socavar el cumplimiento de la ley", un pretexto común utilizado por el régimen comunista chino en sus intentos de incriminar y enviar a prisión a practicantes de Falun Gong.

El Sr. Wu Yinghao estaba descansando en su casa el 27 de agosto de 2015, cuando la policía entró por la fuerza y lo arrestó. Fue juzgado el 6 de diciembre de 2016. Su abogado, el Sr. Tang Tianhao, lo ha declarado inocente.

El Sr. Tang dijo que no hay ley en China que criminalice a Falun Gong y que su cliente nunca debería haber sido demandado por practicar y promover su creencia.

El fiscal citó la demanda en contra del ex dictador chino Jiang Zemin como evidencia en su contra. El Sr. Wu testificó sobre cómo Falun Gong le había regresado su salud y le había enseñado a ser una persona decente. Dijo que Jiang había violado la ley cuando ordenó la persecución a Falun Gong sin bases legales.

La evidencia de la fiscalía también incluía materiales de Falun Gong confiscados en su casa. El Sr. Tang dijo que esa era la propiedad legal del Sr. Wu y que no hacían daño a nadie y mucho menos socavaban el cumplimiento de la ley.

El juez lo declaró culpable el 12 de enero de 2017. Ahora se encuentra apelando al veredicto en la corte intermedia de la ciudad de Bazhong, y mientras tanto permanece detenido en el centro de detenciones de la ciudad de Bazhong.

Trasfondo

En 1999, Jiang Zemin, como jefe del partido comunista chino, ignoró a los miembros del comité permanente del politburó y comenzó una violenta persecución hacia Falun Gong.

La persecución ha provocado la muerte de muchos practicantes de Falun Gong desde hace más de 17 años. Muchos más han sido torturados por sus creencias e incluso asesinados por sus órganos. Jiang Zemin es directamente responsable por el comienzo y la continuidad de la brutal persecución.

Bajo su dirección personal, el partido comunista chino estableció un órgano de seguridad ilegal, la “oficina 610”, el 10 de junio de 1999. La organización está por encima de las fuerzas policiales y el sistema judicial, e implementa las instrucciones de Jiang respecto a Falun Gong: arruinar su reputación, cortar sus ingresos financieros y destruirles físicamente.

La ley china permite a los ciudadanos ser demandantes en casos criminales, y muchos practicantes están ahora ejerciendo su derecho para presentar demandas penales contra el ex dictador.

Reportes relacionados en inglés:
http://en.minghui.org/html/articles/2015/10/9/153154.html
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