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La diferencia entre la vida y la muerte

Abr. 9, 2016 |   Por una practicante en la provincia de Hebei, China

(Minghui.org) Comenzar a practicar Falun Dafa fue el acontecimiento más significativo y feliz de toda mi vida. ¡Hizo la diferencia entre la vida y la muerte!

Dos matrimonies fallidos

Desde que nací fui una niña enfermiza, con piel y huesos como de bebé. Todo el que me veía desalentaba mis posibilidades de supervivencia.

Como adulta, pasé por dos divorcios. Mi primer esposo se divorció y se volvió a casar cuando nuestro hijo tenía solo un año. Fuimos forzados a dejar su casa. La presión que me provocó la situación casi me causó un ataque de nervios.

Dos años después, me casé nuevamente. Pasado nuestro casamiento encontré la razón de su persistente pedido de mano. No fue porque me amaba, sino que quería sacar ventaja de mi mala salud y sencilla bondad.

Construyó la falsa fachada de un hogar respetable con el fin de perseguir relaciones extramaritales; descubrí la naturaleza mezquina que habitaba en él y después de su muerte me enteré de sus aventuras amorosas.

Paralizada por una enfermedad debilitante desde la infancia

Debido a mis severas enfermedades, no era inusual que pase la mitad del año en el hospital. Era una visita familiar la de médicos y enfermeras. Pero me aferré a la vida sabiendo que mis dos niños pequeños dependían solo de mí.

En 1992, durante una cirugía para quitar dos tumores de vejiga, casi muero debido a una reacción alérgica a la anestesia. En 1993, me fracturé la cadera izquierda. Como no podía pagar el tratamiento, me vi obligada a soportar el dolor. Me dejó incapacitada para mantenerme erguida. Caminaba encorvada en un ángulo de 40 grados.

En 1994, quistes ováricos benignos se degeneraron en tumores malignos. Poco tiempo después, los médicos detectaron un tumor en el cerebro. ¡En ese momento el dolor era casi insoportable y mi futuro carecía de esperanza!

Pero de alguna manera, era como si una mano invisible en cada situación crítica de la vida estaba trabajando para salvarme, me las arreglé para vivir a través de cada experiencia cercana a la muerte. Cómo manejé las cosas para sobrevivir me desconcertó enormemente.

Después de comenzar a practicar Falun Dafa, me di cuenta que el Maestro Li había prolongado mi vida para darme la posibilidad de encontrar a Dafa.

La recuperación increíble de una severa espalda encorvada

En 1995, mi hija me sugirió que probara con qigong. Sin embargo, a pesar de aprender de algunas escuelas, ninguna de mis enfermedades se curó. A fines de ese año, algunos conocidos me presentaron a Falun Dafa. La práctica se enseñaba en el parque de forma gratuita.

Curiosamente, busqué el sitio de práctica donde una mujer amable me introdujo a Dafa, y agregó: "Mientras sigas los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y vengas aquí a practicar los ejercicios, ¡el Maestro de Falun Dafa curará tus enfermedades!".

Al escuchar las tres palabras, ´Verdad, Benevolencia y Tolerancia´, de inmediato exclamé: "¡Verdad, Benevolencia y Tolerancia es maravilloso!". Repetí esta frase unas pocas veces e inmediatamente sentí una sensación suave y confortable en el lugar donde el hueso de la cadera se había fracturado.

Sin haber comenzado con los ejercicios, fui capaz de enderezar la espalda encorvada y ponerme derecha. La gente a mi alrededor se sorprendió por esto. Yo lo llamo un milagro. ¡Había sufrido de una severa espalda encorvada durante muchos años, pero con el poder sorprendente de Falun Dafa, me erguí inmediatamente!

Mis problemas de corazón desaparecieron

Tuve dudas mientras aprendía el segundo ejercicio. Había sufrido de varios paros cardíacos, los que requirieron resucitación de emergencia. Mi cuerpo y mi corazón eran débiles. No sabía si podría sostener la posición de los brazos en alto frente de mí. Tan pronto como los elevé a la altura de los ojos, la espalda y el corazón comenzaron a doler. ¡El dolor era insoportable, pero decidí mantenerme firme!

¡Mientras estaba de pie, tuve la increíble sensación de un gran Falun girando sobre el corazón! Rápidamente una indescriptible comodidad me abrazó. Estaba profundamente agradecida al Maestro Li. Con su cuidado y apoyo, me las ingenié para realizar los 45 minutos del ejercicio.

A partir de ese momento mi corazón se curó, y sentí un Falun visitar cada lugar enfermo dentro del cuerpo y ejercer sus poderes curativos. Ola tras ola de calor confortable me envolvieron de pies a cabeza. Desde el inicio de la práctica, no sentí frío incluso en invierno; y hasta dejé de fumar.

Mejorando la mente, purificando el cuerpo

El Maestro mencionó:

“…..cuando una persona quiere cultivarse y refinarse, no es para nada un asunto así de fácil. He dicho que esto es un asunto muy serio, está más allá de la gente común y es más difícil de hacer que cualquier cosa de la gente común. ¿Acaso no es sobrenatural? Por eso, los requisitos para ti son más altos que cualquier cosa de la gente común”. (Zhuan Falun)

Después de experimentar el poder milagroso de Falun Dafa, decidí vivir la vida en estricta concordancia con las enseñanzas del Maestro y ser siempre una buena persona. Con ese fin, dejé ir mi impaciencia, mal humor y la costumbre de regañar a la gente.

Aunque nuestra familia contaba con un presupuesto reducido, me negaba a aceptar ganancias mal habidas y siempre traté de ser considerada con los demás. Una vez recogí una carpeta que contenía cien yuanes. Me dirigí a la dirección que allí figuraba y devolví el dinero al propietario. En dos ocasiones, regresé el cambio de más que me dio el cajero, al darme cuenta de su error.

Un día un auto me chocó, pero bajo la protección del Maestro, me aparté del incidente, sin un rasguño. No culpé al chofer, y mi corazón estaba lleno de gratitud hacia el Maestro. En otro accidente, una motocicleta me chocó por detrás. Tenía la cara muy rasguñada y la bicicleta destruida.

Cuando esto ocurrió, recordé la enseñanza del Maestro:

“Es cierto que el chofer conducía a demasiada velocidad, pero, ¿cómo iba a querer atropellarla intencionalmente? ¿Acaso no lo hizo sin querer?”. (Zhuan Falun)

Con este pensamiento en mi mente, rechacé el ofrecimiento de compensación de la otra parte.

Como mi nivel moral mejoró, Dafa continuó purificando mi cuerpo. Pero aún tenía un tumor en el cerebro y me sentía somnolienta cuando escuchaba las conferencias del Maestro. Esta situación se resolvió por si sola en unos pocos días y ya no me dormí.

Después de un periodo de diarrea para eliminar las sustancias nocivas del cuerpo, el estómago hinchado cedió y me sentí con mucha energía; me sentía tan ligera como el viento, disfruté del simple placer de caminar tan rápido como quisiera.

Los médicos experimentan el milagro de Dafa

Alrededor de un mes después de comenzar a practicar Falun Dafa, mi médico se sorprendió durante un chequeo de rutina: “¿Tus tumores desaparecieron?”.

No podía dar crédito a sus ojos, llamó a otros dos profesionales para verificar su diagnóstico. Después de revisarme repetidamente, exclamó: "¿Qué droga milagrosa has estado tomando? ¡Tus enfermedades se curaron por completo! ¡Es un milagro imposible!". Y respondí en voz alta," ¡Fue Falun Dafa que salvó mi vida!”.

Los compañeros que me acompañaron a la consulta manifestaron: "¡Falun Dafa es realmente increíble!". Varios de ellos inmediatamente comenzaron a hablar sobre el deseo de aprender la práctica.

Estaba completamente curada, aunque sólo había practicado Falun Dafa durante dos meses. Ahora les digo a todos los que conozco: "¡El Maestro de Falun Dafa es bueno! ¡Falun Dafa es bueno!

La represión del partido comunista chino, el marco y la persecución de Falun Dafa confundió a muchos chinos. Ellos creen las mentiras del PCCh. Sinceramente espero que mi historia personal los ayude a ver que: ¡Falun Dafa es verdaderamente bueno!