(Minghui.org) Residente de la ciudad de Luzhou fue juzgada por sus creencias mientras su abogado era retenido afuera por protestar en contra de las prácticas ilegales del tribunal.

La señora Luo Shizhen fue arrestada en el 25 diciembre de 2015 , por hablar a la gente sobre Falun Gong, una disciplina espiritual que está siendo perseguida en China por el régimen comunista. El abogado estaba preparando la defensa de su inocencia, por la razón de que ninguna ley china criminaliza a Falun Gong.

Sin embargo, al abogado se le impidió defenderla en el juicio celebrado en el 20 de septiembre de 2016. Él expresó su desacuerdo con ser privado del derecho de representar a la Sra. Luo en el tribunal y reiteró su apoyo a los esfuerzos de su cliente en darle fin a la persecución.

Cambio repentino de la sede.

Cuando el abogado recibió el aviso del juicio el 6 de septiembre, se confirmaba que la audiencia sería celebrada el 13 de septiembre en la sala 9 del tribunal intermedio de la ciudad de Luzhou. Él también esperaba que le dieran una copia de la acusación, pero nunca se le envió el documento a pesar de la obligación legal.

Unos días después, notificaron al abogado que la audiencia había sido aplazada para el 20 de septiembre, pero la localización o había sido cambiada.

El abogado llegó a la juzgado a las 8:00 a.m. el 20 de septiembre. Un empleado del tribunal le llamó en torno a las 8:30 a.m diciendo que la sede había sido cambiada a la sala de justicia dentro del centro de detención Naxi, donde su cliente estaba detenida

El abogado protestó contra el cambio repentino de la sede sin previo aviso, pero no pudo hacer mucho al respecto.

Registro y prohibición ilegal del ordenador personal

El abogado se apresuró en ir al centro de detención, pero fue retenido en el exterior. Los alguaciles le exigieron pasar un registro de seguridad. Él protestó en contra de esta práctica ilegal, la ley china exime a los abogados defensores a someterse a tales registros.

El juez salió para decirle al abogado que debía dejar afuera su portátil y usar en su lugar un ordenador del tribunal. El abogado argumentó que no había ninguna ley que prohíba usar ordenadores personales en los juicios y retó al juez a presentar una base legal para sus irracionales actos.

El juez ignoró al abogado y fue dentro para empezar el juicio, que concluyó en menos de treinta minutos.