(Minghui.org) El 27 de agosto de 2015, varias comisarías de una ciudad al nordeste de China arrestaron a 10 practicantes en sus casas por presentar demandas contra Jiang Zemin, luego de obtener esas demandas de la fiscalía suprema. 

La policía amenazó con arrestar a más practicantes, pero los practicantes diligentes no se perturbaron. A continuación compartimos dos ejemplos de fuertes pensamientos rectos que permitieron superar el acoso policial: 

Cuando la policía irrumpió en la casa de un practicante, él se mantuvo en calma y pensó: "La policía no puede ver nada". 

La policía dio vueltas por toda la casa buscando la computadora e impresora del practicante, pero no pudo encontrarlas, incluso cuando estaban frente a él. Gritaron al practicante: "¿Dónde está tu computadora?". 

La policía entonces empezó a buscar en el bolso del practicante y no pudo encontrar los cuatro teléfonos celulares que estaban dentro. De nuevo la policía gritó: "¿Dónde están tus teléfonos?".

Otra practicante que fue arrestada y llevada a la comisaría, fue interrogada por más de 10 horas. Demandaron que nombre del organizador detrás del movimiento para demandar a Jiang Zemin y a la persona que la ayudó a escribir la demanda. 

Se negó a cooperar y les contó qué es Falun Gong y por qué Jiang está siendo demandado. Al final, la policía se cansó, la encerraron en la celda y se fueron. 

La practicante se acercó a la puerta cuando todos se retiraron. Probó girar el picaporte, pero estaba cerrado. Mantuvo fuertes pensamientos rectos y probó de nuevo. Salió de la estación de policía y se fue caminando en la oscuridad.

Cuando los oficiales denunciaron la desaparición a su superior, este se enojó y ordenó que liberaran a los nueve practicantes restantes, así que todos en la fuerza podrían salir a buscar a la practicante que había desaparecido.

Se le ordenó a los oficiales que no regresaran a su casa o trabajo hasta que la encontraran. Estacionaron varios patrulleros cerca de la casa del practicante, esperando atraparla. 

Los días pasaron y no hubo signos de ella. La policía se cansó y detuvo la búsqueda. Le dijeron a su familia: "Díganle que regrese, no la volveremos a buscar".