Intercambio de practicante me ayudó a encontrar mi apego más profundo

(Minghui.org) Hacía mucho tiempo que no miraba la televisión. Entonces, de casualidad vi un conocido programa de citas rápidas. Lo miré continuamente, por cerca de dos horas y media. Empecé a sentir la vista cansada y náuseas, hasta que finalmente lo apagué. Sin embargo, seguía pensando sobre el programa y no podía tranquilizarme.

Sentí nauseas durante todo el día y no pude calmarme para estudiar el Fa. Miré hacia adentro y descubrí que se trataba de mi apego al sentimentalismo. Miré más profundamente y me di cuenta que estaba persiguiendo tener una buena vida.

Esa noche, soñé que unos jóvenes deformes me perseguían y estaba en peligro. Luché por escapar y traté de esconderme en una cueva. Pero allí adentro había un demonio gigante que llevaba puesto un casco y una armadura. No me dejaba ir y me sentía agobiada. Lloré y pedí al Maestro que me ayudara; entonces todo se desvaneció. Cuando desperté, supe que estaba interferida y que había invitado al demonio.

Al día siguiente escuché el audio de la 12.º Conferencia Anual de Intercambio de Experiencias de China Continental. Uno de los intercambios hablaba sobre una practicante que lo hacía bien en todos los aspectos, pero siempre tenía problemas de salud; tenía dolores y difícilmente podía soportarlos. Estaba desconcertada, ya que esto le pasaba una y otra vez. Preguntó al Maestro por qué siempre experimentaba lo mismo a pesar de ser una practicante genuina. ¿Qué estaba mal? Entonces, gracias a una pista del Maestro ella recordó su apego fundamental: perseguir una buena vida. Es decir, que quería usar a Dafa para obtener una buena vida. Cuando lo entendió, su dolor se fue casi por completo.

Al escuchar esta experiencia, comprendí de repente que yo tenía un apego similar. Fui perseguida en años anteriores y fui infeliz. Guardaba resentimiento hacia mi marido y sentía que él había aflojado. También esperaba que mi hijo tuviera un buen futuro. Vi que mi apego era querer que ellos fueran buenos para satisfacer mis necesidades.

Tengo diferentes apegos, como miedo a la pérdida, miedo a perder la cara y más. Estos apegos están en la superficie. Sin embargo, era solo como cortar las ramas, y por más que las cortara, la raíz seguía estando y seguía creciendo. El apego de fondo era que perseguía tener un buena vida en la sociedad.

El Maestro dijo:

“Entonces, ¿qué es un apego fundamental? Los seres humanos adquieren muchas nociones mientras están en el mundo, y a consecuencia, son impulsados por estas nociones a perseguir aquello que anhelan. Pero cuando una persona entra a este mundo, son arreglos predestinados los que determinan el curso de su vida, lo ganado y lo perdido. ¿Cómo podrían las nociones humanas determinar cada etapa de su vida? Por lo tanto, esos llamados “sueños y deseos maravillosos” se convierten en una búsqueda de apegos dolorosos que nunca puede ser satisfecha”. (Hacia la perfección, de Escrituras esenciales para mayor avance II)

A menudo solía escuchar que otros practicantes eran muy enérgicos, mientras que yo siempre estaba cansada y pasaba por muchas interferencias. Mirando hacia atrás, todas estas tribulaciones estaban relacionadas con mi apego de perseguir una buena vida. Y las viejas fuerzas tomaban ventaja de esto.

Ahora soy feliz y calmada. Estoy agradecida por el intercambio, me ayudó a encontrar mi apego fundamental. Ya no le tengo miedo a las tribulaciones.

Una compañera practicante vino hoy a visitarme, y pude entender que el Maestro estaba usando su boca para ayudarme a ver mis apegos de pereza, de sospecha, de pensamientos negativos, y más. Tengo que rectificar todo esto. Debo asimilarme a Dafa y así todos los seres conscientes de mi mundo se beneficiarán.