(Minghui.org) Un hombre mayor y su familia expresaron su agradecimiento y envían saludos por el Año Nuevo Chino al fundador de Falun Dafa (también conocido como Falun Gong), el Maestro Li Hongzhi.

Esta es su historia:

Tengo 84 años y vivo en el centro de la provincia de Liaoning. En septiembre de 2007, conocí a un practicante de Falun Gong que me convenció de renunciar al partido comunista chino (PCCh). Desde mi incorporación al malvado PCCh, a temprana edad, presencié todo tipo de atrocidades realizadas por los secuaces de ese partido malvado. Justo después de que renuncié al PCCh, sentí una enorme sensación de alivio físico y mental. Así que le pregunté a un practicante, ¿por qué me siento tan bien?

"El Maestro Li está cuidando de ti ahora", me contestó. "El Maestro Li ha eliminado el maligno fantasma comunista que te poseía. Por eso te sientes tan bien".

El practicante me dio un amuleto de Dafa y me animó a recitar a menudo "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es grandioso".

Vida bendecida después de renunciar al partido

Poco después de eso, mi vida comenzó a cambiar. En primer lugar, nuestras finanzas mejoraron en 2008. Al año siguiente, me asignaron una casa nueva.

Un día después de mudarnos a la casa nueva, mi nieto, dos sobrinos y yo fuimos a demoler nuestra antigua casa. Mientras estábamos tirándola abajo, una pared se derrumbó inesperadamente. Mi nieto y yo escapamos por poco, pero mis dos sobrinos quedaron enterrados bajo los escombros. Desesperadamente cavamos para rescatarlos y nos asombramos al ver que no resultaron heridos para nada.

Después del Año Nuevo Chino en 2010, fui atropellado por un automóvil. El choque me derribó y la rueda delantera derecha golpeó el lado derecho de mi pecho. El conductor se apuró para llevarme al hospital. Después de ser examinado, el doctor dijo: "No es nada grave, sólo algunos rasguños menores en la piel". El doctor quedó perplejo y comentó: "la piel de este hombre parece la de un joven".

Agradecido con el Maestro Li

Cada vez que veo al practicante siempre le pido que transmita nuestro agradecimiento al Maestro Li. Hoy, lo encontré otra vez y le pedí que escriba mi historia.

En nombre de mi esposa, hijos, nieto, sobrinos y toda nuestra familia, me pongo de rodillas ante el Maestro Li por salvar mi vida y bendecirnos a todos. También me gustaría agradecer a los practicantes de Falun Gong por ayudarme a dejar el malvado PCCh.