(Minghui.org) Mi hermana visitaba varias librerías en Beijing durante su tiempo libre después del trabajo. Tenía una fuerte sensación de buscar un libro. ¿Cuál libro? En realidad, no lo sabía.

Finalmente, un día vio el libro Zhuan Falun. Sentía que podría ser el libro que estaba buscando. Lo compró de inmediato, pero no lo leyó. En cambio, cuando volé a Beijing para mi luna de miel, me dio el libro.

En mi vuelo de regreso a casa, eché un vistazo al libro. “Tengo que hacer que mamá lo lea. Estoy segura de que este libro puede ayudarla y también a nuestra familia”, pensé.

Mi mamá

Desde que éramos pequeños, mi mamá había estado luchando con problemas de salud: presión arterial alta, problemas renales y la piel crónica descamada que no dejó prácticamente ninguna piel sana en su cuerpo. Tomaba mucha medicación y todavía sufría de estas dolencias. Debido a su malestar físico, tenía mal genio y siempre estaba tensa con mi papá.

Mi madre era muy estricta con nosotros y mi hermana, hermano y yo le temíamos. Después de que mi hermana y mi hermano se graduaron de la universidad, ambos se mudaron y no querían volver.

Mi mamá estaba en la cama leyendo un libro cuando regresé de mi luna de miel. Le di Zhuan Falun y le pedí que lo leyera. Lo miró y lo dejó a un lado.

Seguí empujándola para que leyera el libro. Un mes más tarde, le pregunté si lo había terminado. “Hay otro para que leas después de que termines éste”, dije.

“No sé por qué. No tengo sueño cuando leo otros libros, pero cuando leí el libro que me diste, me sentí tan soñolienta que me quedaba dormida después de leer dos páginas. Sólo he leído una docena de páginas ...”, me dijo.

Estaba muy molesta y perdí la paciencia con ella. ¡Cómo deseaba que leyera el libro rápidamente para obtener una mejor salud y un temperamento más agradable!

Al ver que yo estaba molesta, mi madre prometió leer el libro. Cuando lo recogió de nuevo, no se sentía soñolienta en absoluto y lo leyó de cabo a rabo.

Resultó que el libro le encantó.

Pocos días después, tuvo la idea de aprender los ejercicios de Falun Dafa. Pronto, un viejo conocido suyo la visitó y la llevó a un sitio grupal de ejercicios.

Durante ese tiempo, vimos cambios en ella todos los días. Ya no necesitaba sus gafas para leer y estaba llena de energía. Tenía una tez rosada y su piel se volvió muy suave. Lo más importante, dejó de pelear con mi papá.

Cada vez que ella iba a estudiar en grupo o hacer los ejercicios con otros practicantes me llevaba. También comencé a practicar Falun Dafa.

Cuando mi hermana y mi hermano llegaron a casa para el Año Nuevo Chino varios meses después, todos quedaron impresionados por los cambios que veían en mi mamá y en mí. Una familia al borde del colapso, de la desunión, se reunió de nuevo y todo era tan cálido y armonioso. Mi madre cuidaba a toda la familia todos los días y lo hacía con una sonrisa en su rostro.

Con mi hermana y hermano también fuimos al sitio de ejercicios. Impresionados por la fuerte energía positiva y la compasión de Dafa, ambos comenzaron a practicar también.

Aunque mi padre no practicaba, él vio todos los cambios en nosotros y fue muy solidario.

Mi abuelo

Mi abuelo creció en una provincia del noreste de China. Cuando tenía sólo tres años, aprendió meditación por sí mismo. Sus padres le preguntaron por qué siempre estaba sentado allí y no quería jugar con otros niños. Les dijo que podía ver un mundo muy hermoso cuando cerraba los ojos. Cuando abría los ojos, el mundo que veía era sucio.

Todos los días antes del amanecer, veía a muchos pequeños Budas girando en la ventana. Volaban por la ventana y rodeaban su cabeza. Entonces, volaron en su cabeza uno tras otro. Después de que todos entraban, mi abuelo se levantaba.

Cuando creció, ayudó a sus padres a trabajar en la granja. Cuando estaba cansado, meditaba en un campo. Vio enormes cajas metálicas moviéndose rápidamente, pero no sabía lo que eran.

Muchos años más tarde, cuando regresó a su ciudad natal y vio trenes, se dio cuenta de que lo que vio durante la meditación fueron de hecho, esos trenes. Era su capacidad sobrenatural de precognición y retrocognición que había surgido en ese momento.

Mi abuelo tenía un fuerte deseo de cultivar el estado de Fo. Aunque se vio obligado a casarse y a tener hijos, trató de dejarlos e ir al templo varias veces. Cada vez que salía de casa, mi abuela lo encontraba. Mi abuela dijo que tenía un aura roja por encima de su cabeza y que podía verla desde lejos, así que nunca pudo escapar.

Durante la revolución cultural, mi abuelo fue perseguido. Sin embargo, nunca vaciló en su deseo de cultivarse. Después de que mi abuela falleció en 1993, mi abuelo se convirtió en un budista laico y leía las escrituras en casa todo el día.

Sin embargo, no quería ir a los templos. Dijo que cuando fue a templos en el pasado, encontró que los monjes allí estaban perdidos y no sabían cómo cultivarse más. Algunos incluso lo persuadieron para volver a casa y disfrutar de la vida. Cuando les preguntó acerca de las cosas en las escrituras budistas, ninguno de los monjes pudo responderle.

Después de que nuestra familia comenzó a practicar Dafa, mi mamá le trajo Zhuan Falun. Se mostró escéptico al principio, pero después de terminar de leer el libro, nos dijo emocionado: "Este es el verdadero Fo Fa". Como resultado, mi abuelo también aprendió Dafa.

Al poco tiempo de practicar, se veía mucho más joven y más enérgico. Cuando caminaba con mi padre en la calle, la gente a menudo pensaba que éramos hermanos.

Antes de aprender Dafa, mi abuelo vio durante su meditación, a mi abuela de pie junto a él, junto con sus hijos y aparentaba estar muy mal (o enferma). Mi abuelo se sentía tan triste que no podía concentrarse en la meditación. Después de comenzar a practicar Dafa, le pidió al Maestro Li (el fundador de Falun Dafa) que no lo dejara ver esa escena de nuevo. De hecho, nunca volvió a ver a mi abuela en su meditación.

Mi niña pequeña

Di a luz a mi hija en 1997. Cuando ella sólo tenía un año de edad, la sostuve en mi brazo y le dije: "¿Por qué has venido aquí?".

No esperaba una respuesta, ya que ni siquiera sabía cómo hablar en ese momento. Para mi sorpresa, me respondió muy seriamente: "Mamá, vine aquí para obtener el Fa".

Me quedé impactada. ¡Era sólo un bebé!

Me decidí a ayudarla a obtener el Fa y a estar a la altura de sus expectativas. No podía ver nada en otras dimensiones, pero ella podía. A veces, cuando leía el Fa con ella, a menudo agitaba sus pequeñas manos en el aire, diciéndome que el Falun en el libro giraba de forma muy bella.

Una noche fui a una habitación de al lado para hacer los ejercicios después de que se durmiera. Después de una hora de ejercicio, volví a su habitación, muy calladamente. Pensé que ella había dormido bien y que no se había despertado mientras practiqué mis ejercicios.

Para mi sorpresa, tan pronto como entré en su habitación, vi a la pequeña agitando sus manos en su cama, muy emocionada. "El Maestro acaba de salir", me dijo.

Casi lloré cuando dijo eso. Me sorprendió y me conmovió. No sabía si el Fashen del Maestro me estaba fortaleciendo durante el ejercicio o ayudándome a cuidar a la niña. Después de todo, Él está con nosotros todo el tiempo.

Cuando leía el Fa a mi hija cada noche, ella saltaba alrededor. Si paraba, me decía: "Mamá, no dejes de leer". A veces, si estaba cansada y no leía el Fa, ella venía, me ponía el libro en la mano y me pedía que le leyera el Fa.

Además de estudiar Zhuan Falun, también aprendió los poemas en Hong Yin y los memorizó.

Hice la meditación sentada un día después de que ella se durmiera. Cuando estaba luchando con el dolor agotador en mis piernas, la niña se despertó de repente. Se frotó los ojos, se sentó, me miró y puso sus piernas en la posición de loto doble. Cerró los ojos y comenzó a meditar conmigo. Sabía que el Maestro me estaba dando ánimo a través de ella. Me sentí muy conmovida.

Cuando la persecución comenzó años después, mi hija también distribuyó volantes conmigo. Era tan pura e inocente, como un ángel del Cielo.

Ese período de tiempo fue el más feliz de mi vida. Practicar Dafa mejoró mi salud y elevó mi mente. Me volví más humilde y pacífica. Ya no luché por ganancias personales o por seguir adelante. Toda mi cosmovisión cambió por completo.

Sin arrepentimiento

Un año después de que mi abuelo aprendió Falun Dafa, el partido comunista lanzó su persecución nacional a Dafa en 1999. Mi tío y mi tía temían que mi abuelo fuera perseguido de nuevo, como sucedió durante la revolución cultural. Quemaron todos los libros de Dafa de mi abuelo, lo observaron atentamente y no le permitieron practicar, tal como mi abuela hizo cuando era más joven.

No mucho después, mi tía tuvo una enfermedad muy extraña y se quedó en cama. El hospital no pudo encontrar una cura y mi tío empezó a cuidarla.

Cuando el ambiente de cultivación de mi abuelo fue destruido, su condición física y mental fue gradualmente cuesta abajo. Finalmente falleció en 2005.

El día que murió, vi en un sueño innumerables flores de loto que caían del cielo. Yo sabía que mi abuelo había ido a un buen lugar, pero era tan triste porque no fue capaz de completar su viaje en la cultivación de Dafa.

Mi hermana era empleada del gobierno. Tan pronto como comenzó la persecución, fue despedida de su trabajo y perdió su casa proporcionada por el gobierno. Su familia se quedó de repente en una situación desesperada.

En 2002, fue arrestada por informar a la gente sobre la persecución y sentenciada a ocho años de prisión. Mi cuñado fue condenado a tres años con cinco años de libertad condicional. Mi hermano menor y su esposa también fueron arrestados por difundir folletos y buscar la liberación de otros practicantes;ambos recibieron dos años de trabajo forzado.

Como las autoridades pusieron a la familia de mi hermana y hermano en prisión y campos de trabajo, no me perdonaron. Poco después me pusieron bajo vigilancia, también me arrestaron y sentenciaron a 13 años de prisión.

A mi mamá, la policía y la oficina 610 local la habían identificado como la coordinadora local y la arrestaron el 22 de julio de 1999. La detuvieron durante dos días y le negaron comida y la privaron del sueño. La policía le extorsionó con varios cientos de yuanes antes de liberarla.

La policía seguía acosándola. Mientras todos estábamos en prisión, la policía la arrojó a un centro de lavado de cerebro en un intento de "transformarla" y obligarla a renunciar a Dafa, dejando atrás a sus dos nietos de cuatro y cinco años solos.

Mi madre estaba tan preocupada por los niños que firmó una declaración de renuncia en el centro de lavado de cerebro. Se apresuró a casa a encontrar a los dos niños hambrientos. Rápidamente preparó algo de comida para ellos y lo devoraron todo. Más tarde, mi madre escribió una declaración solemne expresando su pesar por la declaración y esperaba hacerlo mejor en el futuro.

En 2007, mi mamá fue reportada a la policía cuando hablaba con la gente en la calle sobre Falun Dafa. Fue detenida durante diez días, tiempo durante el cual parecía estar gravemente enferma y fue liberada por la policía.

Durante muchos años, a pesar de toda la adversidad en nuestra familia, mi madre se mantuvo firme en la cultivación de Dafa e hizo todo lo posible para que la gente supiera de la persecución. Mientras tanto, ella y mi padre, las únicas dos personas de nuestra familia que permanecieron fuera de la prisión, trabajaron muy duro para ahorrar suficiente dinero para nosotros.

Tristemente, cuando todos fuimos liberados y regresamos a casa, mi mamá desarrolló serios problemas físicos y falleció en 2015.

Mientras estuvimos bajo arresto, mi madre enfrentó el peligro de ser arrestada en cualquier momento, mi padre, que no practicaba Falun Dafa, soportó una tremenda presión que nadie puede imaginar.

Mi padre era un alto ejecutivo de una gran empresa nacional. Perdió su puesto después de que comenzara la persecución y enfrentó el constante temor de perder a cualquiera de nosotros en cualquier momento. El secretario del partido comunista en su lugar de trabajo continuó presionándolo para divorciarse de mi madre y dejarnos atrás para recuperar su posición. Él lo rechazó y dijo al secretario del partido que era incorrecto que el partido persiga a la gente buena y separar a las familias, tal como lo hicieron durante la revolución cultural.

Durante esos días extremadamente oscuros, mi padre hizo lo mejor que pudo con su amor para nuestra familia. Esperó a que volviéramos a casa y nos reuniéramos con él. Aunque no practicó Dafa, fue grandemente bendecido. Después de todas las dificultades, todavía está en buena salud y disfruta de nuestra compañía a su lado ahora.

Nosotros, a pesar de toda la dura persecución, todavía tenemos el corazón firme para Dafa. Ahora apreciamos cada día y tomamos el tiempo para cultivarnos bien y dejar que más gente sepa sobre la persecución.

Dafa trajo paz y felicidad a nuestra familia. Sin la persecución, más familias se habrían beneficiado de Dafa.