(Minghui.org) Practico Falun Dafa desde hace 22 años. Una vez, mientras leía el Semanario Minghui, un pensamiento apareció de repente en mi mente: “Debes aprender cómo hablar amablemente”.

Siempre fui criticada por el tono de mi voz. Aunque mis intenciones eran buenas, las personas no apreciaban la forma en que me daba a entender.

Todo esto provenía del adoctrinamiento del pueblo chino por parte del partido comunista chino (PCCh). En realidad, no ser capaz de comunicarme con compasión hacía difícil estar junto a otras personas.

Después de darme cuenta de esto, aprendí gradualmente a hablar de una forma agradable. Me tomó más de 12 años mejorar mi forma de hablar por medio de cultivar mi xinxing. Tanto mi familia como mis compañeros practicantes fueron testigos de mis avances.

Mirar hacia adentro en vez de hacia afuera

Alrededor de 10 años atras, el estado de cultivación de la practicante Chen [alias] no era bueno. Estaba profundamente apegada al sentimentalismo. Su esposo la había dejado, y su hija vivía muy lejos, así que se volvió, emocionalmente, muy apegada a su gato.

Los practicantes estábamos muy preocupados por ella. Intentábamos hacer que su estado mejorara. A fin de ayudarla, me recordaba: tengo que acercarme a ella con amabilidad.

Un día estudiamos el Fa y luego comenzamos a intercambiar. Empezamos a hacerlo con una mente calma, pero pronto comenzamos a discutir hasta que nos agitamos. Levantamos nuestras voces y nos peleamos.

La Sra. Chen se las arregló para calmarse primero. Cuando vio que yo seguía enloquecida, me dijo: “Un Buda vino a ayudar, pero ¿cómo se comporta ella misma?”. Y dejó la habitación para preparar el almuerzo. Me sentí muy decepcionada y de muy poco humor para comer. Regresé a casa llorando.

Desde los principios del Fa entiendo que tengo que mirar hacia adentro en vez de hacia afuera. Sin embargo, solo me estaba cultivando en la superficie. No sabía cómo ser diplomática, sin embargo todavía trataba de encontrar excusas.

Por ese entonces tenía una gran cantidad de apegos. Me faltaba compasión, y no podía mirar las cosas desde otras perspectivas. Pensé: ¿Puedo así ayudar a otros? Lo que hacía era únicamente mirar hacia afuera.

Malos entendidos causan problemas

Hubo otro caso en el cual mis apegos resultaron dañinos para otros. El practicante Hu [alias] era parte de nuestro grupo de estudio. Este practicante tenía problemas al pronunciar ciertos caracteres apropiadamente, así que tomé la iniciativa de corregirlo.

Cada vez que le tocaba el turno de leer, lo corregía. Sentía que estaba siendo muy estricta con el motivo de ser responsable hacia él. Incluso realicé una lista de palabras con las que tenía problemas y le agregué la fonética china debajo de cada una.

Después de que hice esto algunas veces, dejó de venir a nuestro grupo de lectura. Otro practicante trató de animarlo a que regrese, pero no lo hizo.

¿Fueron mis acciones las que lo alejaron? Yo tomaba las cosas por sentado, pensando que lo que creía era lo correcto, forzando mi opinión sobre otros. Mi tono era contundente y no hablaba con amabilidad. Ignoraba el hecho de que lo que yo veía como una mala pronunciación, solo podía deberse a los efectos de su idioma nativo.

Ser fácilmente malhumorado y temperamental

Ser fácilmente malhumorado y temperamental también es un gran obstáculo para comunicarse con diplomacia.

Un año, en el mes de agosto, el lugar donde imprimíamos materiales de aclaración de la verdad estaba muy húmedo. Un número de DVD vírgenes permanecieron al descubierto por un tiempo, y cuando quisimos usarlos, estaban inservibles. Al parecer la humedad los había dañado.

Unos pocos días después, cuando regresé a esta habitación, vi otra caja de DVD nuevamente abierta. Me puse furiosa.

Estando sola, no pude controlar mi temperamento, y golpeé mi puño contra la mesa. Sabía que dejar correr mi temperamento no estaba bien, sin embargo no pude controlarme.

La Sra. Ran [alias] trabajaba conmigo haciendo los materiales. Cuando la vi al día siguiente, le mostré mis moretones. Se quedó muy sorprendida y preguntó qué había pasado. La culpé por dejar la caja de DVD vírgenes otra vez abierta. Ella dijo: “¿Estas bromeando?”.

¿Cómo pude ser así? Ella no lo había hecho a propósito. Al ver el problema, tendría que haberle recordado amablemente que sea más cuidadosa para que no perdiéramos más DVD. Mi mal temperamento me hizo sufrir, y los moretones no desaparecieron rápidamente.

El Maestro dijo:

"Todos saben, los cultivadores siempre dicen esta frase: si tienes ese corazón, tu corazón se mueve; si no tienes ese corazón, es como después de que el viento sopla, no sientes nada. Algunas personas te dicen que vas a matar y provocar un incendio, cuando lo escuchas, sientes que es realmente divertido. (Shifu ríe) ¿Cómo puede ser? Con una sonrisa ya pasa. No lo tomas en absoluto como un asunto, porque no tienes tal corazón, esta frase no te puede mover. Sin ese corazón, no se te puede tocar. Si tu corazón se movió, ¡esto significa que sí lo tienes! Tu corazón realmente no está muy tranquilo, esto explica que esta cosa ni es pequeña. (Aplausos) ¿Acaso no debes cultivarte?". (Enseñanza del Fa en el Fahui de San Francisco)

Cuando me siento desbalanceada, mis palabras tampoco suenan pacíficas y terminan causando daño a otros. En la superficie, aparenta ser falta de diplomacia, lo que no parece ser un problema mayor. Pero muy en el fondo, es una manifestación de muchísimos apegos ocultos.

Después de eliminar los apegos, pude entrar en la tranquilidad con más facilidad. Ya no me conmuevo con tanta facilidad como antes. Y tampoco es tan probable que pierda el temperamento.