(Minghui.org) 10 años participando en la Banda Marchante Tian Guo. Recuerdo bien los inicios. Me conmovió la primera vez que vi a la Banda Marchante Tian Guo en Nueva York y me evocó el deseo de participar. Pero, en Europa el proyecto no existía. Por esto, estuve muy complacido cuando fue fundada la Banda Marchante Europea.

En esa época había muy pocos expertos y muchos principiantes, pero nos involucrábamos con el alma. En nuestro primer taller sentí un tipo de deleite infantil en mi corazón, estaba listo para la aventura.

Toco saxofón tenor. Desde hace 20 años, en el ático de mis abuelos, había estado esperando este momento. Durante mi niñez sólo aprendí a tocar escalas; después de eso perdí el interés. Mi abuela adoraba la música de las bandas de marchas, me había comprado un valioso instrumento, el cual, pasado mi muy breve entusiasmo, desapareció del ático.

¿Cómo podría haber sabido que existía una verdadera razón tras esto?

Cuando comencé nuevamente a practicar para la Banda Marchante, quise de inmediato comenzar con canciones de Dafa. Ese fue un día de oscuras nubes negras. Incluso las primeras notas de Falun Dafa Hao eran imposibles de tocar, pero gradualmente hasta emergió una melodía. Parecía como si no hubiese olvidado nada. Sorprendentemente para mí, después de haber tocado, el cielo estaba claro y el sol brillaba.

La primera actuación

Nuestra primera actuación fue con 180 miembros aproximadamente, en el Barrio Chino de París. Usamos un colorido vestuario y aunque algunos de nosotros sólo teníamos unas pocas semanas de experiencia musical, pudimos presentar 3 canciones de memoria. Todos pusimos nuestro corazón en ello y así fue como tocamos.

Le brindamos música sagrada a la comunidad china, les llevamos esperanza y obtuvimos aplausos.

Nuestro director estaba inseguro sobre el impacto de nuestra presentación, fue lo que nos dijo después de la marcha. Pero se sintió aliviado cuando el público aplaudió. En otra actuación en Francia, el público incluso dio saltos al ritmo para seguir nuestras canciones.

Mientras tocaba me daba cuenta que podía oír mis propias notas incorrectas, pero la audiencia no las oía. Comprendí que era así: Cuando percibía mis debilidades, yo podía mejorar; como tocábamos con nuestro corazón, afuera de la banda los seres divinos hacían que nuestros sonidos fuesen incluso mejores.

¿Por qué toco junto a la Banda Marchante Europea?

Europa cuenta con muchos países diferentes, con idiomas diferentes. La música es un lenguaje que puede ser entendido por todos. La Banda Marchante Europea se convirtió en una herramienta para traspasar la barrera idiomática. Traspasa los viejos arreglos y nos involucra en un cuerpo para esclarecer los hechos.

Al marchar y tocar de memoria al mismo tiempo y también seguir al tambor mayor, a menudo yo era el dispar, o tocaba incorrectamente, o demasiado fuerte. Al tocar fuerte, mi ansiedad de reconocimiento se manifestaba, mi apego a no escuchar comentarios se manifestaba cuando otros me criticaban y mi temor a cometer errores se manifestaba cuando tocaba notas desafinadas y perdía el ritmo.

Pero al formar una unidad y progresar, podía sentir la cooperación de un cuerpo. Una vez me percibí estando en otra dimensión donde todo parecía ir muy lento y donde el poder de las canciones de Dafa aparecía muy poderosamente.

Para esto, me gustaría leer el poema del Maestro:

La Orquesta Tian Guo

"Los tambores y trompetas del Fa manifiestan el poderío celestial
Quitan lo perverso, eliminan la maldad, llaman a regresar
La salvación de la gente durante el fin del mundo sacude Cielo y Tierra
La rectificación del cosmos irradia un resplandor".

Li Hongzhi
1 de agosto de 2015

Durante nuestras reuniones apreciaba mucho hacer los ejercicios y estudiar el Fa. Además, compartir experiencias, ensayar y enviar pensamientos rectos juntos. Especialmente las valiosas experiencias con los practicantes europeos son un ambiente excepcional.

Desafío de la Gira por Europa del Este – Mi experiencia en la Gira por Europa del Este

Para mí, la gira por Europa del Este fue un desafío. Tuvimos tantas actuaciones como las que habríamos tenido en todo un año.

Por un lado sabía que muchos seres conscientes estaban esperándonos, por otro, me sentí deprimido con dolor físico y con el afán de comodidad y de sentimientos bonitos para estar en paz. Además, no sabía bien de memoria todas las canciones y no había practicado mucho.

Un compañero practicante me despertó de mi confusión. Me dijo: “Simplemente anda, te las arreglarás; las tocamos tan a menudo, que podrás mantener las canciones en tu mente”.

Cuando llegamos a Hungría y ensayamos, me sentí muy inquieto en mi corazón. Sentí como si mis compañeros practicantes no se fijaran en mí y mi corazón estaba ardiendo. Toqué muy mal en el ensayo frente al coordinador, lo cual fue doloroso. Además, temí que él tal vez no me permitiera tocar en el desfile.

Mi experiencia anterior era que normalmente yo no toco tan mal. Cuando estaba en un estado tal, en general no trabajaba mucho. Al mirar adentro, vi un profundo temor a no ser apreciado y a caer.

En tiempos pasados ya había experimentado esas emociones de no importarle a alguien y de una dolorosa pérdida. A través de esto había creado conceptos falsos acerca de mí y un sentimiento doloroso de estar perdido. Ya no quería experimentar más esas emociones y creé un fuerte apego de temor a su alrededor, el cual surgía cuando otros no se fijaban en mi o cuando estaba a punto de caer.

Una vez en un sueño, estaba sentado a la mesa con el Maestro y con otros practicantes. El Maestro hablaba con todos los practicantes, excepto conmigo. Mi corazón estaba dolorido. Cuando desperté, aún me dolía. Este sentimiento era el que describí antes. Agradecí al Maestro por darme esta señal relacionada con mi apego básico.

Ahora este apegó se mostró nuevamente y tuve esta oportunidad de dejarlo partir en este nivel. Me calmé.

En su Jingwen “Eliminen sus últimos apegos”, de Escrituras esenciales para mayor avance, el Maestro dice: 

“Todos ustedes ya son conscientes de la ley de la generación mutua e inhibición recíproca. Si no tienen miedo, el factor que les haría tener miedo se volverá no existente”.

Para mi sorpresa, al día siguiente tenía que tocar en un puesto de adelante, aunque había querido tocar en el medio, ya que no podía tocar de memoria algunas canciones. Sin embargo, siempre me ponían en los puestos delanteros, donde todos los espectadores podían verme. Dejé ir el apego de no ser visto y me di cuenta de que ¡se fijaban en mi!

En Cracovia toqué en el mismo puesto, frente a los espectadores. De pronto apareció el coordinador y dijo: “¡Tu cambiarás de puesto con el practicante B. No lo haces bien cuando al final pones en posición tu saxofón!”. Fui a la última fila, sin embargo, estaba molesto ya que en mi mente yo lo hacía bien poniendo el instrumentos en posición de descanso. Como protesta, mostré al coordinador muy claramente y de manera desafiante, cómo ponía mi instrumento en posición. Aquí, mire, lo hago… Pero me di cuenta que esto era buscar afuera.

Por lo tanto miré adentro y descubrí los siguientes apegos:

1. El punto de inicio del coordinador era que nosotros siempre deberíamos tener un buen impacto frente a los espectadores. Tal vez él siempre me miraba cuando apoyaba incorrectamente mi saxofón; esto significaba que su punto de partida era bueno.
   
2. Como practicante no debería aferrarme a mi posición. ¿Estaba descontento porque debía cambiar de puesto?
   
3. Sentí que era tratado injustamente y temía ser rechazado nuevamente.
   
4. Estaba enfadado. Pero la rabia no es compasiva. Interfiere con la unidad que es el cuerpo de la Banda Marchante.

Al final supe que debía elevar mi xinxing para que incluso más seres pudieran ser salvados. Finalmente debería agradecerle por haberme dado la oportunidad de elevar mi nivel.

Mientras trabajaba en mis apegos, mi rabia disminuía y súbitamente el coordinador sonreía y me hacía un gesto de ok.

Actualmente, cada vez más y más me doy cuenta de la conexión entre elevación y salvar seres conscientes. Si no me elevo, no puedo alcanzar niveles altos. Si normalmente no elevamos nuestros niveles, los seres conscientes no serán salvados.

Desde mi perspectiva, la gira completa fue un éxito. Tocamos bajo el sol radiante y bajo la lluvia. Pudimos llegar a muchos seres conscientes. En algunos mercados vi artistas soplando burbujas de jabón que flotaban como grandes bolas transparentes. Esta fue para mí una señal de los muchos reinos que liberamos al tocar en nuestras marchas. Reinos que ahora están teniendo un futuro.

Si la Banda Marchante Europea fuese un barco, yo diría: nos hemos vuelto más grande y espero que aún sigamos creciendo –tan grande como el océano de todos los seres conscientes, que deben ser salvados.

¡Gracias Maestro! ¡Gracias compañeros practicantes!