(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa el 30 de diciembre de 1996. En una semana, mis enfermedades desaparecieron. A pesar de haber leído las enseñanzas del Maestro y haber hecho los ejercicios todos los días, me quedé pensando y manejando los asuntos desde el punto de vista de una persona común.

Discutía siempre que aparecía un conflicto. Estaba llena de remordimiento por no ser capaz de mantener mi corazón impasible. Aunque había estado practicando por varios años, no podía controlar mi temperamento. Me pregunté: “¿Soy yo la que no puede ser capaz de seguirle el ritmo a los demás, aunque sea en un cinco o diez por ciento? Como practicante del período de la rectificación del Fa, debo hacer bien las tres cosas y asistir al Maestro en la rectificación del Fa”.

El Maestro nos enseñó en “No contender” en Hong Yin III,

“Si te encuentras con fuertes discusiones, no contiendas con palabras de pelea

Buscar la causa hacia adentro es xiulian

Mientras más se piensa en explicar, más pesa el corazón

Magnánimamente, sin apegos, aparece la visión clara”

Determinada a mejorar, decidí comportarme como una practicante y primero mirar para adentro. Cada vez que un conflicto surgiera, recordaría las enseñanzas del Maestro en lugar de contender.

Una vez, al regresar tarde a casa de un viaje a una aldea, a la que fuimos para entregar materiales de información de Falun Gong; mi esposo estaba furioso y me criticó, ya que no había llegado a tiempo para preparar la cena. Comencé a discutir, pero en ese momento decidí mantener mi temperamento bajo control. Por el contrario, dije inmediatamente: “Lo siento. Tienes hambre. De ahora en más, me aseguraré de regresar a tiempo. Por favor, discúlpame esta vez”. Y empezó a reír.

Cuando mi mentalidad humana cambió, mi marido también cambió. Comenzó a llevarme en moto cada vez necesité repartir materiales o ir al grupo de estudio del Fa. Algunas veces cuando estoy haciendo los quehaceres domésticos, me recuerda que me detenga, que ya es hora de enviar pensamientos rectos.