(Minghui.org) El Edmonton Sun, un importante periódico en la capital de la ciudad de la provincia de Alberta, Canadá, publicó un artículo el 25 de julio de 2015, informando sobre una manifestación que realizaron ese día los practicantes de Falun Gong. Titulado “Seguidores de Falun Gong piden por el fin de la persecución en una manifestación pacífica en Edmonton”, el artículo dijo que los practicantes esperan que la presión pública ayude a que se presenten cargos contra Jiang Zemin, ex líder del partido comunista chino, por los abusos a los derechos humanos cometidos contra los practicantes.

“Estos abusos a los derechos incluyen asesinato de miles, encarcelamiento de millones en campos de trabajo, torturas, violaciones de decenas de miles, destrucción de decenas de miles de familias, y denuncias de más de 60.000 asesinados por funcionarios estatales para la venta de sus órganos a través de hospitales dirigidos por el estado”, escribió el informe, citando palabras del practicante Chi Teh.

“El régimen comunista controla a la gente a través del lavado de cerebro, mentiras, y violencia, por eso no les gusta nada que le enseñe a la gente a ser mentalmente independiente”; dijo otro practicante, Chunyan Huang.

Edmonton Sun informó sobre una manifestación realizada por practicantes de Falun Gong en Edmonton el 25 de julio de 2015.

Jiang comenzó la persecución el 20 de julio de 1999. Muchos practicantes han sido desde entonces acosados, atacados, encarcelados y enviados a campos de trabajo forzado o incluso siendo víctimas de la sustracción de órganos estando con vida.

Huilan Chen, que comenzó a practicar cuando tenía 21 años, fue detenida por siete días y forzada a renunciar a su creencia a Falun Gong. Muchos practicantes que fueron determinados en su fe fueron sujetos a una cruel persecución, con lavado de cerebro, persecución financiera, o sustracción forzada de órganos estando con vida.

“Desde mayo, seguidores de Falun Gong presentaron más de 80.000 querellas legales contra Jiang Zemin ante la corte suprema de China, acciones legales que un año atrás habían encontrado severas represalias”.

Según el artículo, muchos medios no reportan sobre la persecución por la presión y sobornos de los chinos comunistas. “Estas son prácticas repudiables, pero no tan conocidas por la sociedad canadiense, e incluso entre los legisladores o diputados canadienses”; dijo Brent Rathgerber, diputado nacional por Edmonton-St. Albert.