(Minghui.org) Como practicantes de Falun Dafa, es importante recordar que siempre tenemos la protección del Maestro. Cuando nos enfrentamos con pruebas y tribulaciones, mantener este pensamiento en la cabeza puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Lo explicaré según mi experiencia personal.

Mi marido fue hospitalizado después de tener un segundo derrame cerebral. El segundo fue mucho más grave que el primero. Él no podía enderezarse, ni siquiera girarse en la cama cuando regresó del hospital así que en la cama tenía que comer, beber y hacer sus necesidades .

Ninguno de nuestros hijos viven cerca, así que yo sola tenía que hacerme cargo de él durante todo el tiempo y era agotador. Tenía falta de sueño constantemente y me sentía agobiada.

Era especialmente difícil por las noches. Estaba sediento o tenía que orinar o darse la vuelta. Yo apenas podía dormir. Aveces estaba tan cansada que me quedaba dormida mientras le ayudaba a cambiar de posición.

Todo el día era un gran reto para mi. Empeoraba las cosas que no cooperara cuando le ayudaba. Era muy difícil moverlo.

Durante ese tiempo, todos los tipos de quejas, rabia, preocupación, frustración y desesperación ocuparon mi corazón. No pude mantener el ritmo en el estudio del Fa, la práctica de ejercicios e incluso mejorar mi xinxing. Al final, después de dos noches consecutivas casi sin dormir, me derrumbé en mi cama.

En un estado de severa fatiga, me sentía mareada, veía estrellas y sentía mi corazón latiendo anormalmente. ¡Me di cuenta de que las viejas fuerzas habían irrumpido en él!

Ví en otra dimensión un disco con agujeros en miniatura en el centro. Entre los agujeros y el borde del disco, había muescas hexagonales como pequeñas marcas. Había joyas de zafiro saltando arriba y abajo en dos de ellas.

Mi corazón daba un vuelco cada vez que ellas saltaban. Traté de permanecer en calma pero en realidad no era capaz. Entonces, un tercer zafiro apareció y mi corazón comenzó a latir muy rápido. ¡Comprendí que algo estaba tratando de tomar mi vida!

Oí una voz diciendo: "Cuando todos los agujeros se llenen con las joyas tu morirás". Pensé para mis adentros, "bien, simplemente toma mi vida, ya tuve suficiente". Después pensé "No, soy una discípula de Dafa, ¡tú no puedes tocarme!

Grité hacia las profundidades de mi corazón "¡Maestro sálvame! ¡Maestro sálvame! Quiero volver a casa contigo". No sé cuantas veces grité hasta que el disco finalmente desapareció. Tan pronto como se fue, me levanté sudando de pies a cabeza. Grité hacia afuera: "Gracias maestro, tú me has salvado".

Mis actitudes de resentimiento y enfado durante la prueba de cuidar de mi marido estuvieron cerca de matarme. Aprendí que para un practicante cada pensamiento es definitivamente muy importante.

A través de esta tribulación, aprendí que necesito cultivar mi xinxing todo el tiempo en lugar de solo cuando nos encontramos con problemas. Ante las tribulaciones, necesito estar en calma y recordar que soy una discípula de Falun Dafa. Necesito usar el Fa para rectificar mi entorno y pedirle ayuda al Maestro cuando necesite ayuda.

Además, Aprendí que los practicantes pueden ayudar siempre a sus compañeros cultivadores cuando estén en problemas. Esto evitará que las malvadas fuerzas tengan oportunidad de atacar.

Yo no podría haber pasado esta tribulación sin la ayuda y el apoyo de mis compañeros practicantes. Mandaron pensamientos rectos para mi, que me ayudaron para mejorar mi carácter y compartieron su energía positiva y su amabilidad. También vinieron a mi casa para estudiar el Fa y compartir acerca de sus entendimientos conmigo.

Ahora que mi xinxing y mi actitud han mejorado mi marido se siente mucho mejor. Él puede incluso bajar las escaleras con mi ayuda. Pero lo más importante es que puedo dejarlo solo mientras voy a aclarar la verdad.

Gracias Maestro por tu compasión. Gracias compañeros practicantes por vuestra ayuda.