(Minghui.org) Desde que asistimos al Fahui de Nueva York 2008, los sitios donde los chinos pueden renunciar al PCCh, aumentaron de 1 a 11 en nuestra área.

Shifu dijo:

Esas tienen miedo, porque ese Centro es el clavo en sus ojos y la espina en su carne. La presencia pública de un "Centro de Renuncias al Partido," o un "Centro para Renunciar al malvado PCCh", es como una flecha en la espalda, que les irrita. El hecho es que es un lugar poderoso para destruir al mal, y por eso ellos le temen”. (Enseñando el Fa en la Conferencia de Nueva York 2008)

Comencé a ayudar en uno de estos sitios del barrio chino en septiembre de 2008, y participé en actividades allí en los últimos 8 años. Inicialmente, solo iba allí una vez por semana, pero luego comencé a ir dos veces por semana. He ayudado a muchos chinos a renunciar al PCCh y sus organizaciones.

Cuando recién empecé a ir, encontré un montón de interferencias. Por ejemplo, una vez salí de casa por la mañana para ir al sitio de renuncias. Cuando llegué a casa, la computadora y la arrocera no funcionaban. Sabía que eran las viejas fuerzas intentando evitar que salvara a la gente. Sin embargo, continué yendo al sitio de renuncias ignorando la interferencia de las viejas fuerzas.

Ocurrieron muchos milagros en los pasados 8 años, lo que me hizo creer más firmemente en Dafa y Shifu. He llegado a conocer el poder de Dafa y la poderosa virtud de Shifu.

Cartel devuelto

En nuestro sitio, había un cartel amarillo que mostraba el número de renuncias al PCCh cada semana. Sin embargo, en una ocasión, el cartel desapareció después que olvidáramos sacarlo al final del día. Todos estábamos preocupados por esto.

Miramos hacia dentro y pedimos ayuda a Shifu. La semana siguiente nos devolvieron el cartel. No sabíamos quién lo devolvió, pero estábamos emocionados y agradecimos a Shifu.

Otra vez, teníamos cinco carteles en el puesto. Mucha gente venía a leerlos, pero uno era miembro del consejo municipal y nos dijo que teníamos que quitar los carteles. La otra practicante y yo no sabíamos hablar bien inglés y no podíamos explicarle por qué eran importante los carteles, así que los bajamos.

Pusimos los carteles otra vez la semana siguiente. Este empleado de la municipalidad intentó llevarse los carteles, pero no se lo permitimos. El mismo hombre regresó otro día y se llevó uno de los carteles.

Nuestro coordinador me pidió que fuera con otro practicante a la municipalidad para explicar por qué eran importantes los carteles. Ese hombre se disculpó y nos devolvió el cartel que se había llevado, después que el practicante le explicara sobre Dafa y la persecución en China.

También nos dijo que había un lugar en particular en la estación de trenes donde los carteles serían efectivos. Desde entonces dejamos ahí los carteles.

Interferencia de la municipalidad

Una vez nos dijeron que no teníamos permitido colgar carteles tan grandes en el área donde estábamos. Entonces nuestro coordinador compró carteles más pequeños para sostener con la mano en Hong Kong. También trasladamos nuestro puesto de renunciar al PCCh a un lugar más cercano a los shopping.

Los comercios tenían toldos que daban sombra y protección de la lluvia y el viento. Mucha gente iba allí para hacer compras los fines de semana, y el número de personas renunciando al PCCh aumentó.

Los dos comercios al lado de nuestro sitio, cada uno tenía un vendedor. Ambos intentaron de todo para hacer que nos fuéramos, e incluso llamaron a la policía dos veces para que nos sacaran de allí.

La policía sabía que no estábamos causando molestias y les explicaron a los vendedores que nosotros no interferíamos con sus negocios. Sabíamos que Shifu nos estaba ayudando para salvar a más gente.

Sin embargo, estas dos personas luego pidieron a los miembros del concejo municipal, que nos quitaran de allí. Personal del consejo municipal venían todas las semanas para causarnos problemas. La tercer semana, uno de ellos trajo una cámara para sacar fotos de nuestro puesto. Pero probablemente se dio cuenta que sus acciones no nos intimidaban, así que dejó de venir.

Pronto, otro empleado del municipio vino. Él era responsable de hacer las multas a los vehículos que estuvieran más de 15 minutos en la calle principal. Nos dijo que nos fuéramos de lo contrario nos haría una multa de $300.

Fue también durante este tiempo en el que yo estaba enredada en un conflicto con otra practicante. Esta practicante había decidido trabajar sola para ayudar a la gente a renunciar al PCCh, en vez de trabajar juntas como un equipo. Estaba enojada con ella, y tenía que enfrentar al municipal yo sola, estaba cansada y amargada. Pensaba por dentro que esta practicante, que recién llegaba de China, aún tenía la influencia de la cultura del partido.

Intenté entender por qué la practicante se comportaba de esta manera. No obstante, ¿acaso esto no estaba indicando que yo también tenía un problema? Yo también soy de China, y a menudo me comportaba con las formas de la cultura del partido, es decir, me comportaba como un jefe y sentía que todos tenían que escucharme. Si mi opinión no se tomaba en serio, me enojaba. ¿No era esto cultura del partido? ¿No tenía que eliminarlo?

Después de pensar sobre esto, mi resentimiento desapareció. Me di cuenta que tenía que estar agradecida con la practicante que me ayudó a mejorar.

También me di cuenta que el empleado municipal era una persona que tenía que ser salvada. De otro modo, algún día podría recibir castigo por intentar interferir con nuestra salvación de seres conscientes. Envié pensamientos rectos para detener sus acciones.

No vino de nuevo, y nunca más se mencionó la multa.

Me di cuenta de que con profunda convicción no hay nada que Shifu no pueda hacer para ayudarnos.

Shifu dijo en Zhuan Falun: “La cultivación depende de uno, el gong depende del shifu” (Zhuan Falun)

Agentes del PCCh intentan interferir

Un joven chino molestaba constantemente en nuestro sitio. Cuando saqué mi celular e intenté tomarle una foto, se fue inmediatamente. No lo vimos más después de eso. Algunos otros chinos y occidentales intentaron causarnos problemas, pero nosotros simplemente los ignoramos y se fueron.

Un chino que estaba parado cerca, dijo que la mujer intentando interferir con nosotros era una espía del PCCh. Le pareció eso basado en lo que ella le dijo a él sobre nosotros. Luego vinieron algunos occidentales a llevarse nuestro material. Esa mujer comenzó a decirles cosas falsas a ellos sobre nosotros.

Le saqué una foto con mi celular. Parecía tener miedo y sus manos comenzaron a temblar. Me dijo que tenía que borrar la foto. Habló con su compañero y se fueron. No regresaron.

Nociones humanas intentan sacarme

No muchos practicantes venían a ayudar a nuestro sitio, y a veces estaba sola. Le pregunté al coordinador si podía pedir que otros practicantes vinieran a nuestro sitio, pero nada se materializó ya que probablemente estaban ocupados con otros proyectos.

A veces estaba parada allí y me acordaba del Fa de Shifu:

“Cuando los Dafa dizi validan el Fa, ¿por qué una persona puede hacer lo que son capaces diez o cien personas?” Exponiendo el Fa en el Fahui del Medio Oeste de los Estados Unidos, 2003

Sentí que mi cuerpo era gigante en otra dimensión y que podía enfocarme en la tarea de salvar seres conscientes con buenos resultados. Pero a veces mis nociones humanas me interferían.

Por ejemplo, una vez pensé en ir de compras en vez de ir al sitio de renuncias. Sabía que no era un buen pensamiento y que sinceramente tenía que intentar ayudar a salvar a la gente en vez de ser llevada por esas ideas. Aun así, pensé que si iba al baño, podía comprar algunas cosas que necesitaba camino al sitio de renuncias.

Casi de inmediato una persona intentó causarnos problemas y nos denunció a las autoridades. El municipal que solía causarnos problemas apareció cuando yo no estaba en el puesto.

Quedé perpleja, mientras me daba cuenta aún más de la seriedad de la verdadera cultivación. Las viejas fuerzas pueden escabullirse siempre que no estemos en línea con el Fa. Tengo que tratarme como Dafa dizi todo el tiempo donde sea que esté.

Me he cultivado por casi 20 años, pero aún experimento ye de enfermedad. Obviamente tengo muchas nociones humanas que descartar. Tengo que alcanzar el ritmo en este periodo especial para poder salvar más gente.