(Minghui.org) Me diagnosticaron con cáncer de colon avanzado en noviembre del 2010. El doctor me dijo que vaya a un hospital más grande para la cirugía. Mi esposo pidió dinero prestado de todos los que conocíamos para pagar la cirugía, y fui operada después de un mes.

Dos semanas después que dejé el hospital, empecé la quimioterapia.

Durante la quimioterapia, un médico descubrió que tenía pólipos anales, así que tuve otra operación para removerlos. Unos meses después, otro médico descubrió que tenía pólipos en el recto, así que tuve que ser operada una vez más. Después de tres cirugías y seis sesiones de quimioterapia, había perdido mucho peso y estaba constantemente mareada y con nauseas. A los cuarenta y un años, ya parecía una anciana.

A pesar de las operaciones y los tratamientos, no me sentía mejor. Cuando empecé a tener dolor de pecho en noviembre del 2013, los médicos descubrieron que las células cancerígenas habían hecho metástasis en mis pulmones. Me dijeron que continúe con la quimioterapia.

Estaba devastada. Aun teníamos una gran deuda de las cirugías anteriores y carecíamos de los medios para continuar con el tratamiento.

Luego me encontré con mi vecina. Me dijo que una vez había sufrido de cáncer al seno, pero que no necesito ir al hospital ni tomar medicamentos. Muy sorprendida, le pregunté: “¿Cómo lo superaste?”. Me dijo que se había curado después que empezó a practicar Falun Gong.

Me dijo muchas cosas sobre Falun Gong, que también es conocido como Falun Dafa. Me dio un amuleto y me dijo que recite: “¡Falun Dafa es bueno! ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!”.

Unos días después, empecé a leer Zhuan Falun. Mientras continuaba aprendiendo sobre la práctica y trataba de seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, vi grandes cambios en mí. Mi cabello se volvió negro, mi piel se aclaró y dejé de sentirme hinchada. En tres meses, todos mis síntomas desaparecieron. Dejé de tomar las medicinas.

En el trabajo, trabajo dura y diligentemente y nunca trato de sacar ventajas. Hago lo mejor que puedo para ayudar a otros cuando sea que es necesario. Mi supervisor y compañeros de trabajo todos piensan que soy una buena persona. Como resultado fui promovida y recibí un aumento.

Cuando la policía me visitó para preguntarme sobre la demanda que había presentado contra el ex-líder chino Jiang Zemin por iniciar la campaña de persecución en contra de Falun Gong, les conté cómo Falun Gong me había salvado la vida y me había cambiado. Dijeron: “Si es tan bueno, anda y practícalo en casa”.