Estación de peajes abandonada convertida en centro de lavado de cerebro para Falun Gong

(Minghui.org) Una estación de peajes abandonada fue transformada por el gobierno de la ciudad de Shulan en una instalación de lavado de cerebro donde las autoridades ejercen coerción sobre los practicantes de Falun Gong para que renuncien a su fe.

Desde su apertura el 21 de agosto de 2014, casi 100 practicantes de Shulan y ciudades aledañas de la provincia de Jilin han estado retenidos allí. En la actualidad, la mayoría de los practicantes detenidos son quienes presentaron sus denuncias contra el ex dictador chino Jiang Zemin, quien inició la persecución a Falun Gong en 1999.

Centro de lavado de cerebro en la localidad de Xiaying, provincia de Shulan.

Resumen sobre el centro de lavado de cerebro

El edificio de dos plantas está ubicado cerca del pequeño poblado de Xiaying. La puerta no tiene identificación, sólo un cartel que identifica la instalación en la entrada.

El edificio tiene una oficina de rotación de turnos, cantina, cocina, unos cuartos de depósito, y una gran sala de reunión que puede albergar a 20-30 personas. Los practicantes de Falun Gong que son llevados al centro son retenidos individualmente en el segundo piso.

Hasta la fecha, el centro ha realizado diez sesiones, cada una con una duración entre 10 días y un mes.

Tácticas de lavado de cerebro

En un intento por hacer que los practicantes renuncien a su fe, se utilizan varias tácticas: monitorear, restricción de la movilidad, y sesiones intensas.

Cada practicante es monitoreado las 24 horas por dos individuos, que son colegas de los practicantes o empleados del gobierno local. Son responsables de reportar los movimientos de los practicantes a la oficina 610 durante la mañana siguiente.

Quienes se niegan a renunciar a su creencia tienen libertad restringida: cada movimiento es controlado, hasta comer, dormir y usar el sanitario.

Cada cuarto tiene cámara de vigilancia, barrales en las ventanas y televisión y DVD que reproducen los videos de propaganda.

Los practicantes encerrados en el centro son forzados a asistir a sesiones intensivas de lavado de cerebro tres veces al día: de 7:30 a 11:30, 13:30 a 15:30, y 18:30 a 21:30. Estas sesiones incluyen videos de propaganda y charlas de adoctrinamiento que tienen un costo de 200 yuanes diarios cada una.

Fuera de las sesiones, los monitores y agentes de la oficina 610 “conversan” con los practicantes, señalando sus deficiencias e intentando estrategias para persuadirlos a renunciar a Falun Gong.

Los practicantes y sus familias también son amenazados. Por ejemplo, se les dice: “Lo estamos enviando a clases para salvarlo. No lo enviaremos a prisión y puede regresar a su casa si es “transformado”. Pero si no se “transforma” y se niega a hacerlo, será condenado. No sobrevivirá a la tortura en prisión y será su lecho de muerte”.

Cúpula directiva del centro

El centro de lavado de cerebro está actualmente al mando de Li Yongbo. Como Li asumió como jefe de la oficina 610 de la localidad, a fines de 2013, comenzó a empujar al centro de lavado de cerebro en la ciudad de Shulan y estuvo involucrado activamente en la persecución a practicantes de Falun Gong en la provincia de Jilin.

Li ha intensificado los esfuerzos en el centro de lavado de cerebro en mayo de este año.

Información de contacto de los perpetradores:

Li Yongbo (李永波), jefe de la oficina 610 local: [phone]

Wang Hanming (王汉明), subjefe de la oficina 610 local: [phone]

Dong Qiming (董其明), jefe del equipo de la oficina de la división de seguridad nacional: [phone]

Wu Yingchun (武迎春), instructor: [phone]