(Minghui.org) Tengo 74 años de edad y comencé a practicar Falun Gong en marzo de 1999. Tuve muchas tribulaciones, pero con la protección del Maestro, atravesé cada una de ellas sin ningún daño.

Resistiendo el encarcelamiento

Después de que el partido comunista chino (PCCh) comenzó a perseguir a Falun Gong en 1999, mi hija y yo continuamos practicando los ejercicios en el parque local.

“Falun Gong es muy bueno”, pensé, “mejor que otros ejercicios, y no molesta a nadie. Entonces, ¿por qué no puedo practicarlo? Si alguien me diera una buena razón para dejar de practicarlo en público, entonces los haría en casa”. Por lo tanto, seguí practicando en el mismo parque durante seis años.

En 2006, algunos practicantes locales fueron arrestados por practicar Falun Gong en público. Una docena fueron llevados a campos de trabajo forzado y cuatro recibieron condenas de prisión.

Yo también fui arrestada y, aunque me defendí en la corte y me declaré inocente, me dieron una pena de tres años de prisión. Luego de ser sentenciada, apelé a una corte de nivel superior.

No pensé que fuera culpable, y continué haciendo lo que se supone tiene que hacer un practicante.

Con el pretexto de que no había escrito una declaración de garantía renunciando a Falun Gong, mi unidad de trabajo retuvo mi cheque de jubilación y solo me pagó 750 yuanes por mes. Me pareció que se trataba de una persecución económica de las viejas fuerzas y que tenía que negarla. Decidí hablar con los miembros del partido comunista chino (PCCh) y también con el alcalde de la ciudad.

Batalla entre el bien y el mal

Empecé a esperar para hablar con los miembros del PCCh a las 6:00 a.m. y era el nro. 23 en línea, mientras que otra persona de mi ciudad natal tenía el 12. Para mi sorpresa, fui llamado antes que él.

Había cerca de 50 funcionarios de gobierno sentados en la habitación, incluido el jefe de la oficina 610 y otros miembros del PCCh. En casos normales, solo hay tres o cuatro personas.

Sin miedo me senté frente al alcalde de la ciudad. Le pregunté por qué mi pago de jubilación fue retenido por la oficina de educación. El jefe del departamento de la fiscalía dijo que Falun Gong era una secta. Le pedí que me mostrara la ley que decía que Falun Gong era una secta. Se quedó callado.

El alcalde de la ciudad dijo que le disgustaban los principios de “Verdad, Benevolencia y Tolerancia” que había mencionado en mi reporte. Le pregunté, ¿Cuál de las tres palabras no es buena? Todos dijeron que las tres palabras lo eran.

La persona de la oficina 610 hizo un comentario sobre el hecho de que los practicantes dicen que el PCCh está condenado por el Cielo y piden a las personas que renuncien a él y a sus organizaciones, lo que va en contra del partido. Le respondí que simplemente les pedimos a las personas que renuncien por su propia seguridad.

El alcalde finalmente dijo que me regresaría el pago de la jubilación. Recibí mi salario completo más la porción que me retuvieron durante dos años, lo que sumó un total de 40.000 yuanes.

Algunos funcionarios de gobierno me visitaron y hablé con ellos sobre Falun Gong. Como resultado, gané su apoyo.

El Maestro dijo:

Con los dizi repletos de pensamientos rectos,
el Shifu posee el poder de llevarlos al Cielo.
(“Bondades entre Shifu y los dizi” de Hong Yin II)

Funcionarios toman de corazón las palabras de practicantes

El día en que hablé con el alcalde y los otros funcionarios, había preparado muchos pósteres de Dafa con adhesivos para pegar en la ciudad. Mi hija y yo enviamos fuertes pensamientos rectos a las 12:00 a.m. y luego salimos a pegar los pósteres a lo largo de cuatro calles principales. Había muchas cámaras de vigilancia, pero ninguna pudo captarnos.

Cerca de tres semanas después, el jefe de la comisaría, el alcalde del condado y otras 20 personas fueron a mi casa. La saquearon y encontraron uno de los pósteres, y trataron de hacer que mi hija lo rompiera en pedazos.

Ella les dijo que mejor no hicieran eso o enfrentarían una retribución. Tampoco permitió que confiscaran una fotografía del Maestro colgada de la pared, y se negó a ir a la comisaría. En su lugar me llevaron a mí.

El alcalde me interrogó acerca de dónde había conseguido los pósteres. Le respondí que era mejor si no se lo decía, porque no quería que cometiera malas acciones.

El Maestro nos dijo:

“Si después de encontrarte con circunstancias difíciles, tus pensamientos pueden ser realmente rectos, entonces, cuando te enfrentes con la malvada persecución y cuando te enfrentes con interferencias, una sola frase tuya reforzada con pensamientos firmes y rectos podrá instantáneamente hacer que el mal se desintegre, (aplausos) y hará que quienes estén siendo usados por la maldad se den media vuelta y huyan, hará que la persecución perversa hacia ti se disuelva, y hará que la interferencia maligna hacia ti desaparezca sin dejar huellas”. (Exponiendo el Fa en el Fahui Internacional del Oeste de los Estados Unidos)

Impacto de demandar al Jiang Zemin

En junio de 2015 envié los documentos demandando a Jiang Zemin, ex dictador del PCCh, a la corte suprema popular, la fiscalía suprema popular y a otras oficinas centrales del gobierno. Dos días después recibí la confirmación de que fueron recibidas.

A principios de julio, el director de la escuela me preguntó sobre la demanda. Le dije que estaba en mi derecho al demandar a Jiang y que no tenía nada que ver con la escuela.

El secretario del PCCh de la escuela me dijo que tenía que ir a reuniones para informar sobre mí todos los días, así que no le quedaba tiempo para hacer su trabajo. Le dije que la próxima vez yo podía ir a las reuniones en su lugar. Después de eso, nadie le pidió que le informara sobre mí, y no volvieron a llamarlo para reuniones adicionales.

Funcionarios de gobierno del condado también vinieron a hablar conmigo, así como también el capitán de la división de seguridad nacional. Me pidieron que firmara con mi nombre un documento que decía que Falun Gong era una secta y repetía que estaba equivocada al enviar una demanda contra Jiang Zemin.

Les dije que Falun Gong era una práctica de cultivación de la Escuela Buda, y que lo que escribí en la demanda era la verdad.

La policía corrigió el documento de acuerdo a lo que les dije. Y el capitán y su grupo se fueron sin forzarme a firmar.

De mis doce años de cultivación entiendo fehacientemente que mi seguridad personal se origina del estudio del Fa. Solo cuando tenemos una confianza inquebrantable en el Maestro, creemos en el Fa al 100 por ciento, y en cada oportunidad miramos hacia adentro, el Maestro estará a nuestro lado en todo momento y nos ayudará a superar cualquier tribulación.