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​Historia de cultivación de un productor de documentales

Dic. 2, 2015

(Minghui.org) La Justicia siempre ha significado todo para Alejandro Nadal. Aún cuando era chico, defendía a otros chicos que estaban siendo intimidados y no podía entender por qué alguien quería dañar a otros.

Siempre estaba del lado de los indios americanos cuando miraba Western y se imaginaba a sí mismo saltando hacia la película para ayudarlos.

El productor de documentales Alejandro Nadal.

Alejandro nació y creció en Madrid, pero mientras puede recordar siempre ha sentido una fuerte relación con China. Eligió el carácter Chino “Yi” como un tatuaje cuando era joven porque ese carácter significa “Justicia”. Luego aprendió que ese carácter tiene un significado más profundo.

Como un productor de documentales, a menudo elegía temas relacionados a China cuando hacía documentales cortos, porque puede relacionarse a las virtudes de la cultura tradicional China.

También estudió filosofía y cultura china e hizo Tai Chi.

Así que cuando escuchó acerca de un chino-americano encarcelado por hablar de un grupo de gente siendo perseguida por sus creencias de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, naturalmente quiso ayudar.

¿Por Qué la gente buena es perseguida?

En el 2006, estaba trabajando en un documental acerca de violaciones a los derechos humanos en Birmania. Durante su investigación sobre el tema se mantuvo atento a las historias acerca de practicantes de Falun Gong siendo perseguidos en China por el partido comunista chino (PCCh). Esta información lo sorprendió porque tenía muchos canales de los cuales adquiría noticias e información, pero no había escuchado ningún reporte de tales severos abusos a los derechos humanos.

Cuando Alejandro leyó más acerca de la persecución a Falun Gong, no podía entender porqué había gente siendo perseguida que vivían vidas íntegras y ayudaban a los demás.

Cuando se dio cuenta: “Aquellos practicantes de Falun Gong quieren ser realmente buenas personas. Yo quiero ser también una buena persona, así que la práctica resonó en mí”.

Alejandro leyó Zhuan Falun, el libro principal de Falun Gong.

Su investigación sobre la historia del PCCh lo ayudó a entender la causa de la persecución. Alejandro Notó que: “El partido comunista se estableció a sí mismo en base a mentiras, así no puede tolerar a Falun Gong enseñándole a la gente a ser verdadera, porque perderían su control sobre la gente si alguien dijera la verdad. Si cada persona China practicara Falun Gong entonces ni uno estaría del lado del partido comunista porque nadie quisiera ser parte de una gran mentira”.

Cuando leyó acerca de Charles Li, un chino-americano encarcelado en China por tres años, decidió cambiar el tema de su documental hacia Charles Li y la persecución a Falun Gong.

Relacionándose a Falun Gong

Cuando tomó la decisión de documentar abusos a los derechos humanos contra practicantes de Falun Gong en China, estaba en un punto de su vida donde cuestionaba su vida y su carrera y estaba deprimido.

Como continuaba con su investigación, encontró un artículo online del sitio de práctica local. Para descubrir más de la práctica, se unió a un grupo de practicantes para aprender los ejercicios y leer los libros de Falun Gong.

Alejandro estaba impresionado con Falun Gong debido a que el grupo no tenía reglamentaciones obligatorias ni rituales, lo cual era adecuado para él, en tanto que prefería ser independiente y no afiliarse oficialmente a ninguna organización.

Para completar su documental, viajó a los Estados Unidos y pasó tiempo en New York y Washington DC.

Beneficiándose de la práctica

Alejandro encontró su experiencia en los los Estados Unidos beneficiosa a su práctica. Además de continuar su investigación, se unió a otros practicantes para hacer los ejercicios, estudiar el Fa y aprender como enviar pensamientos rectos. Podía sentir una sensación de felicidad retornando a su vida y paró de tomar la medicación para su depresión.

“Sentí cómo mi cuerpo estaba liviano y flotante cuando dejaba mi departamento después de practicar los ejercicios y estudiar el Fa” recordaba Alejandro. “Los extranjeros en la calle me sonreían. No eran amigables unas pocas semanas atrás cuando arribé a Nueva York”.

Su tiempo en Estados Unidos fue muy productivo. Completó el documental y volvió a Madrid tres meses más tarde.

Su madre estaba sorprendida al verlo lucir tan radiante y escuchar que no necesitaba más antidepresivos. Cuando supo que los drásticos cambios de su hijo fueron a causa de Falun Gong, también comenzó a leer Zhuan Falun.

Las relaciones de Alejandro con su madre solían ser muy confrontativas. Pensó que su madre era una persona muy controladora que mantenía una actitud negativa hacia sus decisiones. Objetaba su viaje a Nueva York y lo desafiaba: “¿Qué puedes hacer allí? ¿Piensas que puedes cambiar el mundo con tu documental?”.

Después le refutaba a su madre con comentarios como “Es mi vida” o “No son tu asunto” y “¡Déjame sólo!.

Sin embargo, después de retornar de Nueva York los padres de Alejandro podían ver los cambios positivos en él. Se volvió más amigable y considerado hacia los demás y fue menos confrontativo con sus padres.

Encontró un buen trabajo en una empresa de producción de películas y aún tiempo para ayudar a crear conciencia de la persecución a Falun Gong en China.

Su familia ahora lo apoya en su trabajo.

Permitiendo que más gente sepa de la persecución

“China es segundo país más influyente en el mundo” comentó Alejandro “Afecta casi toda vida, porque casi todos nosotros usamos algo hecho en China. Sin embargo, raramente hay algún reporte [acerca de la persecución a Falun Gong] en los medios de lengua española. El estado chino controla los medios y exporta su propaganda al resto del mundo”.

Así que utiliza su habilidades del lenguaje para traducir noticias acerca de lo que realmente pasa en China. “Quiero que la gente hispano-hablante sepa la verdad y no caiga en la propaganda engañosa. Mi corazón está con el pueblo chino”.

Alejandro estaba afligido al escuchar que muchos practicantes de Falun Gong eran encarcelados y torturados. Sin embargo, también podía entender el comportamiento de la policía y los guardias de la prisión.

“Están controlados por su lado malo. Creo también tienen un lado amable como todos nosotros”, explicó. “La gente hoy en día en China casi adora el dinero, lo que le permite a su lado malo controlarla. Puedo entender esto”.

Especialmente quiere decirles a aquellos quienes están todavía involucrados en la persecución que paren de dañar a gente buena e inocente. “Esto no es bueno para ti, ni para tu familia, ni tu futuro estar involucrado en la persecución. ¡Puedes parar esto! ¡Cree en ti mismo! Puedes dar vuelta la página de la vida y comenzar una nueva. Puedes cambiar y también puedes ser una buena persona”.

Añadió Alejandro: “Creo que la cultura tradicional china puede dar una gran cantidad de consejos al resto del mundo. Deben estar orgullosos de ser chinos porque tienen una cultura muy rica y profunda”.

Finalmente, tiene esperanzas que toda persona china hará una buena elección entre bien y mal. “La gente China cree que ‘lo que viene va’. Así que por favor trata a las otras personas con compasión y sé compasivo hacia tí mismo. Ponte del lado de la gente buena y no de los perseguidores. Serás recompensado a tiempo”.